Yo Tuve Toda la Culpa 2

Capítulo 5

-Que bien se siente estar de nuevo en casa-. Dije respirando el aromante de mi departamento.

-Sí... Ahora tendrás mucho que hacer-. Dijo Carlos elevando una ceja-. Primero tienes que ir a la comisaría a retirar esa pena de cárcel, luego tienes que ir a aclararle las cosas a la señora Melody y por último debes ponerte al día en la universi...

-Sí lo sé, eso es muy agotador-. Interrumpí.

....

Cuando mi novio se fue empecé a escribir una carta para poder retirar mi pena de cárcel, no quería descansar, de hecho estar en el hospital echada por mucho tiempo me había afectado...
Todo iba de maravilla hasta que Carolina me abrazó por detrás, me asusté al principio ya que sus manos se sentían muy heladas y después traté de concentrarme en la carta pero no pude, así que decidí llamar a la investigadora Sofía Collins a ver si tenía algo en mente... Marqué su número en mi teléfono y al acercarlo a mi oído Carolina me lo quitó, cuando volteé ella ya no estaba ni tampoco el teléfono.

-Maldita sea, Carolina-. Susurré.

....

Después de eso decidí ir a ver personalmente a Sofía Collins, al llegar a su casa, me dio un poco de escalofríos entrar a esta ya que era muy aterradora.

-¡Hola!-. Saludó ella al verme.

-Hola, lo he pensado y...

-Primero pasa y toma asiento-. Me interrumpió.

-Está bien-. Murmuré.

-Bueno, ¿Quieres algo de beber?, tengo gaseosa, jugo de limón y té.

-No-. Dije y negué con la cabeza.

-Ya, primero que nada debes contarme cómo empezó todo esto-. Tomó asiento y me miró atenta.

-Pues... La verdad no recuerdo mucho, pero todo comenzó cuando a mi hermana fallecida se le metió a la cabeza lo de suicidarse-. Suspiré tratando de no llorar-. La primera vez ella se subió a un árbol alto, pensaba tirarse y de pronto aparece un niña con cabello negro y largo, vestido blanco y con una muñeca de trapo en la mano... Lo recuerdo perfectamente, al momento en que mi hermana se lanzó del árbol el tiempo se paralizó y ella llegó al piso sin salir lastimada, sin embargo yo fui golpeada por alguien y perdí la consciencia.

-Ah, entiendo... ¿No recuerdas nada más?-. Se encogió de hombros mientras analizaba lo que ella misma había anotado.

-No-. Respondí con las manos en mi rostro.

....

Estuvimos hablando al respecto por horas, hasta que ya había anochecido, yo me despedí de ella y sólo me dijo que iría a verme el día siguiente.
Llegué agotada a mi departamento, me fui a la cama y pensé... ¿Qué pasaría si Carolina me dejase en paz de una vez por todas?, me quedé toda la noche pensando en eso y no encontraba respuesta. Al día siguiente a las 9:00 de la mañana llegó la investigadora Sofía Collins y no llego sola sino que venía acompañada con dos chicos.

-Buenos días Damer-. Dijo mientras entraba a mi casa.

-Buenos días.

-¿Y esa tal Carolina se te ha vuelto a aparecer desde ayer?-. Preguntó mientras instalaba un par de cámaras en mi departamento.

-No... Ella tiene mi celular, ahora ya no podré comunicarme.

-De todas maneras te iba a decir que dejes ese-. Dijo sacando algo de su bolso-. Mira... Este celular es uno común pero el único detalle es que cuando presionas el botón de encendido una gran radiación sale de el para alejar y acabar poco a poco con las almas o fantasmas.

-Oh... Entiendo, pero la verdad yo no quiero hacerle daño a Carolina-. Murmuré.

-¿Ayer no me dijiste que querías estar en paz de una vez?-. Frunció el ceño.

-Sí, pero no me refería a hacerle daño, ella ha pasado por mucho sufrimiento, algo que hasta yo pude experimentar-. Agregué.

-Esta es la única manera Damer, debes confiar en mí-. Puso su mano en mi hombro.

....

En eso aparece un espíritu el cual nunca había visto, era una chica de piel pálida que parecía ser de mi edad, ella llevaba puesto un vestido rojo como la sangre y el cabello corto a la altura de la barbilla.
Aquel espíritu me estaba mirando de manera penetrante, me quedé perpleja y la investigadora al ver mi reacción, volteó y me impresionó que ella también pueda ver espíritus.

-¡Erick, activa la grabadora!-. Dijo Sofía acercándose poco a poco al espíritu.

-¿Qué haces?-. Le grité.

-Muchacha, dime, que es lo que buscas en este lugar-. La investigadora le preguntó al espíritu.

-Vengo de parte del padre de Carolina...-. Respondió el espíritu.

-¿B-Buscas a Damer?-. Preguntó tartamudeando.

-Sí.

-¿Acaso planeas llevártela contigo?-. Susurró con algo de miedo.

-Sí.

....

No entendí mucho, ¿Planeaba llevarme?, ¿A dónde?, ¿Para qué?, esas eran las preguntas que más retumbaban en mi mente, de pronto Sofía Collins se acercó a mí y me dijo:

-Lamento no poder hacer nada Damer, este espíritu tiene mucha vitalidad, al parecer hay otros más que la apoyan y si intento hacer algo con ella, podría costarnos la vida... Hazle caso.

....

¿Qué acababa de decir?, ¿Acaso no había otra solución?, en ese momento tenía mucho miedo y llegué al punto de temblar, acepté ir con ese espíritu, todo iba a ser un sueño pero un sueño el cual tal vez nunca despierte.