Capítulo 2

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Unas semanas después...

Vale llega al set dónde aun trabajaba como asistente de Lucas, pero ahora era distinto. Ahora trabajaba como tu novia, entonces, nadie más extrañaba si los encontrase entre besos de una hora a otra. Son novios. Bueno, Salma aun no aceptaba, y Gabriel de aquella misma manera de siempre que aceptaba, pero al mismo tiempo no, por celos de Lucas y de su manera rápida de lograr tener todo que quiera...

Aquel día, algo pasaba con Vale. Llegó con un peso y no tenía ganas de hacer nada. Es raro, para alguien como ella que siempre estaba pendiente de todo, llegaba muy animada y feliz a trabajar. Hoy no. Se sentía indispuesta, cosa que jamás le pasó desde cuando empezó su trabajo. Estaba más intenso que en los otros días que empezaste a sentirse así.
Llegó temprano y la primera cosa que hizo fue sentarse en el sofa del camerino de Lucas. Cosa que jamás hacía antes de preparar su desayuno.

- Vale, Valeeee! - entra Jessica sin bater en la puerta y como siempre, ya atacando las comidas del frigobar del camerino, y muy animada. - ¿Qué pasa, Vale? - como amiga de Vale, luego le vio diferente.

- No se amiga. Me siento rara. Quite eso de aquí. Estoy... Bléh, que horror! - en el mismo momento Jessica se aleja.

- ¿Qué pasa? ¿Que sientes amiga?

- Ay, son cosas raras! Estoy indispuesta, con dolor de cabeza, mal estar, pero, pero yo creo que esto ya va pasar. - Vale de poco a poco se levanta del sofá.

- Hmm, amiga...

- ¿Que? - Vale comienza a arreglar todo del desayuno de Lucas, primero agarrando la cesta de frutas de las manos de Jessica, para que ella no acabe con todo, y cuando llegue Lucas, este todo listo y sin los dedos de tu amiga intrusa.

- ¿No quieres que yo te lleve a un medico?

- No amiga, no te preocupes. Tal vez sea solo un mal estar.

- ¿Está segura? No te parece bien, de verdad. Está sin color.

- No te preocupes. Creo que tengo que beber más agua. - Vale aprovecha y ya bebe agua de tu botella.

- Bueno, si tu dices. - Jessica se sienta y pone los pies en el sofá.

- Amiga, no ponga los pies ahí. Tú sabes que Lucas odia que desarreglan tu sofá antes que llegue.

- Ay, sí! Lucas es un pesado. Me olvidé. - Vale carcajea con el modo que hablo tu amiga.

- Tú no hablaba así antes de conocerlo en persona.

- Ay, es broma! Yo amo este bombónsito de Lucas.

- ¡Payasa! - carcajean juntas.

- Bueno, me voy a maquillar a Salma que creo que ya llego. Ella sí, es muy pesada!

- De eso no tengo duda. - carcajea.

- Nos vemos. Cuídate y cualquier cosa, llámame!

- Gracias amiga, te quiero!

- Muack.

Y así, salió Jessica. Bueno, Vale como una buena asistente, preparó todo del café de la mañana de Lucas, después volvió a sentirse mal. Muy mal. Un dolor de cabeza fuerte, un mal estar, un mareo. Se sentó un poco, levantó, se sentó nuevamente pero, tu mal estar no pasaba. Sentía un incómodo en tu panza. Algo inexplicable. Hasta que... No pude aguantar más y de una hora para otra sufrió un desmayo...

Lucas llega cantando. Tenía un buen humor. Habla con Gabriel que pasaba en el corredor y que se iba a tu opuesto, y él siempre le daba gracias a Dios con esto.

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