Plaza de España, Sábado. 02:00
Cojo el móvil de la mochila y comienzo a acercarme a Loren para hacerle unas fotos en el césped cuando, de repente, siento unos brazos agarrándome de la cintura. Me giro y enfadado le pregunto: "¿Qué haces?"
Cole me mira atento y comienza a reírse infantilmente y yo, con rencor y humor al mismo tiempo, le observo atentamente. Cuando quiero darme cuenta, vuelve a acercarse a mí y me abraza de nuevo, esta vez agarrándome del culo e intentando darme un beso en la mejilla. Me aparto bruscamente riendo y vuelvo a caminar en dirección a Loren.
- Eres mío.- grita Cole borracho. Me giro y le enseño el dedo del medio esperando, de alguna manera, que volviese corriendo hacia mi, cosa que no hizo.
Justo entonces, de lejos, veo a Jaime tumbado e inmóvil y, preocupado, decido ir a ver que le pasa, olvidándome por completo de Loren.
- ¿Qué pasa, tío?- le digo mientras me siento en el suelo, a unos centímetros de él. Jaime rápidamente se tapa la cara y comienza a frotarse los ojos. Frunzo el ceño y espero a que hable, hasta que después de unos segundos en silencio me dice:
- He bebido demasiado y he cometido un grave error.
No me da tiempo preguntarle sobre el que habla porque comienza a correr hacia el puente para sentarse en la barandilla, dejando sus pies colgando. Preocupado, me levanto y me acerco a Loren.
- Loren, Jaime está muy mal, creo que lo mejor será que lo llevemos a casa.- le digo señalándole a Jaime de lejos. Loren comienza a reírse y a decirme que se está divirtiendo y que es muy pronto para irse, por lo que decido ir a hablar con Romina, que es la única que puede convencer a Loren de irnos.
Cuando giro mi cabeza, veo a Jaime tirándose del puente. El mundo se me cae encima y me quedo inmóvil. Loren, que está al lado mío, comienza a gritar, corriendo hacia Jaime. La vista se me nubla, pero logro ver que Romina está llamando a la ambulancia.
Tres meses antes.
Loren y yo habíamos quedado con Jaime en la terraza, un lugar que no es una terraza pero que tenía ese nombre por el parecido y entorno. Ya ahí, vemos a Jaime sentado en el "banco" de la terraza que, en verdad, era una piedra larga y grande donde se estaba bastante bien. Loren baja las escaleras corriendo y le da dos besos. Yo le sonrio y me siento al lado de él.
Ya sentados, Loren y yo miramos a Jaime con intriga. Hacía tiempo que no quedábamos con el y el motivo principal de esta quedada era que tenía que contarnos algo muy importante.
- Estoy enamorado.- dice Jaime sin pensarlo.
Actualmente
Lunes 8:00
Me despierto pensando que el fin de semana fue un sueño pero, nada más lejos de la realidad, lo que ocurrido el sábado comienza a rondarme la cabeza de nuevo. Las imágenes de lo sucedido comienzan a repetirse sin pausa en mi cabeza y un sentimiento de culpa vuelve a nacer en mi interior.
Necesitaba hablar con alguien, necesitaba olvidarme de todo lo sucedido, necesitaba asimilarlo todo más rápido, necesitaba un porro. Aún sabiendo que no teníamos ni Patricia ni yo hachís, decido saltarme las clases y quedar con ella en el parque.- ¿Cómo te encuentras?- me pregunta cuando ya llevábamos un buen rato sentados en el césped del parque mirando el cielo.
- No estoy seguro.- le respondo.
- Impactante. ¿Tienes alguna idea del por qué lo hizo?- me pregunta Patricia. Se me hace un nudo en la garganta, no se que contestar. Simplemente no sé si es por el motivo que yo pienso, si es por mi culpa o por cualquier otra cosa que no nos dimos cuenta antes. Es tan frustrante no saber, no haber podido ayudar o solo no darse cuenta de las cosas.
Decido no contestar y Patricia nota el incómodo entorno que hay por lo que decide cambiar de tema, pero no es tan fácil.Las horas van pasando y, cuando queremos darnos cuenta, ya son las once, por lo que Patricia y yo decidimos aprovechar la hora del recreo para entrar al instituto. Nada más llegar, en la entrada, vemos a Romina llorando y a Miguel consolándola.
- ¿Qué te pasa?- le pregunto con ligera inquietud.
-Es por lo de Jaime.- responde Miguel ante la incapacidad de hablar de Romina.
Me siento al lado de Romina y comienzo ha acariciarle la espalda lentamente, mirando alrededor. Todos nos quedamos en silencio, intentando asimilar todo lo sucedido. Se respira un aire incómodo y extraño desde el sábado. La gente, al pasar al lado nuestro, nos miran con tristeza y confusión. Todos los profesores y compañeros que se enteraron de lo sucedido, se habían encargado de contarlo por cada rincón del instituto. Todo era tan...puta mierda. Al sonar la campana, Miguel y Romina deciden quedarse un rato más fuera y, Patricia y yo, decidimos ir a clases. Miro a Romima por última vez y me despido de Miguel.
No me da tiempo entrar a clase porque siento que alguien me coge del brazo y me mete en el baño de chicos, cerrando la puerta. Frunzo el ceño y decido mantener el control al ver a Cole sacando un porro de su mochila medio vacía.
- Como nos pillen con esto...- le digo, y al instante comienzo a buscar mi mechero.
- No te preocupes.- me dice sonriendo.
Agarro el porro decidido a encenderlo y darle el primer calo, pero Cole al instante me lo quita.
- No te impacientes...- dice levantándose del suelo del baño y entrando en uno de los cubículos para subirse en uno de los inodoros y abrir la pequeña ventana. Ya abierta, se baja dando un salto y coge el mechero de mis manos.
Comenzamos a pasarnos el porro y a darle grandes caladas y ahí noto como mi cuerpo comienza a pesarme, como todas mis preocupaciones comienzan a desaparecer y como me voy acercando a Cole, dejando a la imaginación lo que podría suceder.
Martes 14:10
Suena la campana y todo el mundo, el primero yo, comienza a levantarse con rapidez para salir de clase. Miro hacia atrás para ver si Romina o Loren me siguen el paso; pero, entre la gente que está saliendo, logro ver que siguen sentadas y Romina escribiendo. Resoplo y vuelvo a clase para meterles prisa.
- Chica, échale ganas y mete el puto estuche más rápido.- le digo a Romina cuando veo que ya no hay absolutamente nadie, a excepción del profesor, en la clase. Romina me enseña el dedo y yo pongo los ojos en blanco, girándome hacia Loren. De repente, comienza a sonar un móvil. Loren aparta la vista de Romina y coge el móvil de su culo. Logro ver que pone Pelayo antes de que conteste.
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Drugs
RandomDrugs es un drama que sigue las vivencias de un grupo de jóvenes en Madrid, en el centro de España. Explora una variedad de contenido como por ejemplo el uso de drogas y alcohol, la homofobia, depresión...