Cuando Minho guardó su teléfono todavía estaba frunciendo el ceño ligeramente. Nunca había visto o escuchado a Kibum tan inseguro y dudoso. Sólo esperaba que escogiera la decisión correcta. La idea de que tuviera un compañero solo de sexo... era preocupante pero, Kibum no era un niño y sabía cómo cuidarse. Minho estaba preocupado por su amigo, por supuesto, pero no podía hacer nada más que a estar a su lado.
Cuando su teléfono sonó por segunda vez en la mañana y miró la pantalla su rostro se dibujó enorme sonrisa. Su novio perfecto lo estaba llamando. Novio. Todavía se sentía un poco raro llamar a alguien así, pero no le importaba. Taemin era lo mejor que le ha pasado en su vida. Antes, él no creía que fuera capaz de caer por alguien. Amaba cómo sonreía el más joven, cómo su pelo rebotaba con cada movimiento, haciendo que se vea adorable. Le encantaba la forma en que sus labios gruesos sobresalían si él no estaba de acuerdo con algo, o cómo hinchaba sus mejillas con un hermoso rubor cuando Minho lo felicitaba. Había otras cosas, también. A Minho le encantaba cómo se sentía la piel de Taemin bajo sus dedos, le encantaba la piel tan suave y pálida. Amaba todo y muchas veces se encontró anhelando cosas que no debía. Podría, sí, porque el menor era su novio y no era demasiado joven, pero se veía tan... puro, tan inocente. Había momentos en los que deseaba tocarlo más, sentirlo, tal vez incluso inmovilizarlo contra una pared. A veces, era difícil de contenerse. Sobre todo en los momentos en que se besaban apasionadamente. Taemin no ayudaba. Quería a Minho, también. Podía verlo cada vez que se alejaban. Minho no era una persona que necesitaba sexo todo el tiempo, así que, no le importaba la falta de esta actividad en su relación.
Una vez que dejó de soñar despierto con el menor respondió la llamada.
"Hey, Minnie. Estoy a punto de ir a recogerte" Dijo con una sonrisa.
"Uf, hyung, olvidé decirte... No iré a clases. Tengo que ir al hospital"
"¿Qué? ¿Qué pasa?"
Taemin rió y Minho podría jurar que estaba sacudiendo la cabeza. "No es nada. Sólo un simple chequeo. Y mi autobús sale dentro de media hora, así que decidí llamarte. Y gracias a Dios que lo hice. Hubieras venido por nada"
Minho no era el tipo de persona que hacía pucheros, pero en este momento su labio inferior sobresalía. "¿Quieres que vaya contigo?" Esas palabras salieron de sus labios antes de que pudiera detenerse y le preocupó que estuviera siendo demasiado pegajoso.
"¿Estás seguro...? ¿Y tus clases?" Se escuchó la voz suave de Taemin.
Minho se mordió los labios para evitar que el gemido saliera. Por supuesto, las clases. Pero realmente quería ir con el menor. Tomó aire antes de hablar. "Puedo saltarme hoy. Conozco a alguien que me puede excusar o simplemente voy a decirle a mi madre que no me siento bien. Pero... sólo si quieres que vaya"
"No quiero que te metas en problemas por mí, Minho..." Taemin dijo humilde y Minho suspiró pero antes de que pudiera hablar, Taemin continuó ahora con voz alegre. "¡Pero sería genial si fueras conmigo! Yo... realmente no quiero ir solo, pero Onew hyung está ocupado en este momento y no quería molestarlo con mis quejas"
Minho rió suavemente por las palabras de su novio y asintió. "¡Entonces está decidido! Espérame en casa, voy allí ahora mismo"
"Está bien ~ te amo. Y ten cuidado en el camino" Dijo en voz linda.
Una vez que Minho respondió 'Te amo, también' colgó e inmediatamente tomó sus cosas, luego conduciendo a la casa de Taemin. No tardó mucho en llegar, los muchachos vivían cerca uno del otro cuando conducían en coche. Deteniéndose frente a la casa, Minho sacó su teléfono y cuando estaba a punto de llamar a Taemin dicho joven salió, cerró la puerta y casi corrió hacia el coche, sentándose en el interior.
"Hola" Dijo con una sonrisa y se inclinó para besar los labios de Minho.
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TE DESFLORÉ - JONGKEY
FanficDespués de que Key se graduara con éxito y se mudó a su propio apartamento, decidió celebrar en un bar. Una copa, dos copas, tres... tres más - eso es todo lo que necesita para obtener su mente confusa. Esa fue la razón por la que no se negó a una b...