—Entonces, ¿todo se encuentra en orden? —preguntó, visiblemente preocupada, la chica rubia de grandes rizos con impaciencia mientras observaba al doctor.
—Le aseguro que todo va correctamente en la pequeña Jocelyn, sólo ha sufrido un desmayo por falta de nutrientes. Siendo específicos, le falta vitamina C en su cuerpo, y azúcar —escribió algo con su letra inteligible en un pequeño bloc y arrancó rápidamente la hoja para después entregársela a la preocupada madre—. Estas son unas vitaminas que le proporcionarán la fuerza que necesita por ahora... Ah, y si no ve una notoria mejoría en la niña, o tiene alguna duda más, pase por consulta el próximo lunes.
La mayor, de ojos negros como la noche misma, asintió y cogió a la pequeña Jocelyn de apenas 4 años para comenzar a caminar con sus largos e inestables tacones de vuelta a su casa; un poco más aliviada, eso sí.
Pasaron horas, y, el doctor que había atendido a la madre desesperada y a la pequeña niña que se había desmayado, iba a dormir pero algo lo detuvo; sintió un ruido que, a su parecer, era ensordecedor y estridente, así que decidió bajar y comprobar si el ruido era debido a algún individuo indeseado o si solo era debido a alguna rama intentando romper los cristales de sus ya de por sí agrietadas ventanas.
—¿Hola? ¿Hay alguien ahí? —una pregunta estúpida sin duda, nadie respondería, estuviera o no dentro de aquella oscura casa.
Siguió caminando y optó por ir por uno de los largos y oscuros pasillos, con la única iluminación de una pequeña linterna de bolsillo. ¿Se me olvidó mencionar que había tormenta y que se fue la luz por ello? Ah, lo siento por el despiste. Ahora, posiblemente, he aclarado vuestra duda así que, sigamos. Pues, como decía, el doctor siguió avanzando por el estrecho y tenebroso pasillo hasta que llegó al final de éste. No había nada. Nada de nada.
—Entonces sólo fue mi imaginación —suspiró aliviado. ¿Tan rápido cantabas victoria? Si apenas habías buscado por toda tu inmensa mansión. ¿Que también olvidé mencionar que vivía en una mansión? Hoy ando despistada, lo siento mucho porque se me olvide la información tan primordial que no estaba dando.
—Será mejor que regrese a la cama de una vez... Mañana tengo un duro día por delante, tengo muchas citas médicas planeadas —se dio media vuelta y comenzó a andar, dispuesto a subir de nuevo sus interminables escaleras para poder regresar de nuevo a su habitación y poder recostarse en su cama.
—Señor doctor... —sonó la aguda voz de una pequeña niña detrás de él, causándole un escalofrío al mayor.
—¿Jocelyn? —reconoció al instante la voz de la pequeña de pelo azabache— ¿Qué haces aquí, en mi casa? —nervioso retrocedió unos pasos y, debido a ello, soltó la linterna que portaba en sus temblorosas manos, quedando así sin poder ver nada.
—A Jocelyn no le gustan los doctores mentirosos que sólo quieren que sea como el resto de esas "perfectas" y estúpidas niñas... ¡Jocelyn es diferente! —eso fue lo último que el especialista oyó antes de que sintiera un cuchillo encajarse en su pecho y cayera al suelo, mientras que de su nueva y reciente herida salía sangre sin cesar.
¿Te mereció la pena ganar un poco de dinero tratando a esa niña, sabiendo que ningún doctor más quería hacerlo?
Déjame decirte que... No has sido el único que cometió el error de intentar volver normal a Jocelyn, más gente lo intentó y fracasó en el intento.
Por algo la llaman: Jocelyn, la obsesionada psicópata.
¡Hola! Si llegaste hasta aquí... ¡Gracias por leer!
Esta es mi primera historia y quisiera que fuera especial.
Todos los derechos están reservados a mí. Es una historia 100% inventada.
Ojalá y disfrutéis leyendo esta historia tanto como yo lo haré escribiéndola.
Por cierto, la chica que está en multimedia es Jocelyn.
Gracias por leer ;)
ESTÁS LEYENDO
Jocelyn // Obsesión Psicópata
Mystery / Thriller"A Jocelyn no le gustan las mentiras". Jocelyn es una niña que apenas tiene 9 años, pero a esa edad sabe perfectamente cómo matar a una persona y hacer que parezca un suicidio; sin dejar pistas, huellas u otra cosa que pueda acabar incriminándola. ...