¿Y Tú Calsetín (III)

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El asustado joven corría por su vida sin rumbo alguno y con un nudo en la garganta al pensar en lo que le aguardaba a aquel misterioso desconocido que lo salvo del horrible final que lo esperaba. Siguió corriendo hasta que se decidió a detenerse en una pared. Estaba mareado y sin saber muy bien lo que sucedía, aun escuchaba el rugir de aquella bestia. Por un lado quería ayudar pero aun estaba paralizado por el temor de toparse con esa cosa una vez más.

El joven estaba que no movía ni un musculo, se encontraba muy nervioso y desorientado, sus manos temblaban por el gran susto. Tembloroso reviso la hora, eran las 8:10 A.M a penas, esto lo sorprendió pues juraba que había pasado horas huyendo por su vida, supuso que era un sentimiento creado por la adrenalina y el temor, aun que tenía más temor que adrenalina.

Ángel, aun que lo intentara no podía deshacerse de la cara de esa cosa que lo atormentaba y al mismo tiempo no podía dejar de pensar en aquel extraño que salvo su vida, era uno de los muchos traumas que le aguardaban en su nueva vida. Por alguna razón su cuerpo no quería moverse, pero sabía que tenía que seguir, así que se decidió en ir hacia la carretera para así por fin poder llegar a su destino, la estación militar. El joven pensó en ir por la carretera para ver si alguien podía darle un aventón, aun que sabía que no habría tantas oportunidades, era lo mejor que tenia.

Dirigió su marcha hacia la carretera para proseguir con su camino, aun más sigiloso y con mucho más temor que antes de encontrarse con otra de esas cosas. Caminó mirando a todos lados como un fugitivo perseguido por la ley con un tic nervioso. Mientras caminaba pensó en su extraviado padre ¿Dónde estará? Se preguntaba intentando nuevamente no pensar en lo peor. Pero contrario a su intento pensaba en su vecina que fue masacrada por una bestia, esto lo hacía estremecerse completamente.

Caminó por un rato hasta que llegó a lo que era la carretera principal. Se alegro de no haberse topado con ninguna de esas bestias en su camino, pero como si fuera una broma de mal gusto, 2 bestias estaban paradas en la carretera. Estas miraban a todos lados sin rumbo alguno. Eran de esas que no tenían alas, tenían un solo cuerno y eran menos robustas que las que él había visto. Aun así causaban el mismo temor en él, sobretodo porque estas parecían a la que había destrozado horriblemente a la joven vecina del chico. El muchacho lógicamente decidió evadir a las bestias, alejándose un poco de la carretera y adentrándose a un pequeño vecindario en busca de evitar los problemas.

Mientras se adentraba en ese casi lujoso vecindario, se percató de que nunca había llegado a este lado de la ciudad lo cual era lógico tomando en cuenta su falta de interés en salir de su hogar.

Todo el vecindario parecía de personas muy bien económicamente hablando, aun que algunas casas estaban salpicadas o cubiertas de un liquido que no se lograba identificar, era como una especie de rojizo muy denso, ¿Salsa de tomate quizá? Lo dudo.

Llegó al final del vecindario y vio a lo lejos algo era como una persona siendo golpeada por otra.

¿Qué mierda es eso? Se preguntó en voz baja. Luego desaceleró el paso y se acerco minuciosamente. Tímido se atrevió a acercarse lo suficiente, pero obviamente aun a una distancia considerable, para saber que era un aparentemente hombre golpeando a una mujer, Ángel lo veía todo detrás de una pared.

¿Pero qué? Se quedo parado observando el hombre, el cual se veía un tanto asqueroso, golpeaba a la mujer de una manera torpe y descontrolada, la mujer intentaba no gritar por alguna razón, se esforzaba lo mas que podía pero se veía que estaba sufriendo. El hombre después de estar moliéndola a golpes, le agarro una pierna y se la empezó a halar en su intento de arrancarla de su cuerpo, la mujer forcejeaba y el hombre se veía como le dislocaba la pierna de la cintura hasta que al final logro arrancarla de una manera sobre humana. Ángel, se escondió detrás de la pared no quería ver más, estaba en un estado de shock.

La Guerra CelestialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora