El destino que nos volvió a juntar

Parte 1

Soy Maki Nishikino, realmente estoy muy nerviosa por hoy, desde que era niña tuve clases con profesores particulares en mi casa, mis padres al ser médicos reconocidos no tenían problemas para costearlo, pero a partir de los 10 tuve que ir a una escuela particular de bastante renombre, donde los hijos de niños ricos suelen asistir, odiaba ese lugar, era muy tímida por el hecho de que realmente casi no salía de la casa cuando era pequeña, apenas iba a comprar a una tienda cercana, y en ese colegio los niños eran muy invasivos, se la pasaban presumiendo de las pertenencias que le daban sus padres, estuve en ese lugar hasta el año pasado, en todo ese tiempo no hice ningún amigo, tampoco es como si hubiera querido ser amiga de alguien ahí, por eso y después de una discusión bastante fuerte que tuve con mis padres, logre que me cambiaran a otro lugar, mi madre decidió que me matricularía en la escuela en que ella asistía a mi edad, mi padre no se opuso, pese que era una escuela pública, después de todo era la escuela donde asistía mi mama y donde la conoció.

Vamos hija no tengas tantos nervios, tu misma dijiste que querías aires nuevos-conversaba mi madre conmigo mientras caminábamos hacia la estación de metro, normalmente me llevarían en auto ella o algún sirviente de la casa, pero le pedí que me dejara ir en metro para no llamar mucho la atención, después de todo no sé cómo serán las personas ahí- lo sé, pero realmente no conozco a nadie ahí, lo único que quiero es estudiar de manera normal- le respondí a mi madre, pero realmente ella tiene un punto, tengo 15 años por dios, no puedo seguir temblando como niña de 8- dime acaso prefieres volver a tu antigua escuela- ¡NI LOCA¡- le respondí gritando de manera muy exagerada, al punto en que se quedó riendo un buen rato- jajaja ay Maki nunca me cansare de ver tus reacciones- se burlaba de mi un poco, ni siquiera había notado que ya llegamos a la estación-bueno, al menos esto me sirvió para olvidarme de los nervios por un momento-le comente con un pequeño sonrojo por la vergüenza- bueno hija, no te preocupes tanto, le diré a una vi.....-acababa de llegar el metro por lo que no termino la oración- que te valla bien hija cuídate- se despedía de mi mientras subía a bordo-.

Ya en el tren estaba más calmada escuchando música, vi como se desocupo un asiento a la distancia por lo que fui a por el para poder sentarme, ya estando sentada mi vista se fijó en una tipa que se me hacía extrañamente familiar, llevaba el uniforme de la escuela, tenía un gorro morado y el pelo en 2 coletas, piel blanca y ojos de un color casi rubí, y por sobre todo, era muy baja, me pregunto si estará en primer año, no me di cuenta que la estaba viendo de manera extraña al punto en que llame la atención de ella, se me quedo mirando un rato hasta que pareció reconocerme, se acercó a mi de una manera amistosa y me pregunto- ¿tu eres la hija de los Nishikino?- ¿si por?- le respondí un poco nerviosa- Lo sabía¡ tú eres la niña que siempre venia a la tienda a comprar dulces y tomates- ahora la reconocí, cuando pasaba a comprar en la tienda ella siempre me recibía, pero como no la había visto hace un año no me acordaba-con razón te me hacías familiar tú eras la que me atendía siempre, pero no te vi en un año entero con lo que pensé que te habías mudado o algo- le respondí un tanto contenta- si bueno, cambie de trabajo por uno un poco más flexible, después de todo necesitaba tiempo para estudiar, pero dime, sigues teniendo esa extraña fascinación por los tomates?-me pregunto mientras se esforzaba por no reír- ¿q-que tiene de extraño?- nada realmente, solo quería molestarte un rato- lo decía con una sonrisa un tanto burlona, pero no me molestaba en realidad, parece que solo quería hacer un poco más ameno el ambiente, así que decidí vengarme un poco- pues recuerdo que no has cambiado nada, sigues tan bajita como la ultima vez que te vi- hug, esta vez ganas- con la cara que puso tuve que hacer un esfuerzo por no reírme- cambiando de tema, que te hiso venir a otonokizaka? Por lo que se eres rica, podrías estar en una escuela privada o algo- me pregunto de manera inocente pero no sabía como responderle- oh, b-bueno, es algo un poco complicado- me quedo mirando de forma preocupada, cuando parecía que iba a replicar el tren paro llegando a donde teníamos que bajar- oh parece que ya llegamos, nos veremos luego- oye espera, no me has dicho tu nombre- oh, creí que te lo había dicho perdón, soy Yazawa Nico pero dime solo Nico- me lo dijo con una seña un tanto rara con la mano encima de su cabeza, era algo raro pero se me hiso tierno de alguna manera- bien, soy Nishikino Maki, aunque eso creo que ya lo sabias- le respondí con una sonrisa cordial-bien te llamare Maki entonces- dijo eso y se despidió- oye no te di permiso para llamarme por mi nombre¡- le grite pero no me escucho- bueno debería ir también, se me va a ser tarde para la ceremonia de nuevo ingreso- con eso ya en mente, empecé a caminar rumbo a la escuela- parece que este año va a ser divertido.