Debería correr pero me quedo quieta, hoy he decidido que todo va a estar al revés. Debería ir contigo, pararte y decirte que no te vayas nunca, que te quiero a mi lado y que eres perfecto. Debería decirte que no volveré a dañarme... Pero no lo hago. En su lugar veo una serie cualquiera centrándome plenamente en distraerme. Quiero llorar pero como hoy todo va a estar al revés me río como he hecho antes. Me quedo aquí sin pensar, sin correr, sin llorar, sin nada ni nadie... Porque yo ahora no soy nada ni nadie para mí.
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Creo que me gustaría ser más valiente y tal vez en otro momento me habría forzado a serlo. Desearía sin duda que todo fuese de otra forma pero no tengo fuerzas para que así sea y te he fallado. Ahora todo está patas arriba... Como si un huracán lo hubiese arrasado todo porque, en cierto modo, tu eres como un huracán para mí... Y yo sólo sé provocarte.
