Capitulo XI :Crepusculo parte III

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Bueno aquí es donde empiezan las disculpas por haber tardado tanto en actualizar peeeero en esta ocasión debía prepararme para los exámenes de universidad y en lo que espero resultados pues termine el capítulo :3

De nuevo muchas gracias por leer la historia y no abandonarla a pesar de mis tardanzas :,v

A Natsu no le gustaba tomar por diversas razones. Odiaba hacer tonterías y cosas de las que se arrepintiera después, además siempre acababa perdiendo un dinero por el que en menos de dos días se terminaba arrepintiendo haber gastado. Sin embargo eso no impedía que en ocasiones donde no parecía poder pensar claramente sin que las molestias en su pecho crecieran en abundancia y le nublaran el juicio terminara atrincherado en algún bar de mala muerte en los que sabía con total confianza nadie le buscaría por lo peligroso de la zona y las personas dentro del bar no le harían nada por ser un conocido ahí, tanto el cómo su hermano.

Pero esa ocasión era distinta, no solo porque la aventurera maestra de literatura le hubiera encontrado si no porque por mucho que lo hubiera deseado no lograba olvidar ni una sola de las palabras que le había dicho a Mavis, no se había embriagado lo suficiente para ello, pero si para estar con la boca floja y contarle (de nueva cuenta) todos sus desdenes amorosos con Juvia y los celos causados por Fullbuster.

--¡Me quiero morir!-grito lo suficientemente alto, se revolvía violentamente el pelo y hacia pataletas al aire, mientras tiraba los cojines de su sofá que hasta hace unos momentos habían sido su almohada. Un sonrojo adornaba su cara, producto de a vergüenza de los recuerdos de la noche pasada-Me comporte como un idiota...se va a reír cada que tenga la oportunidad-

Pero al menos algo le había quedado además de la vergüenza insufrible de ese momento y la poca dignidad que le quedaba, Mavis tenía razón, no podía dejar las cosas como estaban tenía que encontrar una forma de hablar con la peli azul y disculparse con ella. Que bien él tenía su punto muy claro, Gray era un maldito y por su culpa Juvia lo había pasado muy mal y quizá aquello pudiera cambiar si daba su brazo a torcer, era una posibilidad que se pensaría, porque quisiera o no Juvia tenía otro punto acerca de las segundas oportunidades. Su relación era un ejemplo de ello y no planeaba dejar que todo se fuera por la borda por celos estúpidos de él (y quizá también de ella) Se recordó que también debía explicarle lo de Cana, empezó a darse tanto valor que pensó que incluso podía aclararle de una vez sus sentimientos por ella. Con eso en mente y la determinación creciente en él se levantó del sofá para tomarse una ducha.

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Juvia se levantó relativamente temprano para lo que se tiene reservado un sábado, había dormido bastante bien, la plática con Cana había ayudado mucho a mejorar su ánimo, la castaña resultaba revitalizante, era bastante risueña, divertida y agradable. Se hicieron buenas amigas después de ello. Estiro los brazos y piernas en toda la cama, viendo al techo soltó un gran suspiro. Tenía muchos asuntos que arreglar pero se encontraba animada; hablaría con Gray y después buscaría a Natsu, se disculparía con el peli rosa y si todo terminaba bien pasaría la tarde noche con él. Extrañaba su compañía. De un brinco se levantó de su cama, busco ropa limpia y su toalla, silbaba una canción de moda de la que no recordaba el nombre mientras buscaba lo restante para tomar un relajante baño, cuando una frase le golpeo de lleno "De acuerdo estoy enamorada de Natsu...". Se sonrojo de golpe y aun estando sola en su habitación sintió un gran vergüenza que le obligo a volver a su cama mientras escondía su rostro en la almohada ahogando un gritillo agudo. No es que no hubiera aceptado ya sus sentimientos por el Dragneel, es que nunca se imaginó a si misma pudiéndolo expresar de alguna forma tan abierta. Cana debía de tener poderes o algo así para orillarla a hacer algo así, pero encontró que superando la vergüenza inicial una sensación de bienestar le empezó a inundar, se sentía bien poder decir que estaba enamorada de Natsu, con un sonrojo en sus mejillas y una sonrisa en el rostro se levantó para dirigirse al baño. Se sentía bien decir que estaba enamorada de Natsu y quien sabe, tal vez alguno de estos días incluso se lo podía decir a él mismo.

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