• 5 •

180 13 1
                                    

» Un giro inesperado «

La pelirosa miraba con un poco de enfado, a nadie le gustaría recordar viejos tiempos o al menos no en un momento donde estés con alguien que no deseas hacerlo. Pero cuando el azabache termino Sakura se abalanzó para abrazarlo. De alguna forma sentía esa conexión con el que por más que trataba de superarlo no podía su corazón se sentía confuso o bipolar. Unos días juraba amar a Naruto y otros días simplemente quería dejarlo para volver a esa soledad, ella era rara... Ella era... Extraña y confusa un pequeño libro de secretos

—Sakura...— Susurró bajamente Sasuke

—¿Q-Que...?—

—No puedo superarte aún... Porque cada que pierdo todo también te pierdo a ti... Y no, no quiero que eso pase de nuevo— Sus palabras parecían ser verdaderas y sinceras pues parecía que su ví podría quebrarse en simples minutos.

—Sasuke...— Susurró pero negó gruñendo para volver a sobar su espalda con el jabón de fragancia a un olor a vainilla

.
.
.
.

Sakura

Después de ducharlo, envolverlo en una toalla y llevarlo a la cama. Tuve que quitar y barrer todos los vidrios o volvería a llenarse de sangre y tendría que volver a bañarlo. Lo recuesto para así arroparlo y apagar la lámpara que está en su mesita de noche

—Oye, no te vayas acuestate a mi lado..— Me dice pero niego, estoy con Naruto.

—No, tú puedes dormir solo— Digo fríamente

—Por favor— Chilla cuán cachorro regañado, acepto que eso fue tierno

—¡Ugh, bien!—  Me recuesto a su lado y siento sus débiles brazos abrazarme y junta nuestras frentes, esto siempre lo quise, siempre soñé con esto... Que algún día podría pasarme con el...

Pero todo se arruinó en un parpadeo, eso para cuando te enamoras mucho de una persona que te termina abandonando. Cuando lo veo dormido me levanto con cuidado, parece más tierno dormido que despierto es la segunda vez que lo veo así.

Cierro cuidadosamente la puerta y justamente siento mi móvil vibrar

—¿Huh?, ¿Ino?— Mi voz suena con confusión y deslizó ese circulito verde para contestar

¿¡Sakura!? Oh, cielos el hospital está hecho un caos— Su voz suena agitada como si hubiera corrido un maratón —¿Porque no viniste? Necesito de ti hay un viejo loco preguntando por ti mucho— Enarco una ceja y niego riendo, parece no saberlo

—Estoy en Francia tuve que venir por unos asuntos personales— Murmuró y escucho su: “aja” atraves de la línea

¡Mierda! Que no señor no está vayase viejo cochino— Doy una risita y niego para así comenzar a bajar las largas escaleras de mármol, esa mujer tenía la vida comprada y en charola de plata

—Asi que un caos...— Murmuró con voz pícara y gruñe

¡Una tercera guerra!— Dramatiza y niego rodando los ojos

—Volvere unas semanas así que tú puedes— Le ánimo pero suspira

Que conste te espera mucho así que nos vemos— Cuelga y guardo mi teléfono para explorar la casa.

Tiene un enorme jardín, una cochera, un tejado, un armario, cinco habitaciónes, ¡Lotería!

Su casa es enorme y llena de sirvientes como si la reina de Francia viviera aquí. Llego por fin a la cocina y agarro una manzana verde pero varias sirvientas me miran y Murmuran

—Es la nueva...—

—Otra más...—

—Debio agarrar lo primero que vio en la calle—

—¡Basta, chiquillas!— Escucho una voz femenina y entra una joven de cabellera rubia, ojos morados, su cabello es corto al menos hasta los hombros y ondulado

—S-Señorita Chino..— Tartamudeaba una

—Es nuestra invitada así que guarden silencio y sigan trapeando— Asienten enseguida y salen, se dirige a mi sonriente —Asi que tú eres la famosa Sakura—

—Parece que sí..— Digo riendo nerviosa

—Sasuke me habla de ti y mucho incluso cuando esa prostituta estaba aquí— Abro los ojos de par en par ante ese apodo —Lo siento, querida pero era así bueno, en fin nosotras servimos a Sasuke desde que sus padres llegaron—

—¿Hace cuánto?—

—Hace ya 4 años— Hago una mueca, esa historia aún no la se con seguridad —Bueno, chica te haré algo de cenar ponte comoda tus maletas fueron acomodadas en la habitación de huéspedes—

—¡G-Gracias!— Me pone nerviosa esto pero acepte cuidarlo, quiero, una parte de mi quiere cuidarlo.

.
.
.
.
.

Sasuke

Abro un poco mis ojos debido a ese sonido de licuadora, maldita chino le dije que cerrará las puertas de la cocina cada que hiciera eso. Me levanto pero huelo a vainilla, mi habitación está limpia y mi cama está destendida del lado derecho. Bajo para así ver la cocina pero escucho voces

—Oh, si Sasuke es un buen chico incluso algo sensible pero con aspecto de temerario psicópata— Dice Chino y escucho otra risa, risa que conozco perfectamente.

—Lo se es buen chico y algo torpe pero supongo que es el hombre ideal— Siento varias cosas en mi estómago y sonrió un poco

—Si, pero por favor cuídalo— Pide Chino y Sakura asiente, resbalo por el líquido de limpieza y siento esa mirada verdosa sobre mi.

¿Sasuke...?—


𝙀𝙧𝙚𝙨 𝙢𝙞 𝙝𝙚𝙧𝙢𝙤𝙨𝙖 𝙛𝙡𝙤𝙧 𝙙𝙚 𝙘𝙚𝙧𝙚𝙯𝙤 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora