Me desperté, abrí los ojos con facilidad ya que todavía no había amanecido, me iba a levantar para tomar mi celular y ver la hora pero no pude ya que el brazo de Louis me rodeaba la cintura, con delicadeza se lo quité para que no se despertara, fui hasta la mesita de luz y miré la hora en mi celular, eran las 3:28 de la mañana, me dirigí al baño y me miré en el espejo, pensé que estaría peor, luego hice mis necesidades, me miré un poco en el espejo, y al salir del baño apagué la luz.
Para volver a la habitación tenía que pasar por un pasillo, y en ese instante me pasó una imagen por la cabeza de la película de terror que habíamos visto en el cine, me quede paralizada, yo era muy miedosa y asustadiza y más en estos momentos, al reaccionar caminé rápido por el pasillo a oscuras.
Entré a la habitación y me acurruqué al lado de Louis que seguía dormido soñando quién sabe qué, aún tenía aquella imagen de la película, “solo es una película Lina no seas tonta” dije para tranquilizarme y al parecer funcionó.
Me iba a dormir pero escuché un ruido que provenía de la planta baja, comencé a imaginarme cosas horribles, como que alguien entró a la casa, o había un espíritu dando vueltas por la casa, “Eres una tonta Lina como va a haber un espíritu es la casa, no seas idiota”, traté de pensar en cosas lindas, como a un unicornio saltando por un valle repleto de flores, o recordar momentos hermosos de Louis y yo para que se vallan esos tontos pensamientos, pero no funcionaba.
Tenía una duda, ¿Lo despierto sí o no?, me daba pena se veía tan dulce durmiendo, 'pero por otra parte me estaba muriendo de miedo.
-Lo…Lou-lo llamé con un susurro como con miedo de que alguien me escuchase.
Lo moví un poco, este solo soltó un “mmm..mm” lo seguí moviendo.
-Louis despierta, te…tengo miedo-le dijo con la voz temblorosa.
-Mamá….¿Qué?-dijo medio adormilado dando se vuelta y dándome la espalda.
-Lou-lo llamé-soy yo Lina-dije con una pequeña risa. Otra vez escuché el rudo y me quede quieta.-Louis-dije con vos aguda.
-¿Qué pasa?-dijo dándose vuelta otra vez mas despierto.
-Ten..go miedo-dije con la voz entrecortada, me acosté nuevamente en la almohada y Louis se acercó y me rodeó con su brazo.
-¿Mejor?-dijo y asentí, pero luego recordé que no podía verme y en un susurro le dije que si.
***
Me desperté y poco a poco fui abriendo los ojos, hasta ver esos hermosos y perfectos ojos azules.
-Bueno días dormilona-me dijo con una sonrisa, tomé la sabana y me tapé la cara, escuché su risa y no puede evitar reír yo también.-Eres una miedosa-me dijo y me destapé para mirarlo a la cara.
-No es mi culpa que mi novio me lleva a ver una película de terror-le saqué la lengua y el tomo mi cara con sus manos.
-Te veías tan tierna enojada-me hice la ofendida.
-Era de noche y estaba oscuro, como no iba a tener miedo, estuve más de cinco minutos tratando de despertarte-el rio-la próxima vez te voy a dar con la almohada-dejo de reír.
-Si me tiras una almohada tendrás que sufrir las consecuencias-dijo con una sonrisa malévola.
-Huy, que miedo que te tengo-dije sarcástica, él se abalanzó sobre mí y yo quedé a bajo de él.
-Louis, me estas aplastando-escuché su risa.-Enserio te lo digo, quítate por favor.-no me movió, asique traté de sacarlo de encima de mí pero era muy pesado.
-No lograras quitarme nunca-
-Si no te quitas te pellizcare ese gran trasero que tienes-dije casi sin voz, ya que me estaba quedando sin aire-en serió Louis, quítate-él se levantó y suspiré-por fin te quitas-el rio y se acercó a mí. Aproveché la oportunidad y le pellizqué el trasero.
-Auch-dijo adolorido-sé qué es irresistible mi trasero y que es muy sexy, pero no para que me lo pellizques.-yo solo reía.
-Es que se veía muy tentador-dije levantando las cejas.
-Losé-dijo con una sonrisa sarcástica y comencé a reír-Pero aunque me pellizques el trasero de amo-dijo y me beso, al principio fue un beso dulce, pero cada vez se fue volviendo más salvaje, hasta que nos separamos por algo llamado aire.
-¿Qué te parece si bajamos a desayunar?-me pregunto sonriendo mostrando sus hermosos y blancos dientes.
-Me parece perfecto-le dije dándole un corto beso de los labios.
Los dos bajamos en pijama, nos sentamos en una mesa redonda decorada con un mantel verde oscuro, dos pequeños platos y dos vasos, al lado de los platos un cuchillo de untar y una cuchara, en los dos platos habían dos tostadas, luego en el centro de la mesa había una mermelada de manzana, durazno, pera, ciruela y frambuesa.
-Esto se ve delicioso-dije contemplando las 5 mermeladas.
-Si lo sé-dijo tomando una de las mermeladas y untándola sobre una de sus tostadas.
Nos divertimos toda la tarde con algún beso, abrazos, chistes y juegos, ya era de noche y nos habíamos decidido a ver una película de comedia.
-Emm, Lina, ¿Te puedo hacer una pregunta?-dijo mirándome seriamente a los ojos.
-Claro, dime-dije mirándolo con una sonrisa, pero al ver que él seguía serio se me borro de la cara.
-¿Te sigue gustando Federico?-no respondí, ¿él desconfiaba en mí?, eso sí era un golpe bajo.
-No confías en mí-dije segura.
-Sí confío-suspiro-es que tengo miedo de perderte-lo miré a los ojos y miraba con tristeza hacia el suelo.
-Nunca me perderás, yo te amo-le dije y me miro con una sonrisa triste-nunca lo dudes-me acerqué a él y lo besé, pero no un beso cualquiera, sino uno lleno de sentimientos.
-Yo también te amo-dijo cuando finalizó el beso-bueno ahora a ver la película-dijo sentándose en el sillón, yo me senté a su lado y me acomodé acurrucándome en él.
