Un buen comienzo

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—¡Hija! —el grito de mi madre hace que me remueva en la cama pero no logra despertarme completamente.

—Maya —dice mi madre

—Mmmm —me quejó

—Maya —vuelve a decir mi madre

—....

—¡MAYA! —grita mi madre lo cuál provoca que me sobresalté y caiga de la cama.

¡Rayos ahora mi trasero duele!

Me levanto y sacudo mi trasero para volver a la cama, pero esta ves no para dormir si no para sentarme y ver a mi madre, la cuál se encuentra en el umbral de la puerta viéndome con su ceño fruncido.

—¿Qué sucede? —preguntó  con voz un poco ronca y tallando mis ojos.

—¿Qué qué sucede? —dice ahora cambiando su ceño fruncido por una sonrisa divertida — Hoy es tu primer día en el colegio ¿No estás emocionada?

— Pfff que si no lo estoy, mírame —digo con fingida emoción.

Mi madre rueda los ojos y se encamina al pasillo, pero no sin antes advertirme que si me vuelvo a dormir me echará un balde de agua fría.

Bufo y me estiro, me quedó mirando un punto fijo en la habitación meditando si me baño o me voy así, descartó la idea de irme así no quiero causar mala impresión el primer día.

Me encamino al baño cerrando la puerta detrás de mi, me veo en el espejo y...... ¡Dios soy yo o me veo más fea de lo normal!
¿Eso es posible? Dice mi subconsciente, lo ignoro y abro el grifo del agua, humedezco las cerdas de mi cepillo de dientes seguido de colocarle la pasta dental empiezo a cepillarlos.

(...)

Seco mi boca y dejo el cepillo en su lugar me desvisto y me coloco mi bata, abro el grifo de la tina y mientras el agua se calienta iré a ver que ponerme, abro las puertas de mi armario y me arrepiento al instante.

—¿Dios que a sucedido aquí? ¿La Segunda Guerra Mundial? —Exclamó horrorizada al ver el desastre que se encuentra dentro de este.

(...)

Ya limpia y con mi ropa puesta decido arreglar este desastre que tengo por cara, empiezo colocándome BB cream, un poco de hidratante para labios, encrespó mis pestañas colocó un poco de rímel sobre estas y para finalizar mi infaltable rubor en crema.

Tomo mi mochila y mi celular, el celular lo colocó en el bolsillo trasero de mi Jean, salgo de mi habitación y me encamino a las escaleras para ir a desayunar.

Mi Outfit está conformado por un Jean de color negro rasgado de las rodillas, un sweater rosado con la letra A en color blanco al frente del sweater y para finalizar mis infaltables Vans negras, decidí llevar mi cabello atado en un moño un tanto despeinado.

Al llegar a la cocina encuentro a mi padre leyendo el periódico y tomando una taza de café.

— Hola pa —lo saludo con un sonoro beso en su mejilla.

— Hola mi niña —dice mirándome con ternura — Te ves hermosa —dice.

Hago una reverencia lo cuál provoca que el ría y se le formen unas pequeñas arrugas a los costados de sus ojos verdes.

— No consientas a la niña Ricardo —agrega mi madre con voz cantarina.

Yo solo me limito a rodar los ojos y sentarme en la barra de desayunó.

— ¿Que será lo que mis papilas gustativas deleitarán el día de hoy amada madre? —preguntó imitando un acento inglés bastante exagerado.

— Oooo mi querida hija, el menú de hoy son Hot Cakes con frutos rojos y un vaso de extracto de jugo de naranja —responde mi madre con un acento aún más exagerado que el mío.

Yo solo río y procedo a comer los Hot Cakes que ha puesto mi madre delante mío.

(...)

Ya en la escuela me encamino a dirección para que me asesoren sobre mi nuevo salón de clases, me distraigo un momento viendo a las demás personas caminado por los pasillos con algunos libros en las manos y platicando entre si, hasta que chocó con alguien provocando qué sus libros se caigan.

— ¡O por dios! Lo lamento tanto —digo cubriendo mi boca y agachándome para ayudarle a recoger sus libros.

— No te preocupes la verdad es que yo también iba distraída —dice la chica poniéndose de pie, yo imito su gesto — Eres nueva ¿Cierto? —pregunta con un tono un tanto tímido.

— La verdad.... si —agregó riendo un poco.

— Yo también lo soy — dice, extiende su mano — Me llamo Kylie.

— Yo me llamo Maya —digo aceptando su mano — Ibas a dirección —preguntó arqueando una ceja.

— O si, el problema es que no sé dónde queda ¿Tú sabes? —me pregunta.

— Si de echó está justo detrás de ti —ella voltea y ríe un poco.

— Estuve casi media hora buscándola para que estuviera.... olvídalo —agrega riendo y moviendo sus manos restándole importancia.

La verdad es que Kylie es muy linda, su cabello castaño le llega a los hombros es un poco ondulado, sus ojos azules dan un contraste muy lindo con su pálida piel, es de mi estatura y creo que podríamos ser gemelas la única diferencia serían nuestros ojos ya que los míos son verdes y los de ella son azules.

Bueno al parecer el día a comenzando muy bien.













Hola 👋🏻
Y si aquí una nueva historia, yayyy!!!
Espero que les gusté, nos leemos pronto.

Bye 😏💖

La vida de Maya Donde viven las historias. Descúbrelo ahora