La Familia Alfa ーCoupZi

Cuatro: Una Subasta y Muchos Alfas.

SeungKwan se lanzó a sus brazos al verlo apenas entrar al aula, lloriqueando que había estado mucho tiempo ausente.

—¡Eres un mal ami...! —se detuvo de manera brusca al olisquear a su amigo rosado— tu aroma, hyung. —se tapó la nariz fingiendo malestar— Eres el omega con el olor más escandaloso que he olfateado nunca.

—Lo sé, tuve que soportar las miradas de todo el mundo aquí, estoy en la mira de todos. —bufo.

SeungKwan hizo una mueca.

—Pero al menos ya te presentaste, hyung ¿era lo que querías no? —preguntó de manera inocente siguiendo a JiHoon hasta su asiento.

—No, lo que quería era ser un alfa como mis hermanos, pero al parecer soy un omega, y no tengo problema con ello. —se encogió de hombros desinteresado— Ahora solo tengo que a acostumbrarme a la idea que tendré que ser un dominado para toda la vida. —está vez gruño con molestia, haciéndolo ver como un adorable gatito.

—Fue el que te hayas teñido de rosa, eso fue tan gay de tu parte. —se burló el rubio sin usar ningún honorífico para molestar al pelirosa.

—Creo lo mismo, y está vez el rosa es más intenso que el de la última vez. —ignoró el que su rubio amigo no le haya hablado con respeto, escuchó la risa de su amigo.

—Estabas mejor rubio, hyung. —presumió moviendo una cabellera larga inexistente.

—No quería formar parte de tu ejército barbie. —dijo burlón.

—No sé si tomarlo como un insulto o un cumplido. —habló más para si mismo que para el chico de cabello rosa haciéndolo reír por lo adorable que podía ser Seungkwan.

Cuando la clase comenzó JiHoon ignoró a SeungKwan por completo aunque éste se aferraba a picotear su hombro o espalda para llamar su atención y chismear con él.

Después de largas horas de clase al fin la tan esperada campana para ir a comer sonó haciendo salir a una manada de estudiantes hambrientos y exhaustos de ver las caras largas de sus profesores.

SeungKwan no le dejó solo ningún momento, cosa que agradeció mucho por las acosadoras miradas de los alumnos —en su mayoría hombres— y una que otra chica que le decía que era el omega más adorable que nunca había visto.

JiHoon gruñía por esos comentarios pero los dejaba pasar.

[d⃟o⃟s⃟ m⃟e⃟s⃟e⃟s⃟ d⃟e⃟s⃟p⃟u⃟és⃟]

—¿Quién propuso esa idea? ¿Y por qué? —JiHoon frunció el ceño ofendido por la propuesta de ser vendido prácticamente a un desconocido.

—Son para los clubes, el dinero recaudado lo usamos para lo que se necesita en ellos y este es el único evento organizado por los líderes de los clubes, los festivales y eso son a beneficio de la escuela —explicó SeungKwan con una sonrisa— y tú, nos vas ayudar porque soy tu dongsaeng favorito ¿cierto?

Su rubio amigo era parte del comite de estudiantes, cabe decir que era mano derecha del presidente; Yoon JeongHan. Un bonito chico —aún no se presentaba pero muchos especulaban saber que era omega— que iba en último año.

—SeungKwan, me he pasado tres meses cuidando de los alfas estúpidos y soportando mi casillero lleno de regalos y cartas para que tú vengas y solo me pidas esto para venderme por cinco dólares a un desconocido. —su voz estaba llena de indignación.

SeungKwan callo un momento.

—¿Sí? —terminó por decir con una sonrisa temerosa.

—Eres un maldito Boo SeungKwan, pero bien, no puedo contra ti. —soltó un suspiro.

🐺

El pelinegro escribía su nombre en la hoja para después dedicarle una sonrisa a la chica que esperaba paciente a que terminará.

—Muchas gracias por apuntarte. —agradeció la chica castaña mientras tomaba la hoja y pluma de las manos del pelinegro.

—Todo por el club de basquetball.

SeungCheol observó a la chica irse hasta que unos brazos atraparon su cuello de forma brusca pero amigable.

—¡Hyung, te estamos buscando desde hace un rato! —reprochó al chico pelinegro.

Al reconocer la voz del chico moreno volteo a verle.

—Estaba ocupado —guardó silencio recordando a la chica que pidió que si podía encontrar más chicos los anotara— MinGyu, ¿has escuchado de la subasta para ayudar a los clubes?

MinGyu ladeó su rostro tal cuál cachorro por no entenderlo.

🐺

El día y la hora de la subasta llegaron y JiHoon estaba muerto de miedo pensando que tipo de chico lo "compraría" odiaba a SeungKwan, enserio lo detestaba. Estaba comenzando a arrepentirse cuando llegó a la sala dónde hacían los anuncios importantes de la escuela, algo parecido a un pequeño auditorio.

Sus manos sudaban mientras escuchaba a SeungKwan —que era el presentador— mencionar los nombres de los chicos y chicas participando. Tenía los ojos vendados y esperaba con expresión tranquila a que lo llamara, estaba en el escenario atrapado entre un montón de gente que hablaba por lo bajo y cotilleaba sobre lo que sucedía. JiHoon podía escuchar a las chicas hablar emocionadas esperando a conseguir a un guapo chico como cita.

Pero JiHoon dejo de prestar atención a las chicas deseosas de un buen partido por el fuerte aroma que llego hasta su nariz.

JiHoon olfateo el aire por unos segundos embriagado por un aroma a pinos que le atraía bastante.

Un alfa.

El aroma venía de un alfa.

Sus piernas comenzaron a moverse por si solas empujando a unas cuantas personas quiénes no le tomaron mucha importancia, no podía ni quería detenerse hasta llegar al aroma. Su lobo comenzó agitarse ante el aroma, saltando de alegría por alguna razón que JiHoon desconocía. Aún era nuevo en esto de mantener controlado a su lobo interior pero estaba resultándole difícil tomar las riendas del animal esta vez.

SeungCheol al otro lado del escenario frunció el ceño bajo la tela, había un dulce aroma a frutas frescas y recién cortadas, olía a fresas, sus favoritas. Era una mezcla de bastantes frutas, se estaba deleitando por el aroma que le llamaba. Comenzó a caminar a tientas tropezando con los demás chicos que esperaban a ser escogidos, la persona que olía tan bien estaba cerca por lo que supuso que también era parte de los que estaban "en venta".

Sus caminos estaban por entrelazarse hasta que el chico a cargo de la subasta gritó: —Vendido al simpático muchacho de por allá, felicidades por su cita con el hermoso Lee JiHoon.

Y los ojos de JiHoon fueron descubiertos quién de inmediato buscó el aroma a pinos pero ya no lo percibía entre el abucheo de aromas por el enfado de los chicos tanto alfas como betas por no conseguir su cita con el bajito.

JiHoon parpadeo un par de veces adaptándose a la luz que le enfocaba, SeungKwan aplaudía un poco antes de hacerlo bajar por los cortos escalones de la izquierda, ahí le esperaba un chico de cabellos rubios.

—Hola JiHoon, soy SoonYoung. —habló el chico sonriendo de manera coqueta al pelirrosa.

JiHoon solo dio un asentimiento sin darle mucha importancia, SoonYoung tendió su mano esperando a que JiHoon la tomará, quién reprimiendo los insultos hacía SeungKwan la tomó. Casi vio chillar de emoción al rubio, rodó los ojos pero una sonrisa burlona apareció en sus labios, SoonYoung empezó una plática amena.

JiHoon no se sintió del todo incómodo como lo esperaba.