Capítulo 29

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Creo que no hay palabras justas para describir como me sentía

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Creo que no hay palabras justas para describir como me sentía. Pero creo que se podría ajustar bastante bien a esto:

<<¿Alguna vez os atropellaron con un camión y les pasaron por encima  y sobrevivieron?>>

Pues así me sentía, mas o menos.

Una parte de mi, me decía que debía creer a Tae, quizás fue verdad que solo la llamó para hablar. Pero entonces la otra parte de mi, me pega una bofetada y me dice:

<<¿Eres estúpida?>>

Son las 1:00 de la madrugada, ¿que hacen en su casa hablando? Y cuando mi mente dice eso, solo soy capaz de llorar, y no es una buena combinación con los cuatro Whiskeys que llevo encima, sumando el increíble mareo que tengo.

Agobiada por la falta de aire que había en aquel diminuto espacio cuadrado, consigo salir del servicio tambaleándome y mirarme al espejo. Parezco un mapache apunto de asesinar a alguien. Ese pensamiento hace que suelte una pequeña risa.

Abro el grifo de agua, y con mis manos en forma de cuenco, me eché agua fria en la cara para despejarme. Pero no consiguió causar efecto.

Después de mirarme un tiempo en el espejo, decidí salir del cuarto de baño. Y justo en el momento en que iba abrir la puerta, alguien la abrió por el otro lado, dándome una enorme hostia en la puta cara, y cayendo de bruces contra el suelo.

Solté un quejido. Genial, a parte de un mareo impresionante, nauseas, y un corazón roto, ahora también contaba con la cara desfigurada y el culo aplanado.

-Dios mio, lo siento- dijo alguien intentando levantarme.

-Da igual, el suelo es el único que me ama- dije y el perteneciente de esa voz rió. Definitivamente, era un chico.

-¿Estás bien?

-¿Tú que crees?- dije mirando por primera vez su cara, a pesar de ver borroso, aquella cara me sonaba de algo.- ¿Te conozco de algo?

-Vaya, ¿tan pronto te olvidas del rescatador de niños?- dijo, y abrí los ojos como platos.

¡Claro, el primo del alien!

-Por supuesto, ya me acuerdo. ¿Y qué mierda haces en el baño de tías?

-La pregunta adecuada sería: ¿Qué mierda haces tú en el baño de tíos?

Fruncí el ceño y anduve hasta la puerta, donde había un muñequito sin falda. Osea, me había colado en el baño de tíos y ni me dí cuenta.

Notando el calor en mis mejillas, encaré a... no recuerdo exactamente como se llamaba. Tenía una sonrisa burlona. Imbécil.

-No me di cuenta- murmuré y salí atropelladamente.

-¡Espera!- dijo cogiendo mi muñeca- ¿A dónde vas?.

-¿Quieres que duerma aquí, no? A mi casa, idiota.

-Me refiero a que si sabe mi primo que estás aquí, y ebria.- dijo sonriendo. La misma sonrisa de idiota de Tae.

-Lo que diga tu primo me la suda. Y no estoy borracha, estoy perfectamente.

-Claro que sí, venga, te llevare a tu casa, no dejare que andes sola en este estado.

-Wow, ¿lo de la caballerosidad les viene de familia? ¿Todos son tan inútiles?.

-Nop, solo yo- dijo guiñándome un ojo y yo rodeé los míos.

Salimos del baño y tras un tira y afloja de mis amigos con el primo del alien sobre quien tendría que llevarme a casa, mis queridos amigos estuvieron de acuerdo que fuera él.

Estupendo, ahora tendría que recordar a Tae continuamente en el resto del viaje.

Iba andando sin saber a dónde iba exactamente.

-El coche está allí, borracha -Se burló mientras me cogía el brazo para guiarme hasta donde se encontraba el coche.

-Cállate Chinchin -Hablé enfadada.

-Me llamo Jimin -Me corrigió y rodé los ojos.

-No me importa como te llamas -Contraataqué mientras me subía en el coche. Fruncí el ceño mientras me daba cuenta como Jimin se acercaba poco a poco a mí.

¿Qué diablos hará?

-Tranquila -Se río al ver mi cara -Solo te voy a poner el cinturón de seguridad -Habló con una sonrisa y apreté la mandíbula. Le di un manotazo haciendo que Jimin me mirase mal.

-Sé ponermelo sola -Hablé mientras me ponía el cinturón.

...

Ya llevábamos unos quince minutos en el coche y aún no entendía adonde íbamos.

-Oye Chinchin -Lo miré y él negó con una sonrisa.

-Jimin -Me corrigió.

-¿Dónde me estas llevando? Mi casa no está tan lejos -Dije y él suspiró.

-Te llevaré a tomar un café a ver si se te pasa un poco esa borrachera -Respondió y suspiré.

-No estoy borracha -Hablé y él asintió.

-Sí que lo estas -Contradijo.

-Lo que tú digas -Dije y miré hacia la ventana.

-Siempre -Habló y decidí ignorarlo -Hemos llegado, borrachita -Se burló y lo fulminé con la mirada.

Me quité le cinturón de seguridad y salí del coche. Me tropecé con los cordones de mis zapatillas y sentí un gran golpe sobre mis rodillas. Mierda, mil veces mierda.

-¿Estás bien? -Preguntó Chinchin acercándose a mí.

-¿Te parece que estoy bien? No, no joder, no estoy bien. Mi novio se encuentra ahora mismo con una puta que odio con todas mis fuerzas. Y yo me caigo cada vez que ando, ¿te parece que estoy bien? -Grité haciendo que Jimin soltara un largo suspiro.

-Vale, tranquila -Me cogió de la mano -Entremos ¿si?-Dijo y asentí.

Jimin pidió dos tipos de cafés que en mi vida escuché antes. Mientras yo me encontraba mirando mis dedos y pensando en alguna venganza en contra de Tae.

-Y bien -Habló Jimin haciendo que le mirase.

-¿Y bien qué? -Pregunté confundida.

-¿Y bien que, de qué? -Preguntó de nuevo Jimin riéndose.

-Dios, eres un idiota -Suspiré y me dejé caer en la silla.

-Dime algo que no sepa -Sonrió y lo fulminé -Le mandé un mensaje a Tae y viene de camino para este lugar -Habló y abrí los ojos inmediatamente.

-¿Eres gilipollas o que? No quiero verlo -Grité enfadada -¿Por qué no me lo dijiste? -Pregunté y me di cuenta como se reía.

-Era broma, nena -Me explicó y me dieron ganas de golpearlo.

-No me llames nena, me llamo Mia, no nena -Le dije y él asintió, aunque sabía que no me haría caso.

En seguida, llegó el camarero con lo que había pedido Jimjn. Cogí la taza entre mis manos y di un pequeño sorbo. La verdad es que lo que pidió Chinchin estaba delicioso.

-¿Te gusta? -Preguntó con una sonrisa.

-No esta mal -Respondí con una sonrisa. De pronto sentí como mi culo vibraba, aunque en realidad era mi móvil. Lo saqué y me di cuenta que era mi tía que me estaba llamando.

-Hola tía -Le saludé.

-Mia, es el abuelo..., le acaba de dar un ataque cardiaco -Habló nerviosamente y en ese momento mi mundo se vino abajo.

DIE IN YOUR ARMS | Taehyung BTS (ADAPTACIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora