Capitulo 3: Mi Misión

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La batalla fue sangrienta. Dura, difícil, complicada. Mandaban estrellas fugaces que iban a  despegar. Digo fugaces, porque los voy a derrotar.

La batalla en Odpor, empezó muy temprano. Las batallas en Odpor es un pacto entre Oru y Pocity. Al empezar la guerra, los jóvenes de ambos bandos en tierras lejanas tuvieron una épica batalla, en la que murieron todos los que fueron. Eso es lo que dijeron. Entonces desde entonces, en el campo de batalla dos Soturits - que son guerreros de 8 a 16 años -, son mandados a Odpor, a pelear. El ganador, se lleva comida y armas.

Esas tierras lejanas, es Odpor. "Tierras Lejanas", "Bando de la Paz", "Arena de muerte", "Frontera de los perdidos", y más, son unos de los cuantos nombres que recibe Odpor. Para mi, solo es una pequeña parte de Alam kehidupan y Leute, que ni Pocity ni Oru comprenden. 

"Eres parte del Escuadrón Igorha de Pocity. Tu puedes."

Me decía a mi misma cuando iba a recibir un golpe de un joven de ojos casi rojos y cabellos castaños. Su cuchillo tenía tecnología de Oru. "Perfecto"

— ¡Tonta pociticana!— Grita el joven con ojos furiosos. Al tenerme en el piso. Cree que ganó. Volteo de reojo a mi compañero. Esta peleando con un joven con corte militar, ojos negros y cabello pelirrojos. Su pistola, tenía el mismo diseño que el cuchillo de su compañero. — Las niñas bonitas no deberían pelear. Que desafortunado, tendré que hacerte daño.— Acerca su cuchillo a mi garganta. Le sonrió. Se desconcertó, en ese momento de duda, Celso le da una patada con sus grandes botas.

— Para tu información...— Grita él de repente...—Se dice, Pocity.— Al tenerlo en el piso, Celso me da la mano, y me levanta.  Se acerca a mi, y me dice en el odio en un susurro.

— Eres muy buena, actuando como la damisela en apuros.— Levanto la mano, y vuelven a salir chispas de colores, y por ende, se levantan las raíces del árbol más cercano. Las raíces funcionan como soga, para amarrar al Igorha enemigo.

— No te acostumbres.— Y encierro a ambos enemigos en una celda de raíces. — Eso los mantendrá ocupados otra media hora, para llevarnos la recompensa.— Ya ganamos la batalla. No era totalmente necesario. Pero si una prevención. 

Llegamos a la entrada del Coliseo de Odpor. Ahí estaría la recompensa que Celso y yo ganamos. Ese es el trato.  El Coliseo de Odpor, es majestuoso. La construcción de piedras, con pilares, decoraciones de hace de miles de años. Plantas, que me llaman. En las paredes, están escritos, varios versos.

"Odpor debió destruirse por ordenes de los Demhans... ¿Por qué la mayor parte de sus construcciones no están en ruinas? De todas formas, esta abandonado... Años después, Pocity y Oru lo encontraron, y lo reclamaron..."

Al llegar, la recompensa consistía, en varias cajas llenas de comida, y armas nuevas. Todo impecable como siempre. Ganar una batalla en Odpor, es un honor. Y una ruina, para el perdedor.

"Ni en Oru, ni en Pocity, saben como es que se reparten la recompensa, ni quién... Piensan que es una entidad misteriosa. ¿Un demonio, un fantasma, un ángel...? 

...¿Antepasados?"

Salimos lo más pronto posible del Coliseo junto con la recompensa. Majestuoso o no, era temido. 

Saliendo de Odpor, te encontrabas con el laberinto de Armonía, y del laberinto de Armonía te encuentras con el Río Tuteur, y del Río llegas a la entrada a Pocity. El camino no era tan complicado si vas en grupo. Hay peligros, sí. Pero Celso y yo, nunca tuvimos problemas. Eramos un equipo formidable. Tanto en batalla como en la vida cotidiana. 

Enojada con él o no, siempre esta a mi lado.

— ¿Qué pasa?— Le digo a Celso, se detuvo en medio del camino. Ya estábamos cerca de la entrada a Pocity.

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⏰ Última actualización: Jul 25, 2017 ⏰

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Rosa: La líderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora