1973, una chica rebelde es obligada a ingresar a la escuela militar donde la prestigiosa comandante Woods es la encargada de entrenar a los nuevos. Una historia donde la homosexualidad no es bien vista en esa época. ¿Podrá prevalecer su amor?
pd: es...
Miro por la ventana, esta tan oscuro que no se logra mirar más allá del árbol que está a dos metros de mi posición, el día se percibe heladísimo, aún no logro entender cómo pudiste ser capaz de enviarme hasta acá, digo yo. ¿Qué tan mal te hice para merecer esto?, me levantan a las 5:30 AM para desayunar algo rápido y luego nos hacen entrenar hasta las 10 AM.
Aquí nos hacen unas especies de clases en la tarde, como bien sabes, apesto en matemáticas pero soy la mejor de la clase en biología, te asombraría saber que estoy pensando en seguir tus pasos y dedicarme a la medicina. ¿Has ido a ver a papá? No debes dejar de visitarlo, no es lo que él querría, llévale una flor de mi parte; me encantaría poder ir contigo y estar junto a ti en estos momentos, pero como ves... Me trajiste hasta acá sin mi consentimiento.
No todo es malo, he conocido gente maravillosa, como Raven y Octavia, solemos arrancarnos al río cuando nadie nos está mirando, creo que sin ellas no podría soportar esto, mi cuerpo ya está pasando la cuenta de tanto ejercicio, pero con ellas a mi lado eso ya no me importa tanto. También hay otras personas, como Ontari, con quién choco cada vez que nos vemos, creo que me detesta, no tengo idea del porqué aún, solo sé que un día de estos me encontrará con rabia y terminaremos yéndonos a combos, sé que soy una peleadora, tal vez por eso mismo me metiste aquí, así que ya sabes quién saldrá perdiendo.
Hay veces cuando quiero que me vengas a visitar, y cuando no... no lo sé, es un sentimiento ambiguo, eres mi madre, pero no logro entenderte, y creo que siempre tendré este sentimiento hacia ti, eres la culpable de muchas cosas.
Creo que ya es hora de dormir, sé que esta carta está un tanto desordenada, pero hoy salimos con las niñas al río y bebimos un tanto de vino blanco, así que estoy un poco mareada... Me convertí en lo que odié de la muerte de papá... Lo extraño tanto, mándale un beso enorme de mi parte a Bellamy.
Clarke."
Me levanté de la cama, fui hacia el escritorio mientras tambaleaba y me sujetaba de la pared, no debí tomar tanto, a la próxima no me calentaré con el reto de Raven de quién podía tomar más. Tomé el sobre entre mis manos, metí la carta como pude y me dispuse a salir.
-Hey rubia, creo que no estás en condiciones de salir. –escuché decir a Raven.
-No te metas, debo hacerlo ahora o mañana no seré capaz. –respondí.
-No entiendo este odio que tienes hacia tu madre. –dijo Octavia.
-Nunca lo entenderían, a veces ni yo lo hago.
-¿Y qué dice tu carta? –preguntó Raven.
-Particularmente... de todo, vuelvo enseguida.
-Afírmate bien rubia.
Iba caminando hacia el buzón, tenía que sujetarme de donde pudiese en los pasillos, mi cabeza daba vueltas increíblemente, llegué al buzón y dejé la carta dentro. Tuve que apoyarme en la pared y sentarme en el piso, nunca me había sentido tan ebria, creo que no debí tomarme esas 2 botellas y media yo sola, pero gané 10 dólares a Raven.
-¿Estás bien? –oí decir, levanté mi vista y solo podía ver a alguien acercarse a mí, era una mujer con el pelo largo.
-Sí, solo necesito un momento –respondí mientras mis ojos se cerraban solos.
-Hey, necesitas irte a tu cuarto, si te pillan aquí tendrás problemas. –puso mi brazo alrededor de su cuello e intentó levantarme.
-Gracias. –Respondí ya de pie- si me pilla el general tendría muchos problemas.
-Conmigo ya los tendrás cadete –escuché como se reía.- Pero eso lo veremos mañana.
-Creo que no debí beber tanto.
-No debiste hacerlo. ¿Cuál es tu cuarto y apellido?
-Griffin, cuarto 2010. ¿Estoy en graves problemas?
-Ya veremos... Ahora lo importante es que duermas.
Llegamos a mi cuarto, ella golpeó y Raven abrió.
-Por fin llegaste rubia, estábamos preocupadas, creímos que te habías intoxicado. –Dijo Raven sin percatarse de quién estaba al frente.- ¡Oh, Comandante Woods!
-Cadete Reyes... ¿Me puede explicar que está pasando aquí?
-¡Comandante Woods! –grité saliendo por un momento de mi borrachera por el shock de verla ahí de pie, la gente le temía, ya que en los entrenamientos era una persona muy ruda y fuerte.
-Esto que están haciendo es para denunciarlas al General Thelonius, para que les haga un sumario, está estrictamente prohibido tomar alcohol dentro del recinto.
-No, por favor –rogué- es la primera vez que lo hemos hecho, no nos haga esto.
-Sí, es verdad, es la primera y última vez comandante –rogaba Raven también- nunca más lo haremos.
-Las perdonaré solo está vez, pero que no se vuelva a repetir cadetes, de todas maneras tendrán un castigo conmigo.
-No se preocupe mi comandante –dijo Raven mientras tomaba mi otro brazo para ayudarme a entrar a la habitación.
-Nos vemos mañana, que duerman bien –dijo la comandante alejándose de nuestra puerta, yo no podía dejar de mirar mientras se iba.
-Vamos rubia –dijo Raven mientras nos girábamos.
-Ah... -escuchamos decir tras nosotras a la comandante, que se había vuelto donde estábamos con Raven- Buenas noches Griffin. –noté una leve sonrisa y por fin pude ver su rostro a la perfección, no la había conocido antes de hoy, solo había escuchado de ella por Raven, en cuanto sonrió noté sus ojos verdes y como transmitían una tranquilidad inimaginable.
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-Bue... buenas noches comandante... -respondí mientras cerrábamos la puerta.
He vuelto! les traigo una historia que espero sea cortita, no como la anterior, tiendo a hacer capítulos no tan tediosos porque a veces aburre leer tanto, espero que les guste, cada comentario será muy buen recibido. Saludos a todos!
