Me escabullí rápidamente por los pasillos de la gran escuela en dirección hacia la biblioteca, nadie debía verme.
Llegue a la biblioteca y comprobé que nadie me viera entrar, efectivamente como me dijo Javier, la puerta estaba abierta, entre y no vi a nadie pidiendo libros o estudiando, ni siquiera estaba la bibliotecaria.
Avance por el pasillo hasta llegar a las grandes estanderias llenas de libros, corrí para alcanzar la estanderia numero 10 y lo vi. Estaba despalda con una capucha que no dejaba ver bien quien era, pero yo si lo sabia.
Avance lentamente por su espalda hasta darle un empujón
-buh- lo asuste, haciendo que casi se fuera de bruces a delante, tape mi boca para poder soltar una carcajada.
-¡Por dios Diana, tu y tu manía de asustarme siempre!- dijo acomodándose la capucha para luego tomar mi mano y arrastrarme hasta la ultima estanderia, en donde siempre nos encontrábamos.
-¿Estas seguro de que nadie te vio entrar?- dije antes de que el me empujara hacia la pared y atacara mi boca con ardientes besos.
-Seguro preciosa, no te preocupes, ya me asegure de que nadie va a entrar.-dijo volviendo a besarme con tanta intensidad. Decidí no preocuparme más y disfrutar del momento que me daba Javier, uno de los pocos momentos que podemos estar juntos.
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Si te hubiese encontrado antes.
No FicciónNuestro amor era puro, inocente. No ofendiamos a nadie, por eso ¿tan malo era que dos personas se amaran?. Todos hiceron lo imposible para separamos y lo lograron. *HISTORIA CORTA. *NO SE PERMITE NINGÚN TIPO DE ADAPTACIÓN, DE HABERLA SERÁ SANCIONA...
