Harry Potter y la camara de los secretos (Rayita)

Capitulo 1

No había hablado con Harry en todo el verano. Me tenía tan preocupada el no saber nada de el. Cada semana le enviaba una carta pero no recibía respuestas. Hermione y Ron tampoco sabían nada de el, Ron me escribio que lo iría a buscar con Fred y George. Fue la última carta que recibí de el, en cambio Hermione me envío una carta comunicándome que el Domingo todos irían al Callejón Diagon.

—Abuela, ¿en dónde está Neville?—miré a los lados ya que no lo escuché en toda la casa.

—Ya está en el Callejón. Ahora ve que es tu turno.

Entré dentro de la chimenea y con voz fuerte y clara grité "CALLEJÓN DIAGON" En cinco segundos ya había llegado a mi destino. Busqué con la mirada para ver si podia encontrar a mis amigos y a lo lejos vi unas cuantas cabezas pelirrojas. Corrí hacía ellos lo más rápido que pude y George me vió. Ya que ví cómo me señalaba y de en medio de todos ellos aparecía Ron. Cuándo llegué a el me tiré en sus brazos para darle un fuerte abrazo.

—Me alegra verte otra vez, Ronald— le dije cuándo lo solté.—¿Dónde está Harry?

—Lo perdimos, tiene que estar cerca.

Fred y George caminaron a dónde mi y me saludaron.

—¿Nosotros crecimos o tu te pusistes más pequeña—Se burló de mi Fred.

—Déjame apenas estoy entrado a la adolescencia. Todavia me falta mucho por crecer.

—Harry —dijo el señor Weasley jadeando—. Esperábamos que sólo te hubieras pasado una chimenea. —Se frotó su calva brillante—. Molly está desesperada..., ahora viene.

Intenté hacerme paso entre los Weasley pero estaban todos pegados a Harry y no me dejaban pasar.

—¿Dónde has salido? —preguntó Ron.

—En el callejón Knockturn —respondió Harry con voz triste.

—¡Fenomenal! —exclamaron Fred y George a la vez.

—A nosotros nunca nos han dejado entrar —añadió Ron, con envidia.

—Y han hecho bien —gruñó Hagrid. Me hice paso por el lado de Fred y George y vi a Harry allí parado.

—Miren a quién tenemos aquí, al famoso Harry Potter—hablé cruzando los brazos.

—¡_________!—se acerco para darme un abrazo pero yo lo empujé.

—¿Crees que después de no escribir una sola carta en todo el verano todo está normal?—Lo volví a empujar. —¿Acaso crees que no me tenías preocupada?

Está vez lo iba a volver a empujar pero el me aguantó del brazo demasiado fuerte que me empezaba a hacer daño y me alejó de los Weasley.

—______, no fue mi intención. Es una larga historia pero yo pensaba que ustedes no me escribían y luego pasaron otras cosas. Pensé que ustedes no querían ser mis amigos por lo que pasó el semestre pasado.—

Sabia que no estaba mintiendo se notaba en su cara.

—Olvidalo, perdón por reaccionar asi—Me acerqué a el y le dí un abrazo.—Me alegra de que estes bien.

La señora Weasley apareció en aquel momento a todo correr, agitando el bolso con una mano y sujetando a Ginny con la otra.

—¡Ay, Harry... Ay, cielo... Podías haber salido en cualquier parte!

Respirando aún con dificultad, sacó del bolso un cepillo grande para la ropa y se puso a quitarle a Harry el hollín con el que no había podido Hagrid. El señor Weasley le cogió las gafas, les dio un golpecito con la varita mágica y se  las devolvió como nuevas.