Before

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 Sus miradas se cruzaron durante unos segundos, nadie dijo nada, se mantuvieron serios mirando como Cody, el vecino de habitación contigua a Andy ganaba un partido de ping pong.

 Anderson sentía muy cerca la respiración de el chico nuevo, pero algo en su interior no sabia si seria prudente hablarle, no quería enfrascarse en otra conversación con un loco mas del montón, hasta que escuchó una voz que rompió el silencio... 

-No sabes cuanto esperaba enfrentarte, el gran "Paleta Dorada",ahora entiendo por que ese es tu apodo-. Lanzó una sonrisa que Andy no respondió. 

-Es un apodo exagerado la verdad, nunca me ha gustado pero una vez que se populariza tu apodo, no puedes hacer nada, tal como George es "piezas" y Paul es "el viejo"-. 

-Yo diría que te ganaste bien el apodo, ¿cual es tu nombre real?-. -Anderson, solo... Anderson-.Mientras miraba el cielo y lanzaba una respiración profunda, algo usual en Andy para disimular que estaba incómodo.

-Me gusta, yo soy Ruben, Ruben Griffin-. Le extendió la mano para estrechar la mano de Andy y el respondió el saludo. 

-Al menos por ahora te podría decir Griffin que creo que eres la persona más cuerda con la que hablo en meses, al menos no tienes alguna excentricidad como los otros, charlaba con el viejo Paul de vez en cuando pero de la nada se paraba y se ponía a correr por el patio hasta quedar sin aliento y volvía a hablarme de cosas que nunca comprendí, es un tipo bastante peculiar-. 

-Suena bastante simpático ese tal "viejo". Me agradas Paleta Dorada, de hecho creo que mi apodo será "Paleta plateada", ¿te gusta?-. Lo decía mientras soltaba una risa. 

-Lamentablemente amigo, los apodos no se eligen, pero puede que si te llamo así los demás también comiencen a hacerlo-. No se rió pero si le lanzó una sonrisa a Griffin. 

Anderson miro de lado a lado del patio, que fuera esta rodeado por un bosque frondoso y vio unos ojos que lo observaban en el interior del bosque, sabía que eran solo ideas suyas pero le costaba soportar esos ojos que lo observan por todas partes. 

 -Y entonces la enfermera me dijo que, espera, Paleta, me estas escuchando?-. Miraba curiosamente a Andy. 

-Si, solo que estaba pensando en cosas, pero no importa, que me decías ?-. 

-Te narraba como fue mi ingreso a este lugar-. 

 Todo volvía atacar su mente nuevamente y sentía que le iba a explotar. 

 -Lo siento, te...tengo que irme, necesito ir al baño-.No podía seguir soportando esos ojos mirándolo a la distancia, tan penetrantes, tan agresivos, podía sentir como esos ojos rasgaba su carne a la distancia

 Entró al hospital y rápidamente fue al baño del comedor. Se miró al espejo y se mojaba la cara, mientras se hablaba a si mismo y se decía -Todo esta bien pequeño Andy-. Como su madre solía hacerlo para calmarlo cuando estaba triste, lastima que ella ya no estaba aquí para consolarlo. Se quedó varios minutos en el tocador hasta que una enfermera comenzó a tocarle la puerta, ya que según las reglas no pueden estar más de 5 minutos en el baño sin dar señales de no estar cometiendo alguna estupidez como solían hacer algunas personas. 

-Señor A. ¿esta bien?-. Dijo Julia, la misma enfermera de la mañana. 

 -Si, si, solo necesitaba hacer mis necesidades, estoy fatal del estómago-. Se apresuró en mentir.

 -Tranquilo pero procure terminar pronto, si no tendremos que entrar a comprobar que no nos miente, otra vez-. 

Estas últimas palabras hicieron que el se diera prisa en responder, pero ella ya había a dado media vuelta y se había marchado. Andy salio del baño y se fue a sentar a su mismo sitio del comedor, debía hacer algo, las cosas no mejoraran en su cabeza, en los 3 años había intentado de todo pero no podía borrar esos ojos mirándolo y esas punzadas en su cabeza tan recurrentes.

 Entonces Ruben entró en el comedor y se acerco a Anderson, preocupado por si no estaba bien.

 -¿Todo bien paleta?-. dijo con evidente preocupación.

-Si, tranquilo, solo necesitaba refrescarme, es complicado estar aquí en verano-. Especialmente en este hospital. -Pero creo que ya estoy mejor-. 

-¿Como puedes soportar este encierro? A mi ya me esta asfixiando-. Todo el rato miraba hacía los lados.

-Ya no solo se trata en "soportarlo", si no mas bien en "aceptarlo", no queda de otra mientras estas aquí dentro-. Mientras su expresión concordaba con una mirada poco esperanzadora.

-Pero, ¿es posible seguir día a día sabiendo que nunca podrás salir de aquí?-. Se notaba que el tenía muchas intrigas en su corazón y quería que todo saliera a la luz de una vez.

-Puedes salir de aquí, cuando "dejes de estar loco"-. Lanzó una risa e hizo el gesto de secarse una lágrima invisible, sintió que por primera vez en 3 años realmente se reía -Pero hablando en serio, si no es en un ataúd, es casi imposible salir de aquí y te lo digo por que ya lo he intentado y estuve a un pelo de terminar en el pabellón C y déjame decirte que si te llevan allí solo podrás volver a ver el sol a través de una mini ventana. 

-¿Hace cuanto llegaste aquí Paleta?-. 

 En ese momento sonó la campana que quería decir que debían de estar en sus habitaciones en 2 minutos, solo podían estar a fuera en las horas del desayuno, debido a que esa hora los pacientes eran más "paranoicos", los incidentes de hace 1 año en el almuerzo los obligaban hoy por hoy a tener que almorzar y merendar en las habitaciones.

 -Eso amigo mío, si es te puedo llamar así, será historia para otro día.   

¿Que hago aqui?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora