Give me one reason || Marco Asensio

Capítulo XIII

Continuo leyendo.

"Pf, sabes mejor que nadie que esto se me da fatal, que soy un inútil y que tú me haces mejor, chula.
Pero si esta es la única forma de que me dejes explicarte, allá voy.
Lo he intentado por todos los medios, hasta he convencido a Álvaro para que hable contigo y entiendo que no quieras saber de mí, pero yo tengo la necesidad de saber de tí, de preguntarle todos los días a Kepa como estás, de protegerte, quiero que estés bien de una manera o de otra, que seas feliz, que aunque yo no lo sea, tú sí.
Odio ver fotos tuyas con otros tíos, me está consumiendo el hecho de no poder hacer nada al respecto, pero estás en tu derecho, no logro entender como te has convertido en esto para mí, no logro entender que ya no eres mía.
Y lo hice mal, todo empezó con un juego, y me acabé enamorando, y además de verdad y ahora me duele más que a tí, me duelen tus abrazos, que ya no sean para mí.
Odio sentarme en el coche, donde nos dimos nuestro primer beso, no odio el recuerdo, odio el hecho de no poder volver a repetirlo.
Odio a Saúl, me odio a mí, odio las apuestas y odio el momento en el que acepté aquella pf.
Espero que comprendas ahora un poco mejor que aquella apuesta de una forma o de otra, fue la excusa y el impulso que me hizo falta para acercarme a tí.
Estoy seguro que que puedo darte más de una razón, no puedo darte lo mejor, pero ten por seguro que siempre te querré.
Nada es para siempre, solo el recuerdo, no te dejaré de amar porque no dejaré de amar los momentos en que te amé.
Te quiero, mucho más de lo que imaginas, chula."

Apoyo mi cabeza en el asiento y la echo hacia atrás, con gesto de desesperación, resoplo y cierro los ojos.
Kepa me observa preocupado.

- Elena ¿le quieres?
- Sí.
- Díselo.
- No puedo.
- ¿Quieres tragarte tu orgullo de una vez y pensar en tí, en él y en vuestro futuro?- espeta con seriedad.- Marco te quiere.

No contesto.
Respiro hondo y saco el teléfono de la mochila.
Mi mirada se centra en la pantalla y se queda fija en ella, al entrar en la aplicación de teléfono y pulsar el contacto de Marco.
Pienso varias veces si pulsar ese botón.
Finalmente es mi acompañante el que lo hace, dejándome sin oportunidad de pensar.

- ¿Si? ¿Elena?- su voz me inquieta, al otro lado de la linea.
- Marco...- susurro.
- Dios ¿estás bien? ¿Qué pasa?
- Te quiero.- suspiro, pronunciando cada sílaba con seguridad y delicadeza.
- Y yo.
- He leído...
- No hace falta que digas nada.- me interrumpe y ríe.- Soy muy malo escribiendo, ya lo sabes.- aclara.
- Al contrario, me sorprendes.
- El amor es lo que hace.- ambos reímos.- Te echo de menos.- añade con firmeza.
- Y yo...- hago una pausa.- siento no haberte escuchado antes.
- Voy para Bilbao.
- Pero...

Cuelga, dejándome confusa.
No obtengo una explicación, ya que el mallorquín no contesta a mis mensajes ni a los de su compañero.

- Está loco...- niego con la cabeza preocupada.
- Está loco por tí.- recalca Kepa, a lo que sonrío.
- Estos dos meses...
- Han sido duros, lo sé, los he vivido contigo peque.- replica con ternura.
- Muchas gracias por todo.- le abrazo cual niña pequeña.
- No las des, tu también me has ayudado mucho, eres genial.- respira.- Te dije que todo estaría bien y prometí que no te iba a dejar sola.- me corresponde el abrazo.
- ¿A quién se lo prometiste?- pregunto curiosa, mientras lo miro desde abajo, aún abrazada a él.
- A Marco, a tí y a mí mismo.

Sonrío y aumento la fuerza con la que lo abrazo, él me corresponde.

Llegamos y Kepa lleva mis maletas hacia el hotel, ya que él tiene sus cosas ya aquí.
Entro en la habitación del hotel y me tiro en la cama, caigo rendida, literalmente.
A mi lado, un ramo de rosas, precioso e intenso, acompañado de una nota con una caligrafía exquisita, cortesía de Marco Asensio.
Es increíble este chico.
•
Espero que os guste la nueva portada.❤️