El acuerdo.

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- Yo también te extraño, no he dejado de pensar en ese primer beso, en tus caricias, tus abrazos, tus susurros al oído. En realidad, no he dejado de pensar en ti. Apareces en mis sueños.

- Yo no he podido dormir de tan solo pensarte - respondió - quisiera tenerte entre mis brazos de nuevo.

- Y yo quisiera estar entre tus brazos siempre, dormir a tu lado, poder sentir tu piel junto a la mía.

Fue entonces cuando hice una pequeña pausa, se notaba un silencio un tanto incómodo, hasta que después de unos minutos por fin me atreví a decirle:

- Ethel, te deseo. ¡Hazme tuya!

Ethel:

Sentía que el corazón me salía disparado del pecho, un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, la piel se me erizó. No podía decir una sola palabra, fue una lluvia de emociones y pensamientos que era imposible expresar todo en un solo Segundo, y esa frase ¡Dios, esa frase! Me hizo vibrar, me estremeció por completo. Sonreí y conteste:

- Yo también te deseo y a partir de hoy soñaré que eres mía, solo mía.

- No tienes por qué soñarlo - respondió - podemos hacer que suceda.

- ¡Wow! Que intrépida. ¿En verdad es lo que deseas?

- ¡Pero claro! Solo he pensado en eso toda la tarde y lo que lleva de la noche.

De pronto, me invadió el pensamiento, la duda, el miedo... Es menor de edad, no quiero meterme en problemas, así que respondí:

- No, espera, eres mucho menor que yo, no es correcto.

- ¿Y según quien no es correcto?

- Según la ley.

- ¿A caso te asusta?

- Pues si, claro que me da miedo.

Después de algunos segundos de silencio le dije:

- Mira, conóceme, no podemos apresurarnos.

- Yo sé qué tal ves es muy rápido, pero siento como si ya te conociera de años, dame una oportunidad y verás que no te decepcionaré.

- Lo sé, princesa, pero, quiero que conozcas más de mi, que veas cómo soy, quien soy, quiero conquistarte y que tú hagas lo mismo conmigo, quiero involucrarme en tu vida, quiero saber más de ti y que tú sepas más de mi. No quiero que esto se vea como una oportunidad para aprovecharme de ti, yo soy mucho mayor que tú. Tú eres una niña muy linda, y vales mucho la pena, no quiero que esto quede en una relación en la que solo sea sexo. Tú no mereces eso, mereces lo mejor de mi y es lo que yo quiero darte. Eres muy pequeña y quiero crear contigo recuerdos bonitos y, si tú me lo permites, en un futuro, una relación maravillosa llena de aventuras y mucho amor.

- Me encantaría poder formar parte de tu vida y experimentar todas esas maravillosas aventuras a tu lado, yo sé que quizás suena arriesgado, pero, ¿por qué perder el tiempo? Las mejores oportunidades solo se presentan una vez en la vida y yo no quiero desaprovechar esta, ¿por qué tener que esperar cuando podemos iniciar una bonita relación desde ahora, llena de aventuras, locuras, amor y pasión?

- Te entiendo perfectamente y todo lo podemos cumplir, pero, en el tiempo correcto, no hay porque desesperarnos. Dime, ¿tú eres así con todas tus conquistas?

- Así, ¿como?

- ¿Te llevas a la cama a todo aquel que seduces?

- ¡No! Por supuesto que no, ¿de que hablas?

- Aún no nos conocemos bien, no sé cómo eres, pero hay algo que me queda clarísimo, eres muy aventada, ¿así eres siempre?

- No, ya te lo expliqué, sentí una conexión muy fuerte contigo, me encantas y quiero que seas tú quien esté a mi lado.

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⏰ Última actualización: Oct 11, 2017 ⏰

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