❝Amores Lejanos❞ ❀SeungChuchu❀

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Capítulo Tres: "¿Aceptarás que te caigo bien?"

Un nuevo día había llegado, y con ello un hermoso amanecer en las calles pintorescas de Corea.

Era temprano, y quizás muchos estuvieran durmiendo aún, pero para cierto tailandés ya era muy tarde para ir a su salida de paseo. Se terminó de arreglar con una velocidad digna de admirar, y justo cuando acabó, recibió un mensaje de quien tanto estaba esperando.

-¿Ya estás listo? Te estoy esperando afuera. Apurate.

Agarró un pequeño bolso donde llevaba lo necesario: dinero, un suéter y lo que jamás le podía faltar en toda la vida, su celular. Ese era su compañero fiel en todo momento, además de que la cámara tenía bastante resolución, lo cual ponía feliz al joven.

También notó que sus amigos seguían super dormidos. Quizás el viaje fue muy cansado para el trío, por lo que les dejó una nota diciendo que volvería más tarde, y que si querían salir no dudaran en hacerlo, sólo que le mandaran un mensaje avisándole y esas cosas.

Bajó por el elevador, llegando a la planta baja topándose con un coreano de cara seria que transmitía algo así como "mirame más y estarás muerto". A veces le daba miedo el imaginarse como era cuando despertaba por las mañanas.

-Disculpa, ¿tú eres Lee SeungGil?...- preguntó con el nerviosismo a flote. Obvio que era él, pero quería corroborarlo antes de cometer una tontería.

-¿Phichit?.- respondió su pregunta con otra.

-¡Sí! Ese soy yo.- estiró su mano para saludarlo.

-Un placer conocerte.- dijo con total desinterés en la presentación.

-Bueno, y ya que estamos aquí, ¿cuál es el plan? ¿Iremos a visitar los lugares que se encuentres más cercanos o-

-Primero iremos a desayunar, que aún es muy temprano y no he comido nada.- Phichit lo siguió. Irían a un buen restaurante donde servían muy buena comida, y de los desayunos ni hablar.

Supongamos que hubo un silencio incómodo en todo momento, dije supongamos porque el tailandés trató en todo momento hacer el ambiente más ameno, sacándole de vez en cuando una pequeña risa al coreano cara de pocos amigos.

-¿Cuál es nuestro destino ahora? ¡Por cierto, te nombraré mi guía oficial para toda mi estadía en Corea!- SeungGil bufó. Continuó caminando mientras pensaba.

-¿Has escuchado de la isla Jeju?

-¡Sí! Dicen que es un gran sitio turístico para ir, además que es el lugar donde muchos enamorados se conocen.- el suspiro que dio Chulanot fue igual al que da una colegiala enamorada.

-Pues iremos ahí en otra ocasión. Tomaremos un tren a Seoul.

-¿Qué no estamos en Seoul ahora?- Lee se detuvo en seco, dándose mil golpes mentales por lo despistado que fue, pero no lo culparía, el chico que lo acompañaba lo ponía sumamente nervioso.

¿Así se sentía tener un amigo de verdad?

No es que fuera un completo antisocial, claro que no. Simplemente el hacer nuevas amistades no se le daba. Así fue desde que estaba en la primaria.