Capitulo VI:Atardecer parte II

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--Vámonos—

--No—

--Ya tardo demasiado...vámonos— ambos chicos se encontraban en la sala de espera del consultorio al que lo había arrastrado la chica, llevaban cerca de 30 minutos esperando el turno del ojiverde

--Natsu...-- escucho su nombre como reproche, en respuesta guardo silencio expresando la mayor inconformidad posible con su rostro, mientras cruzaba los brazos, la acción le pareció tan infantil a Lockser que no pudo evitar reír

--¿Qué es tan gracioso?— pregunto ligeramente molesto el Dragneel

--Nada—respondió aun riendo

--Habla, ¿de qué te ríes?—

--Vamos es tu turno—hablo la chica señalando la puerta abierta para que ambos pasaran, el chico hizo un gesto de disgusto bastante gracioso, dejo de parecerle así cuando noto que no se levantaba tenía la vista fija en aquella puerta y tomaba con tanta fuerza el borde de la silla que sus nudillos eran blancos, recordó que él le había dicho que prefería evitar los hospitales, acerco su mano lentamente hasta que la puso sobre la de él, haciendo que el chico la viera a la cara, ella sonrió de la manera más calmada que pudo para después susurrar un mudo "vamos" con los labios. Logro que él se levantara aun un nervioso.

--Puedo entrar contigo—el chico solo asintió. La revisión fue un tanto complicada por la negativa del chico e igualmente graciosa por las reprimendas que le daba Lockser.

--Respira profundo—

--¿Para que si ya saco las radiografías?—

--Para adelantar lo que saldrá en ellas—

--Natsu hazle caso al doctor—el chico hizo mala cara, pero al final hizo caso al médico, al intentarlo no pudo reprimir su gesto de dolor

--¿Te duele cada que respiras no?—el chico no respondió, desvió la mirada y Juvia se dio cuenta de lo que le haba estado ocultando el chico desde ayer

--¿Por qué no me dijiste? Siendo así hubiéramos venido desde ayer—hablo preocupada, pero Dragneel seguía sin responder

--Lo más probable sea que tengas una costilla rota, de ahí que no puedas respirar sin que te duela, pero solo las radiografías lo confirmaran, iré por ellas así que tardare un momento—menciono el anciano antes de salir

--¿Por qué no me habías dicho nada?—hablo Juvia después de que salió el medico

--Porque te ibas a poner así— Aunque la chica tenía la vista fija en él, Dragneel miraba el escritorio que tenía enfrente como si no hubiera nada más en la habitación

--¿Y que pretendías hacer? ¿Aguantar ese dolor hasta que ya no puedas?—no cayó en cuenta de que estaba alzando la voz, solo sabía que estaba muy preocupada por el chico y este no respondía nada, ni siquiera la miraba. Se preguntó qué hubiera pasado si no lograba convencerlo de venir a un médico, no quería ni imaginar las consecuencias de ello, no lograba comprender el porqué de la actitud del chico. --¿Está mal que me preocupe por ti?— la pregunta fue hecha en voz baja, pero logro que Natsu la mirara.

La vio con la mirada gacha y triste, sabía que era un idiota por hacerla sentir así cuando en realidad Juvia era la que siempre lo ayudaba, sabía que su actitud era estúpida e infantil, ¿pero que podía hacer si toda su vida fue callarse y aguantar?, nunca acostumbro a decirle a alguien si tal cosa le dolía, menos que lo curaran o lo llevaran a un médico. Cuando Juvia lo reprimió simplemente no supo que decir o hacer y ella había malinterpretado sus reacciones y aun sabiéndolo no supo que responder a su última pregunta.

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