Exilio.~

Capítulo 14

1 de Septiembre 1973

-Lexa... conversemos, no hagas eso por favor, que luego no respondo por mis actos... Lexa, vamos, cuéntame de tu vida, tu conoces la mayor cantidad de la mía -decía mientras ambas estábamos acostadas en el sofá de su oficina, sentía los labios de Lexa sobre la piel de mi cuello, lo cual me hacía estremecer y sentir que perdería todo el control.

-¿De verdad quieres que pare? -preguntaba Lexa a pocos centímetros de mi oído.

-No quiero... -me alejé y la miré a los ojos fijamente para luego volver a besarla- pero la gente se preguntará por que nos estamos demorando tanto.

-Vamos Clarke, nadie puede recriminarme nada, yo mando aquí.

-Y que seas tan dominante es lo que más me pone -dije ahora yo acercándome a su oreja y arañándole la parte baja de su espalda.

Desde que nos habíamos confesado y arreglado la situación con Lexa, cada día encontrábamos la forma de estar juntas en su oficina, siempre transcurría ese tiempo entre abrazos, y besos. De alguna forma u otra siempre acabábamos de la misma manera, rogando que parase porque aún no me sentía cien por ciento lista, con ella quería que no fuese algo a la ligera, y que claramente hubiesen más de un sentimiento involucrado que calentura. Todo había sido normal a los otros días hasta que alguien interrumpió nuestra felicidad al tocar la puerta.

-Maldita sea. ¿No pueden dejarme sola un segundo? -gruñó Lexa- te acaba de salvar la campana Griffin.

-Y lo agradezco profundamente.

Lexa se levantó de mala gana y comenzó a acercarse hacia la puerta mientras yo me acomodaba en el asiento.

-Buenas tardes -escuché decir a la comandante cuando ya había abierto la puerta.

-Lexa, que bueno que te encuentro -oí decir a Nylah- tenemos que hablar.

-Si, adelante.

-Oh, no sabía que tenías compañía -dijo la rubia cuando ya se había adentrado en la habitación.

-Sí... Clarke solo pasaba a visitarme y hablar algunas cosas.

-Hola Nylah. ¿Cómo estás? -pregunté de mala gana.

-Hola guapa. ¿Bien y tú?

-Bien gracias.

-Me alegro, así que... -dijo mirándonos a mi y a Lexa, de una en otra- ¿Ustedes?

-No digas tonterías -recriminé.

-No me mientan, si yo ya no me pongo celosa, en serio, ya lo superé...

-¿Segura? -preguntó Lexa- por que no me gustaría tener que pelear contigo por Clarke.

-Sí, segura, es más, ya estoy conociendo a otra compañera.

-Vaya... ¿La conozco? -pregunté frunciendo el ceño.

-Sí Clarke, pero no daré más información -suspiró- en fin, avísame cuando estés sola, esto es muy importante.

-¿De qué trata? 

-Creo que es algo que nos incumbe solo a nosotras dos, es sobre el 13. -noté como Lexa tensaba su rostro, presionaba sus puños, definitivamente esa fecha era algo importante.

-No se preocupen, yo me voy.

-Gracias -respondió Lexa mirándome.

-Nos vemos más tarde. ¿Sí?

-Sí, como siempre.

-Adiós rubia, cuídate mucho.

-Tú igual Nylah -dije acercándome a la puerta para salir- ¡Ah! por favor, no le comentes a nadie esto.