Capitulo 19

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Deseaba que esta noche culminara, mis ojos exigían ver los rayos de sol asomándose por la ventana de la pequeña habitación en la que me encontraba, pero eso no iba a pasar... el tiempo sumaba y sumaba horas, llevábamos por lo menos 4 dias enteros en la oscuridad, la noche no tenía fin...

Cada año, desde el ultimo Yule, esto aumenta más, pero esta luna de mierda ha sido por lejos la peor. Mis pantalones están meados del miedo que tengo desde que nos evacuaron – dijo Lars mientras comíamos esa "tarde", los relojes marcaban las 2 en punto, pero afuera estaba tan oscuro como si fueran las 3 de la madrugada...

Si nos mantenemos unidos y encerrados, nada grave nos pasará, los militares ya deben estar haciendo su trabajo – desde el segundo día de oscuridad los militares habían evacuado y acordonado a la población en distintos puntos dentro de la ciudad. Los habitantes accedieron (o más bien fueron obligados) a compartir sus viviendas para el resguardo de la población. Nos encontrábamos en un hostal que olía a mierda y a sudor, pero aquí estabamos completamente protegidos o al menos eso nos decían. No teníamos permitidos salir de este lugar, gente lo había intentado, pero ya no se encuentran con nosotros para contar su experiencia...los mismísimos militares se encargaron de ellos.

Me encontraba exhausto, no había conciliado el sueño desde que esto comenzó... los sonidos emitidos por los golpes dados en la carne de aquella muchacha, sus gritos, la sangre brotando y su mirada suplicante irrumpían en mi cerebro con cada pestañar, cuando cerraba mis ojos intentando dormir todo se proyectaba en mis cansados parpados como una película, podía recordar con tanta exactitud los sonidos hasta el olor metálico del ambiente, dejado por la sangre que avanzaba como dragones carmesíes en el pavimento. Me levante de la cama en la que estaba, me sentía asqueado por lo que no pude seguir comiendo, busque una silla y me posicione delante de la única ventana de la habitación, no había nadie en las calles como era de esperar, me dedique a perderme en el gran tronco del roble que se lograba ver desde esa posición.

James – el enano me saco de mis pensamientos– he evitado preguntarte todo este tiempo por qué dejaste entrar a esa chica... pero ya no soporto la curiosidad, además el hecho de no poder hacer nada además de mirarnos las caras en este lugar no está ayudando mucho.

Yo... - no podía contarles lo que pasaba realmente, en este momento, ellos podrían decirme que son reptilianos y me lo creería sin si quiera pensar en que me están mintiendo, pero estos chicos... son parte de todo, ¿qué tan distorsionada esta su realidad de la mía? y ¿hasta qué punto son capaces de aceptar como realidad?... es tan gracioso, ahora apenas me ata un hilo de cordura, el pensar que a lo largo de mi vida he visto millones de películas y leído montones de libros retratando infiernos peores que este, en ellos el protagonista se adapta, ve morir gente, asesina a sagre fría y sobrevive, sin siquiera fruncir su seño por el repugnante olor a sangre que emanan los cuerpos mutilados y yo en ese entonces en mi interior, esa recóndita e ilusa esquina que piensa en la posibilidad de que esas historias de ciencia ficción, terror y demases se harán realidad un día, me creía capaz de ser ese guerrero que viaja al inframundo con tal de lograr lo que se propone, pero acá me encuentro, soy un manojo de carnes y nervios, temblando por una simple pregunta...pero aun peor, en mi mundo estaba en un ridículo dilema de amor...

Hey, estas sordo o qué? – Lars nuevamente me miraba a los ojos bastante molesto, era el momento, ahora o nunca...

Yo... no pertenezco a este mundo – dije, mientras miraba las hojas de un árbol agitarse violentamente al ritmo del viento, eran una suave melodía dentro de toda esta mierda. desvié la vista y miré los ojos de mis compañeros, se encontraban con miradas de incredulidad y miedo.

Eres uno de ellos, es por eso que las dejaste entrar...por eso defendías a la mierda esa a la que aquellos chicos le daban su merecido... llamare a los militares- decía Lars alarmado levantándose de la cama, su respiración estaba agitada y su cara tan pálida como la pared del hostal.

The outlaw torn (James Hetfield ♥) !!!CANCELADA!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora