Yo Tuve Toda la Culpa 2

Capítulo 1

Pasaron 2 años para ser exactos, ahora tengo 19 años y desde que mi hermana se suicidó, mi vida dio un gran giro, yo ya no era la misma de antes... Y eso me dolió mucho.

Desde los 18 empecé a trabajar de asistente en un restaurante para poder mantenerme, conocí a tres grandes personas muy importantes en mi vida; mi novio, Carlos Brown; y mis dos mejores amigas, Juliette Howard y Thalía Adams.

También, después de ganar un poco de dinero puse en alquiler mi casa, claro que fue algo tonto pero no podía seguir viviendo en un lugar que sólo me traía malos y buenos recuerdos, la alquilé a una familia conformada por; padre, madre e hijas gemelas. Yo le llamaba "La familia Donadio", las gemelas tenían 16 años y me caían muy bien, una se llamaba "Amanda" y la otra "Camila".

Era un 4 de Noviembre del 2016 y para mí un día común y normal como todos, tenía que levantarme, tomar desayuno, ir a la universidad y luego más o menos a las 4:00 p.m. tenía que ir a trabajar. Quería visitar a la familia Donadio, entonces después de salir de la universidad, me dirige a mi antigua casa, cuando llegué no había nadie y entonces me marché.

Al llegar a mi departamento agarré mi teléfono y llamé a la señora Melody, la madre de Amanda y Camila, me contestó enseguida, me dijo asustada que una niña con pelo negro y largo había entrado a la casa y había golpeado a Camila, y por esa razón se fueron de allí, al instante se me pasó por la cabeza "Carolina" y le respondí:

-Disculpe, ¿Qué prendas vestía aquella niña?

-No lo sé, salí corriendo de prisa, pero parecía tener un vestido blanco.

....

Quedé perpleja, ya que la primera vez que vi a Carolina llevaba un vestido de color blanco y largo...

-¿Hola?-. Dijo la señora Melody.

-Perdón, no se preocupe iré a ver que está pasando, no llame a la policía, ¿Está bien?

-¿Qué te pasa, quieres que me quede con los brazos cruzados sin pedir ayuda? ¿Qué podrías hacer tú en un caso como este?

-Por favor, se lo ruego, solucionaré esto.

-Eso espero...

....

Alisté mi chaqueta y tomé un taxi rápidamente. Al llegar la puerta estaba abierta, entré a la casa y pude observar como Carolina subía las escaleras con miedo y prisa mirando hacia el comedor, no me dio gran impresión de verla, pero si me sorprendió que su mirada estaba tan concentrada a aquella habitación. Me acerqué sigilosamente y no vi nada, escuché unos pasos atrás mío y era Carolina apuntando al piso, en ese momento sentí unas manos agarrándome el tobillo derecho y de pronto me jalaron. Empecé a gritar y acto seguido me golpeé la cabeza con una aspiradora que se encontraba ahí, por supuesto que quedé inconsciente por unos minutos y cuando me desperté estaba en el sótano de la casa, atada a una silla, Carolina estaba frente mío haciendo una señal de que no haga ruido, su vestido blanco era tan luminoso que tenía que achinar mis ojos de ver aquel destello. Esta vez su vestido no estaba cubierto de sangre y la verdad me pareció muy raro, de pronto alguien me comenzó a cepillar el pelo, yo trataba de voltear para ver quien era, pero no podía. Escuché que era una mujer y ella cantaba una melodía en voz muy baja, de pronto un hombre dijo:

-En vez de peinar a la niña, deberías servirme una taza de café, mujer.

-Tienes razón-. Dijo con una voz temerosa.

....

De repente me pasó por la cabeza la imagen de una mujer llorando y a la vez sirviendo una taza de café y por otra parte estaba un señor golpeando con un látigo a una niña, aquella niña gritaba del dolor y después de unos segundos me di cuenta que era Carolina.
Me empezaron a caer lágrimas de la nada y yo trataba de contenerme pero no podía.

Después de unos 5 minutos sin dejar de llorar un hombre se paró enfrente mío, recuerdo cómo vestía, el rostro que tenía y también lo que llevaba en la mano. Él llevaba puesto un traje de la época antigua y encima tenía un mandil blanco, su rostro marcaba una sonrisa perversa y eso me dio bastante miedo, y por último tenía en la mano una navaja.