Capitulo 10

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- ¿Asi que eres operadora de Movistar?- pregunto la madre de mi novio sería.

-No, soy actriz - sonreí intentando no parecer nerviosa. Aunque lo estaba

- y...¿como se que no quieres a mi hijo por su fortuna? - añadió

-Porque no me interesa el dinero- me encogí de hombros

-Eso no es una razón - pero... ¿que se creía que era?

- Además, tengo más dinero que él- respondí seca. Al ver que eso no podía contrarrestarlo fue con Alba.

-¿Y tú?

- ¿yo que?- estaba sonrojada por no haber seguido la conversación. Madre mía, que Navidades me esperaban... Y encima Lucas se iría a jugar un partido al extranjero...

- ¿Por que estás con mi hijo? - respondió Jean como si fuera obvio

- Porque le quiero - se encogió de hombros

- ¿como se que es cierto?- vi que lo estaba pasando mal y me metí de por medio... Quien me mandaría ayudar a mi concuñada, de verdad, no me entendía

- Solo tiene que ver cómo se miran - me metí en la conversación

-Eso cierto, cariño, mirales- me respaldó François, gracias a Dios... Jean asintió conforme, por lo menos una de las dos había pasado la prueba al 100%.

- Pasaremos los días en el hotel, además, como te vuelves a ir - se hizo la víctima hacia su hijo mayor.

- Mamá, estoy aquí para año nuevo...

-Pero nosotros estaremos aquí, solos

-Está Theo

- Seguro que se va con Alba - añadió como si no estuvieran delante

- Podemos cenar y comer con vosotros... - habló Theo, alba no parecía contenta aunque asintió con una sonrisa para darle la razón a su novio.

-Gracias hijo- sonrió Jean a Theo, parecía que en verdad le importaba mucho.

-Nada mamá

***
- Campanilla, vamos, o no nos dará tiempo a nada- Lucas y yo iríamos a por los regalos de Navidad... No sabía que le compraría, la verdad.

Hubo un momento en el que le perdí de vista, aún así seguí comprando cosas. Le mandé un WhatsApp para decirle que a las 8 iría hacia el parking, para volver a casa.

Llegué hasta una tienda de trajes y camisas, decidí comprarle una camisa de seda que había roto una noche en... Un descuido.

Cuando la tuve en mis manos sonreí para mis adentros y seguí andando, vi una tienda de cámaras decidiendo mi segundo regalo para él. Compré dos objetivos y por último... Un viaje a la India y a Thailandia, teniamos que aprovechar la cámara. Encima... Iríamos en fechas del festival en el que se dedican a tirar polvos de colores. Como en las Holi run pero la celebración real.

También compré un vestido (a medida y diseñado por mi) a Noa, unos juguetes a Ana y Paul. Un balón de basket con dedicatoria especial para Antoine, un bolso de CH rojo para María, una blusa y un pintalabios a juego para Mery y unos pendientes de Swarovsky que sabía que Nere estaba deseando desde hacía unas semanas. A sus novios les compré una botella de un buen vino a cada uno y a Gabi y Torres. A Theo y Alba les compré algunos detalles para su casa nueva de Madrid. Por último, compré un perfume para cada uno de mis suegros, esperaba no equivocarme con nada. También envié un juego de casino a Tom (por las risas) junto una botella de whisky y un viaje a Madrid para los días del orgullo para mí queridísimo amigo gay.

Cuando acabé de comprar los regalos fui hacia el párking, allí me encontré a Koke.

- Hey... ¿como Tu por aquí? - al verme parecía estar nervioso

-Vine a por los regalos - se encogió de hombros

-Pero si no llevas bolsas - frunci el ceño y me reí

-Es que es un envío, solo lo encargué - se rascó la nuca

-Ahh vale - asentí- ahora todo tiene sentido.

Lucas llegó al rato tan cargado de bolsas como yo. Sabía que no encontraría sus regalos porque estaban guardados con los de Tom, Paul y Ana.

- He visto a Koke - sonreí al chico

-Yo no... Tendré que llamarlo, me dijo que tenía que acompañarle a por un regalo... - negó por la actitud del chico

-No sé, parecía que no viniese a por regalos suyos propios - él arqueó una ceja

-¿Ah, si?

-Sip

Pov's Lucas

Alguien le daría un toque de atención al mediocentro rojiblanco,había venido conmigo para elegir el regalo perfecto de la chica y va... Y se la encuentra...¡Y encima no miente bien!

- Seguramente solo vino a ojear, es un desastre para ir de compras - Reí

- Ahí tengo que darte la razón, Lucky Luke - asentí

- Lo sé. Aún así no se librará de mi llamada y mis reproches - le dije a la chica serio.

-Está bien, a mi no me dañaron el orgullo cariño, no opino - levantó las manos como si no fuera a meterse.

Cómo le dijera a María que era el regalo y ella se lo chivara a Anabelle... Me estaba arriesgando con su regalo, pero estaba seguro de que le encantaría....

No fue nuestro último beso Donde viven las historias. Descúbrelo ahora