Capítulo 4

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-El cuartel neblina es un lugar donde nos preparamos por sí mismos a combatir contra las malditas criaturas que han invadido el mundo desde hace años. -Zack me explicaba con discreción mientras caminábamos hacia el edificio.

Yo no sabía de qué me hablaba, pero prestaba mucha atención a lo que decía. ¿Iba a combatirlos?

-Pocos saben sobre esto, sólo los necesarios. No puedes decir absolutamente nada.

-¿Porqué?

-Porque si averiguan que tenemos un cuartel, va a ser... horrible. -sus ojos fríos me miraron.- Te estaremos entrenando de todos modos, será discreto. Yo me encargaré de eso.

-¿Qué pasa si digo algo? -me atreví a preguntar.

Inmediatamente él se giró mirándome muy feo, acercó su cara a la mía.

-Te mato.

***

Aquella noche antes de dormir, mi mente no paraba de darle vueltas al asunto. Ni siquiera sabía porqué carajos estaba aquí, ¿Qué había invadido la tierra? Urgentemente necesitaba saberlo. Y otra cosa, ¿Porqué Zack me había metido al cuartel neblina? Odio su comportamiento. Primero es muy seco conmigo, después dice que soy un primor y vuelve a su estado neutral. ¡Dios no lo entiendo! ¿Qué hay de Sophia? ¿Y del chico del casco negro? ¿Ellos dos estarían también en el cuartel? ¿Porqué había un cuartel? Zack me advirtió que no dijera nada, ¿Y si sólo quería matarme? No, no. Eso es ilógico.

Doy un giro en la cama para acomodarme y alcanzo a ver el reloj del escritorio, son ya pasadas la media noche.

Mañana tendré que resolver todas mis dudas, o al menos unas cuantas. Si Zack tiene un plan bajo la manga entonces debo estar precavida, saber defenderme.

Will podría ayudarme, sé que el conoce aquí. Pero, ¿Porqué sabe tanto? ¿Sam sería igual? ¿Y Frankie? Los llamo mis amigos y aún no sé ni sus nombres completos.

Un escalofrío recorre mi cuerpo, pongo mis manos en mi cabeza y miro al techo, si sigo así, me volveré loca.
Cierro los ojos lentamente y siento que mi cabeza da vueltas, poco a poco me quedo dormida.

La alarma suena marcando que son las 5:00 AM. Suelto un pequeño brinco al escuchar el ruido y me apoyo sobre mis codos. Los demás siguen durmiendo.

Resoplo y me acuesto otra vez. No he dormido bien. Necesito saber defenderme, mi instinto lo exige.

Me levanto tratando de no hacer ruido y me meto a la ducha. Dejo que todas mis preocupaciones se vayan junto con el agua y me relajo. Todo estará bien.
Salgo del baño y me enredo una toalla al cuerpo, me cepillo los dientes y me coloco la ropa interior limpia que he traído.
Por la ventana del baño alcanzo a ver que el día está nublado, resoplo y me cepillo el cabello. Espero que este día aprenda al menos un poco de lo que me he propuesto.

Unos golpes en la puerta de madera hacen que pegue un pequeño saltito.

-¿Si? -contesto.

-Ah, ehh -Sam balbucea- Sólo queríamos asegurarnos de que estabas allí adentro.

Frunzo el ceño y me pongo la blusa.

-¿Asegurarnos? -pregunto.

Mientras Sam me responde me pongo rápidamente el pantalón militar.

Sweet CreatureDonde viven las historias. Descúbrelo ahora