Macabra Tentación

Cap.5 Programación errónea

Zim-No tienes porque temer ¿Entendido, larva humana?

Dib-*Mierda* ok

Dib y Zim se encuentran en la Inmensa, caminando donde se encuentran los más altos, en espera del irken que más odian.

Ambos caminan en dirección a una puerta algo grande, era la entrada a a la cabina de la Inmensa, el centro que mueve todo.

Dib -Zim, ¿Que ocurrirá cuando entre? ¿Qué debo hacer?

Zim-Nada, lo único es permanecer calmado- Zim no tenía ni la menor idea.-

Dib-Confío en que no te equivoques..

Zim abrió la puerta, pasando él primero seguido de Dib. Zim comenzó a hablar, primero saludó a sus altos en señal de respeto, prosiguió con presentar a Dib.

-Vaya, debo admitir que no está mal- resonó la voz del rojo, mejor conocido como "Red".

-Zim, dinos, ¿Por qué necesita un pak?-Habló el segundo líder Irken
Purple, con su famosa impaciencia.

Zim-Sin él, mis altos, sería completamente inútil ante nuestro mundo y sus acciones, sus habilidades y capacidades están a la altura de un irken.

Red-Ya lo sabemos, pero dinos el propósito real.

Zim-No hay propósito encubierto, mis altos.

Red-Hmm. Iniciaremos con la operación, ¡Ve a la sala!

Zim-Claro, mi alto. -El irken presionó un botón que abrió el suelo, dejando ver entre el humo que salía, un elevador, en el cual entraron Zim y Dib, después se cerraron las puertas comenzando con el movimiento vertical del elevador hacia abajo.
Unos minutos después el movimiento se detuvo, provocando en Dib un zumbido en sus oídos. Las puertas se abrieron y se encontraron en un laboratorio lleno de cápsulas, para sorpresa de Dib, que contenían irkens, pero pequeños encerrados en estas.-

Dib-¿Por qué tiene irkens en esas cápsulas?

Zim-oh, verás humano, de allí los irken provenimos, yo nací en una de esas.

Dib-¿Entonces, como se forman? Quiero decir ¿No tiene padres que los hicieron?

Zim-Prácticamente no, el ADN lo colocan en unos tubos que son llevados a las cápsulas y son expuestos a diversos líquidos para formar embriones. Así es como mi especie se reproduce.

Dib-Que triste.

Zim-  Ignorando el comentario del chico- Escucha con atención, ¡Lo que te diré puede salvarte la vida! quítate la camisa y acuéstate boca abajo en esa camilla, empezaremos pronto, y si durante la operación sientes dolor, cierra los ojos.

Dib -Eh, bueno.- Dib entró en una habitación donde estaba la camilla que decía Zim, se quitó la camisa y recostó su cuerpo boca arriba. Observó por un momento las máquinas que estaban suspendidas arriba, en el techo, eran pequeñas en comparación con una, que era muy grande. La observó detenidamente, parecía que estaba diseñada para perforar, tenía dos "tornillos" a los lados, sujetados por unos brazos mecánicos.

Mientras más la veía, sus pensamientos lo aterraban con visiones del posible uso, y mejor se recostó boca abajo, sintiendo en su pecho el frío contacto con la camilla, y un escalofrío en todo su ser...

"¿Qué estoy haciendo con mi jodida vida?"

Zim se preparaba para operar está situación, sin esperar que el gran alto Red le llamara.