Estoy tan contento, hoy Andrea y yo saldremos a festejar nuestro aniversario.
Aun es temprano, pasare por ella mas o menos a las ocho de la noche, mientras yo me iré al gimnasio, ella probablemente siga dormida por qué no me ha respondido el mensaje que le envié de buenos días.
En este tiempo que tenemos juntos como toda pareja tenemos nuestros momentos buenos y nuestros momentos malos, no voy a negar que los malos los he provocado yo por mis celos pero de verdad se me hace inevitable sentirlos. Se que a varios chicos les gustaría estar con ella.
Dejando eso de lado en el gimnasio me encontré con Jack G un gran amigo mio, me contó que ha tenido problemas con su pareja, que incluso cree que ella le fue infiel, Jack me dijo que me tocó mucha suerte con Andrea a lo que yo le dije que lo sabia, que mi novia es una gran chicha con un corazón enorme y que soy muy afortunado de tenerla.
Cada día que pasa le agradezco a Dios por haberla puesto en mi camino, ella es como una luz que estaba al final de un túnel lleno de oscuridad que estaba pasando tiempo atrás antes de tenerla.
A veces pienso que me hubiera gustado que ella llegará antes a mi vida, pero otras veces o sino la mayoría pienso que nuestros caminos se juntaron en el tiempo que debían, nuestro destino estaba escrito asi.
Dure bastante tiempo en el gimnasio si no es que más de lo que debería. En un momento que tome mi celular me di cuenta que Andrea ya me había respondido, así que la llame para saludarla y preguntar como estaba. Siempre lo hago, todos los dias.
Me encanta su voz cuando se acaba de despertar, aun no he tenido la suerte de verla cuando se va despertando pero espero que en un futuro no muy lejano Dios me permita verla a mi lado todas las mañanas.
Antes de regresar a casa llegue al super por que mi madre me había encargado algunas cosas, mientras estaba por la zona donde están todas las cosas frescas mire que en una esquina estaban unas flores, todas eran muy bonitas, al final no pude decidir y lleve dos ramos, para Andrea por supuesto, se que le encantarán.
En fin, llegue a casa, me espere que se hicieran las seis de la tarde para meterme a darme una ducha y comenzar a alistarme para ir por Andrea.
Salí de mi casa y sentí algo en el pecho que no podría describir, era como cuando sabes que algo malo pasará, pero como estaba tan feliz y nervioso lo pase por alto y seguí caminando hasta mi auto para tomar mi camino a su casa.
Al llegar no quise mandarle ningún texto y me fui directo a tocar la puerta, en mis manos llevaba los ramos de flores que le había comprado. Toque la puerta y no pasaron más de dos minutos cuando mire a mi novia abriendo la puerta con una sonrisa tan hermosa, me abrazo super fuerte y después me dijo que me miraba bien, que ese outfit me sentaba muy bien. Recuerdo lo hermosa que se veía con un vestido color azul, con ese color se veía más radiante de lo normal. Los planes ese día eran ir a cenar y después ir a un lugar para bailar. La cena estubo bien aunque a mi no me encanta el sushi pero con el simple hecho de estar con ella era el hombre mas feliz de la tierra. En la cena nos la pasamos hablando de lo que hicimos ese dia, de lo que haríamos al siguiente y de los planes de fin de semana de cada uno, ella me contó que iría con su abuela por que la extraña. Salimos de cenar y nos fuimos a un antro que estaba algo cerca del lugar donde cenamos.Al llegar comenzamos a bailar, cuando estábamos ahí me preguntaba una y otra vez, "¿Se podrá ser mas feliz de lo que soy en este momento?" Estaba en un punto de mi vida donde todo estaba bien, sin problemas y con alguien que me amaba a mi lado.
Cuando nos cansamos nos fuimos a sentar y Andrea comenzó a beber, yo no lo hice o bueno si pero solo un poco por que de los dos yo era el que manejaria de regreso a casa. Llegó un momento en el que ella ya estaba algo tomada y decidí que era tiempo de irnos, salimos del lugar y no muy lejos de ahí Andrea comenzó a estar muy inquieta, me iba diciendo algunas cosas que no tenia sentido, se veía algo graciosa.
Hubo un momento en el que me dijo que acelerará más, que quería llegar asu casa pronto, movió el volante e hizo que tuviéramos un accidente.
Recuerdo que yo si estaba consciente, solo tenia unos rasguños pero el rostro de Andrea estaba cubierto de sangre, la moví varias veces, le hable y le hable y no me respondía. Entre en pánico, sentí que la había perdido, no tenía idea si estaba viva o no, o si lo que estaba pasando era un sueño o que era. Llegó la ambulancia y se la llevaron, me quería ir con ella pero no me dejaron subir. Me dijeron que esperara que llegara otra por que yo necesitaba que me revisarán también. Cuando al fin llegó les explique de mil maneras que yo estaba bien, que necesitaba ir a donde estaba ella, me decían que íbamos en camino. Al llegar al hospital pregunté por ella y me dijeron que no podía verla, que era imposible. Me desesperé. Sentía que el mundo se me estaba cayendo a pedacitos. No sabia si la había perdido o no. Me puse a rogarle a Dios por su bien, por que todo saliera bien.