THE QUIET. (Gay)

IV

»Maybe I know, somewhere
Deep in my soul
That love never lasts
And we've got to find other ways
To make it alone
But keep a straight face

And I've always lived like this
Keeping a comfortable, distance
And up until now
I had sworn to myself that I'm content
With loneliness

Because none of it was ever worth the risk

But, you are, the only exception.«

Un rato después de que la pareja se va de la habitación, El y yo salimos también, tras poneros al corriente de lo que había sido de nuestras vidas en el tiempo que no nos vimos. Cuando vamos caminando por uno de los muchos pasillos, pasa un chico que por alguna razón llama mi atención más de lo que me gustaría; lleva jeans holgados, una sudadera gris con el gorro puesto sobre una gorra y lentes oscuros, tiene una mano en el bolsillo de su sudadera y en la otra lleva un bolso como de equipaje, lo miro fijamente hasta que da la vuelta en una esquina que lleva a otro pasillo, pero antes de eso, giró su cabeza hacia mí, supongo que sintió mi mirada, pero durante esos dos segundos en los que me vió, sentí que era él. Realmente lo sentí.

-Creí que habías dicho que él era tu única excepción.- me dice Eli cuando por fin regreso de mi pequeño momento de observancia

-Era él.-digo, pero parece como si lo estuviera diciendo al viento en lugar de a ella

-Wow, realmente no creí que te hubiese afectado tanto, ahora lo ves hasta en la lesbiana que pasa...

-Ni siquiera era mujer,¿Cómo se supone que sea lesbiana?

-No lo decía literal, Sher. Es sólo que, no se le veía la cara, y no mostraba mucho de sí mismo como para que estuvieras tan seguro de que es él, o de que es cualquier otra persona. Y pues, Tom me contó también un poco de tu situación con ese chico, así que quizá sólo era tu mente, haciéndote una mala jugada.-responde con tono de preocupación y una mirada tipo maternal

-Tienes razón, quizá sea sólo eso.-le digo, pero es solamente para tranquilizarla, porqué yo sigo creyendo en lo que mi instinto me dijo.

Seguimos caminando, e intento hacer chistes con mi amiga, para que se olvide de mi mirada fija en el chico misterioso del pasillo y deje de pensar que estoy así de loco como para imaginar a mi estúpido novio en cualquier persona.

Por fin llegamos al parque donde quedamos de vernos con Tommy y Ximena y nos sentamos en los columpios a esperarlos. Pasan alrededor de quince minutos, y por fin veo a mi mejor amigo llegar, pero no viene acompañado, lo cual me extraña

-¿Y Xime?-pregunto

-Le surgió un... algo, y pues, dijo que mejor otro día nos acompañaba.- noto duda en su respuesta, así que mis pensamientos sobre el chico de la sudadera se intensifican

-Mierda, ¿Tan mal le he caído que se inventó un problema para no venir?- pregunta Elizabeth, ya que supongo que también notó la duda en la voz de Tom, pero sigue sin pensar lo mismo que yo

-Oh, no creo que haya sido eso exactamente, pero yo qué sé.-responde encogiendo los hombros, aunque yo sigo notando algo raro en su tono de voz, sin embargo, me lo guardo para que ahora no sea él quien piense que he enloquecido o algo peor.

-¿Y qué no estaba incluida en tus planes?-pregunto, buscando un pretexto para cancelar todo y regresar al campus para buscarlo

-Sí lo estaba, pero mis planes se pueden adaptar a la situación, con sólo nosotros tres.-responde haciendo cara pensativa

-Ooh, excelente. ¿Que haremos primero?-pregunta ahora Eli con tanta emoción que casi parece fingida

-Para empezar, tenía pensado ir por helados, y luego podemos regresar aquí un rato a asustar a los niños que vengan para quedarnos con los juegos

-Que cruel eres, Thomas. Me parece un plan perfecto, hagámoslo.-digo y comienzo a mentalizarme con eso para distraerme un rato de mis pensamientos torturosos.

Vamos a la heladería más cercana y comenzamos con el plan de Tom, así que después de comprar nuestros helados, regresamos tonteando al parque, y ya que no hay tantos niños, no es necesario asustarlos para que dejen los juegos, por lo que somos libres de cada quien sentarse en un columpio y solo nos mecemos en ellos mientras comemos los helados y hablamos sobre cualquier cosa sin mucha profundidad y cambiamos de tema en cada oportunidad que se presenta. Una vez que el sol se ha metido y la noche comienza a hacerse presente regresamos al campus, pasando primero al estacionamiento para dejar a Eli en su auto, ya que ella tenía que ir a su hotel, y una vez que se ha ido, Tommy y yo seguimos hasta las habitaciones, sin embargo, mientras estábamos con El, ví aquel auto blanco que una vez tuve que conducir de regreso del aeropuerto hace unos meses, pero intento no mantener mi vista en él para que ninguno lo note, pero mi mente no deja de llevarme hacia Carter.

—Eh,¿Me acompañas a dónde Xime?-me pregunta mi amigo

—Creo que mejor otro día, de momento me gustaría descansar, pero mándale saludos de mi parte- le digo y me dirijo a mi habitación bastante distraído por todo lo que había pasado en el día.

Okay, dejaré esto aquí y me retiraré por muchos días.
Excuse moi, je suis très desolée.

Canción: The Only Exception
By: Paramore

Sale bye.