ROMPEME EL CORAZÓN COMO TÚ QUIERAS

Aunque te suene patético, yo sigo amando

Sin nada más que hacer, subí minutos después de Liam hacía el segundo piso, me dirigí a la habitación de invitados, está tenía una vista hacia el jardín de Liam, lastimosamente no hacía la hermosa piscina, un suspiro salió de mi, que rayos le pasaba a Liam era como el grinch del amor había veces en que lo quería golpear por su actitud "anti- amor", estaba claro que no creía en las relaciones amorosas, pero el no creer ni en la mismísima palabra me descolocada, entiendo el hecho de una familia a la cual no se sabe si se le puede llamar familia, pero de ahí a partir a la desilusión completa, me miro como si estuviera drogada y el fuera una de esas personas de gran ética moral porque no aprueban tal cosa.

Cerré unos momentos los ojos, estaba muy cansada, pero mi preocupación por Liam iba en aumento y no me dejaba descansar.

3:00 AM

-maldición- susurre levantándome de la cama, tirando lejos de mi cuerpo todo cobertor que me impidiera levantarme victoriosa-.

Salí del cuarto decidida, recorrí el pasillo, pasando por mi lado la puerta del baño para llegar a la puerta de la habitación de Liam, cerrada y lamentablemente con llave. Muy bien esta era una clara señal de "mantén la distancia" muy práctico Liam y maduro, claro esta. A veces sentía que mi loca amiga pelirroja y este dios griego tenían más en común de lo que creía, y ahí es cuando yo, Alice me sentaba en el suelo helado y pensaba a las 3:27 de la madrugada, ¿por qué no podía buscar amigos normales, sin problemas emocionales de por medio?

Tenía frío y mi cuello dolía, sentí el sol en mi cara y eso hizo que por fin despertará y pensará:"esta no es la cama", rápidamente abrí mis ojos y me vi tirada en el pasillo y con un dolor de cuello espantoso, además de tener frío, genial, me levanté de mi
"cama" de una noche y me dirigí rápidamente a la habitación de invitados, lo peor para le humor de Liam sería verme durmiendo en la puerta de su habitación.

Me vestí aún con mi cara de zombie y mi dolor de cuello, definitivamente este no sería el mejor de los días pero no me quejaria hasta que Liam me diera una razón para aquelllo, solo una más .

-Preparé café - dijo la molestia de cu*lo, este chico de gran figura, ojos llenos de emociones y cabello cobre a la luz-.

- créeme que no quiero ese café a menos que ahora mismo me digas que rayos pasa contigo, bipolar en ascenso- dije acercándome a su persona. El sonido de mis botas era lo único que se escuchaba en ese momento en la casa-.

-Suspiro-no hoy- no me miro más y su sonrisa desapareció de su rostro-.

-no entiendo porque razón quisiste saber sobre "el mejor momento con mis padres", si al final terminas haciéndome sentir culpable por haberlo dicho. ¡No dormí nada preocupada por ti! -chille molesta-.

-¡pues yo tampoco dormi!- dijo a lo que hubo un silencio nuevamente, hasta que volvió a hablar- si tanto insistes en saber, pues la razón de todo esto es Malia, sólo eso diré .

- debo irme- dicho eso tomé mi bolso y salí de casa de Liam, tomé un taxi, el nesecitas tranquilizarse y conmigo serca no lo haría-.

...

Tres días en que no he querido ver a Liam, comenzaba a sentir como me dolía y bajaba mis ánimos aquello, estas dos semanas el me distraia de lo que aún dolía y eso que me dolía tenía nombre, no puede estar todo bien luego de que tu novio te allá engañado y yo aún lo sentía como una herida abierta, le quería y lo digo haciéndolo. Tres días continuos en que pasé en mi habitación, tirada en mi cama o en el piso, leyendo algún libro que no lograba llamar mi atención, ya que todo lo que tenía en mi mente no me lo permitía, maldición Matt y Liam, juró que si algún día tenía la posibilidad de ir a vivir con las Amazonas lo haría, hay veces en que los hombres apestan y está era una de esas veces. Me sentía como han hipócrita, odiaba a los hombres pero al no poder estar con ninguno de esos dos idiotas casi estaba por tener una crisis de identidad.

Llamada entrante...Idiota

Pues el tercer llamado en el día si que debía sentirse o muy molesto o culpable, mire unos momentos más la pantalla con el seudónimo " idiota" en letras grandes, era un apodo cariñoso para la que se merecía en estos momentos Liam.

-si crees que con 3 llamadas al día te perdonare, pues estas equivocado- dije con mi voz neutra-.

-lo se, por eso estoy en la puerta de tu casa- hubo una pausa en la conversación hasta que dijo- no me digas que seguirás con tu actitud de Infante y ni siquiera serás capaz de conversar conmigo.

- puedes decir que me comportó como una malcriada pero, jamás el decir que soy una cobarde- dije casi hirviendo en este momento en furia, el centro de comando de mi cabeza era dirigido por "Furia" en estos momentos, eso era seguro-.

- suspiro, y según como lo hizo se perfectamente que estaba por arrancarse el cuero cabelludo, estaba exasperado- vez a lo que me refiero, yo no he dicho que seas cobarde, puedes calmarte y mover tu presencia hacia la puerta de tu casa, así como va esto tus vecinos creerán que vengo a robar tú casa, y créeme que así como va toda esta situación,no necesitamos más drama-.

- el único que aporta drama eres tú- dije escupiendo las palabras mientras acariciaba mis sienes-es por eso que no...- en ese momento el condenado de mi amigo me cortó y eso desató todo en mi. Un minuto después sentí pasos hacia mi habitación y seguido toques en mi puerta- papá no veré a Liam vete-dije tratando de soñar calamada.

-se abrió la puerta dando paso a Liam- pues no soy exactamente tu padre pero si quieres me puedes llamar así más seguido Alice, suena bien en tus labios- dijo de manera provocativa, con sus labios curbandose, para luego sentarse a mi lado en el piso y tomar la postura sería- dejando las bromas, tenemos que hablar y no quiero gritos- dio dejándome, con las palabras en la boca.

-Esta bien- dije, pasando mis manos por mi rostro y volviendo a mirar a Liam- estoy molesta pero haré esto lo más civilizadamente posible.

- gracias-dijo Liam a mi lado-.

- lo que hiciste ese día al hablarte de mis padres me molesto - le solté sin rodeos-.

- ¿mis sentimientos ante eso te molestaron?- dijo casi burlón- no puedo reprimir lo que siento Alice, yo me expresó.

- tú expresandote, eso es nuevo- dije soltando una risa amarga- vamos Liam no me mires de esa manera desaprobatoría, tú ni drogado dirías lo que sientes, por poco eres un cubo de hielo- dije con indignación cruzandome se brazos, lance un suspiro- dejando esto de lado, quiero aclarar que me molesta que tu expreses tu desilusión con Malia, pero no por lo que tú crees, sino que porque no me permites hacer lo mismo, no me escuchas de buena manera cuando yo te hablo de algo relacionado con Matt- hice una pausa viendo directo esos ojos que en estos momentos eran oscuros, impenetrables -lo nesecito Liam , nesecito el esfuerzo de tú parte para que me dejes hablarte de cuanto me duele todo por lo que estoy pasando, no puedo ser como tú, que te quedas con tu dolor, en su lugar bien guardado ante cualquiera, no puedo ser la maldita chica impenetrable en la que me quieres convertir, no sin antes descargar todos estos sentimientos- hice una pausa para calmar un poco mi discurso- aunque te suene patético yo sigo amando.

-suspiro, sacando todo el aire que ¿había estado conteniendo? y lo único que hizo con dificultad fue asentir ante mis palabras-.

- Así me gusta, ¿ahora si me contarás sobre que paso exactamente con Malia?

-Primero ven y dame un abrazo-eso fue suficiente para dejarme sin palabras ni movimientos-.