En un reino donde los conquistadores y guerreros alfa gobiernan indiscutiblemente y, los omegas sin reclamar, son el premio más valioso que hay. La competencia para marcar omegas se había vuelto feroz con el tiempo, tanto que el Rey creo una nueva tradición: la caza.
Cuando un Omega llega a la mayoría de edad, él o ella tiene que ser presentado al reino para participar en la 'caza' como un premio. Cualquier Alfa que desee encontrar una pareja tiene que marcar a un Omega en la caza, antes de que otros tengan la oportunidad de reclamarlo. Se diseñó una especie de carrera: a los Omegas se les daría tiempo para correr y esconderse antes de que los alfas sean liberados con el deseo de atrapar uno. Hacerlo de esta manera proporcionaba entretenimiento y extinguía cualquier duda sobre a quién le pertenecía él o la Omega.
'La caza' se hace una vez al año y es tratado como una gran celebración. Todos los Omegas quienes eran mayor de edad ese año deberían ser presentados para correr. Algunas veces solo había algunos Omegas quienes participaban, algunas veces eran numerosos, pero las cosas como trabajaban nunca cambiaron. Nunca había Omegas quienes se iban sin ser reclamados.
Era pura suerte si un Omega obtenía un alfa decente, pues algunos de ellos podían ser crueles y abusivos, no era desconocido de que los alfas podían ser francamente horripilantes, pero ellos trataban de no detenerse en los pensamientos de esa naturaleza. Al menos es lo que pensaba Arthur, pero desafortunadamente, él era realista y pesimista, que vino como resultado la dura vida bajo el dominio frio de sus hermanos. Tenía una visión muy sombría de toda la carrera y no esperaba que su vida cambiara mucho. En su mente se estaba preparando para quien quiera que le dé sentencia para el resto de su vida.
Se había encargado de cocinar y limpiar por sus hermanos, así como conseguir un trabajo donde tenía que fregar pisos en una taberna. Fue aquí donde él conoció a un Omega de su misma edad, Feliciano. Su vida era más difícil que la de Arthur, pero nunca dejo mostrar lo andrajoso o golpeado que estaba. Después de la muerte de su abuelo, Feliciano y su hermano gemelo fueron enviados a un orfanato donde los pusieron a trabajar. Así es como Feliciano termino fregando pisos; ganando dinero para el orfanato. Su hermano había sido adoptado por un rico alfa como un sirviente personal para su hijo, y ya había pasado un año desde que no oía hablar de él.
Arthur y Feliciano se convirtieron en amigos cercanos debido a su carencia de amabilidad en sus vidas.Aunque hoy era diferente de la rutina normal; hoy Arthur y Feliciano iban a ser presentados a la multitud para correr antes de que fueran atrapados en la 'caza'. Estaban en el borde de la ciudad, antes de llegar al bosque; con todos los otros Omegas de su edad, siendo llamados por todos los Alfas alrededor de ellos.
Los dos trataron de ignorar lo que decían y decidieron hablar entre ellos.
"¡Tal vez podamos atraer a buenos panaderos! ¡Piensa en la comida! ¿No sería bueno, Arthur?" Feliciano dijo feliz, nunca dejando de ser alegre y optimista. Arthur admiraba eso de su amigo.
"Supongo que lo sería, teniendo el estómago lleno suena tentador" Arthur rió ligeramente. "Solo estoy esperando a un Alfa en un juicio sano. Ciertamente no podemos conseguir a ninguno pobre, sería una desventaja."
Había un total de cincuenta Omegas que se presentarían ese día, un número menor de lo usual, pero los números variaban cada año así que no era un motivo del cual preocuparse. Había Omegas de todas las clases sociales, todos con la esperanza de atraer a los Alfas más fuertes; porque eso era lo único que importaba, tener una pareja fuerte para proveer de ellos.
Arthur pensó que era estúpido confiar en el otro de tal manera, pero no tuvo más remedio que mantenerse entre los más subordinados. Arthur no tenía molestias en ser un Omega, aunque sería más feliz para él si fueran tratados mejor.
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Hunting [Editado]
FanfictionLos omegas son reclamados en una 'caza' ceremonial que sucede cada año. La meta de cualquier alfa es atrapar a un omega, y la meta de cualquier omega es tratar de salir sin ser reclamado. Es turno de Arthur y Feliciano de ser cazados. ¿Cómo va a ser...