Estaba acostado en mi cama viendo el techo pensado en nada, simplemente lo contemplaba. Era domingo en la mañana, después de lo sucedido con Namjoon me regresé a la ciudad queriendo estar solo y tratar de comprender si la decisión que había tomado era la mejor. A veces quería tomar mi celular y llamarlo, pero sabía que me pondría a llorar y no quería que me escuchara más débil de lo que me vi el día de la boda. Mis padres llamaron a la casa la noche anterior para saber qué había ocurrido, sin ganas de explicarles solamente envié un mensaje a mi papá diciendo "Estoy en casa, no te preocupes.", después me contestó "Te amo, hijo. Cuando quieras hablar puedes llamarme".
Salí de mi cama queriendo ir a la cocina por algo de beber sin embargo mis pies me condujeron a la sala. Ahí había un montón de fotos, regalos, cartas y demás que Namjoon me había dado cuando estábamos juntos, toqué cada cosa mientras recordaba cada momento, rendido me fui a sentar al sillón aguantando las ganas de llorar. De repente escuché a alguien tocar la puerta y gritar mi nombre.
—¡Jin! ¡Seokjin! —. Sabiendo perfectamente quién es fui a abrirle, al momento de verme dejó salir una expresión de sorpresa para después darme un beso en la frente y cerrar la puerta. —Se ve que estuvo buena la fiesta, tu cara de cruda te delata. No te preocupes por eso ahorita te preparo un jugo, te vas a sentir como nuevo —. Fui al baño para observar mi cara y se veía realmente mal. Tenía ojeras, mis ojos rojos por no haber dormido nada y mi maquillaje corrido. Cualquiera pensaría que me la pasé genial ayer.
—Hyung, ven y platícame cómo te fue —. Aunque no me viera yo asentí para irme a sentar en la pequeña mesa de la cocina. —Buenos días, Yoongichi —. Lo saludé para regalarle una sonrisa, él solo me mostró su mano agitándose. Empezó a contarme sobre un juicio al que fue ayer, no tenía ganas de escucharlo y simplemente lo ignoré. Veía como se movía de un lado a otro cuando de la nada empecé a llorar, sentí lágrimas por mi rostro.
—Rompí con Namjoon —. Susurré para mí mismo creyendo que Yoongi me escucharía. —Rompí con Namjoon —. Dije un poco fuerte pero él seguía hablando. Queriendo dejar salir mi frustración le grité —¡Rompí con Namjoon, Min! Rompí con él... —. Lo último lo dije en voz baja para después sacar un sollozo. Yoongi volteó a verme confundido. —¿Qué dijiste? —.
—Yo rompí con él ayer en la fiesta. Estábamos peleando y Namjoon sacó una sortija para pedirme la mano pero lo rechacé. Salí corriendo para después regresar. Quizás estuvo mal lo que hice pero yo no estaba listo, quizás no estaba pensado en lo hacía, quizás tuve miedo. Nieves, no sé qué hacer. ¿Crees que si lo llame y hable con él me perdone? Puede que tenga tiempo para decirle que sí. Lo voy a llamar, sí eso haré —. Busqué por la cocina el teléfono, al encontrarlo me levanté para ir por el cuando el brazo de Yoon me obligó a sentarme otra vez. —¿Acaso estás loco, Jin? Tú siempre has sido el que trata de arreglar las cosas, deja que él solucione el problema que causó desde un principio —. Tomó mi cara para limpiar mis lágrimas y asegurarse que estuviera un poco tranquilo. —Además, el que ama más pide perdón primero. Es tiempo para que él se disculpe por sus errores —.
—Yo, como el mejor amigo que tienes, creo que fue la mejor decisión. Aunque no lo aceptes a la primera tú estabas cansado de estar con él, pero tú seguías con él por capricho de tu madre sin tener en cuenta tus sentimientos. Eres el mejor de todos, te va de puta madre, estudiaste letras a pesar de que todos te dijeron que esa era la peor carrera. En ese momento no te importó su opinión, ahora deberías hacer lo mismo con tu mamá —. Lo escuché claramente sabiendo que tenía razón, sabía que no dejaba ir a Namjoon por culpa de mi familia pero no quería decepcionarlos más. El único que siempre estuvo conmigo fue Yoongi, como en este momento. Estaba abrazado a él mientras lágrimas volvían a salir, él me sostenía de la cintura susurrándome al oído "Ya no llores".
—¿Te acuerdas de la promesa que hiciste cuando empezaste a trabajar? —. Me pregunto cuando dejó de abrazarme para mirarme fijamente. Reí por esa tonta promesa de hace años. —Sí, que me iría a vivir a la playa para... escribir libros —. Respondí con un pequeño sonrojo. Cuando empecé a trabajar, me prometí que ahorraría mucho dinero para cumplir mi sueño y no tener más responsabilidades. —Cuando llegue el momento lo harás, por lo mientras hay una persona que te puede hacer muy feliz y está más cerca de lo que crees. Así que cuando vayas a la playa procura que sea el último escalón para tu felicidad —. Se levantó mientras agarraba mi bicicleta junto con el casco para salir de la casa. —Ven, hyung. Necesitas un respiro —.
Llegamos a un pequeño bosque donde empezamos a recorrerlo juntos. Hablábamos de cosas triviales llegando a un punto de olvidarme de mis problemas. Pasando las horas me cansé y me subí a la parte de atrás de la bicicleta de Yoon, no tuvo problema para llevarme. Pasamos cerca de un lago donde sentí una inmensa tranquilidad que no sentía en meses. La brisa se estrellaba contra mi rostro, el ruido del aire meciendo las hojas, sentía que volaba por lo que abrí mis brazos y cerré los ojos.
—Deseo ser feliz —. Solté al aire pidiendo que este momento nunca se acabara.
Holu~ Me he dicho que debo actualizar cada mes, espero cumplir con eso. 0': ¡POR FIN APARECIÓ YOONGI! El Yoonjin es mi ship favorita, son hermosos juntos. ♡♡♡
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Como el Namjin murió en el capítulo anterior vengo a hacerles un pequeño spam, la otra dueña de la cuenta, nemar, ha empezado a escribir un nuevo fic de ellos. Se llama "Albores de ceniza", denle mucho amor que tiene una trama muy buena. Igual hemos empezado a escribir one-shots así que pueden pasarse por nuestro perfil.
Gracias por haber llegado hasta aquí y apoyar esta historia. ☻♡
