Elecciones

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Habia pasado el tiempo suficiente para olvidar sabores, olores y hasta momentos que creí que perdurarían en mi mente una vida entera. Algún día aceptare que mi felicitad es corta y que debo disfrutar siempre los cinco minutos que otorgan.

Rompiendo ligas iba dejando mi dignidad en la galería de Eros que sin pensarlo dos veces exigía ver mas piel de lo establecido, sus cambios de personalidad me hacían dudar si realmente lo valía. 

Tomé malas decisiones las que me llevaron a ese preciso momento, donde realmente no sabia quien quería mi corazón pero  algo que tenia muy claro... Yo buscaba atención, suele suceder cuando pierdes algo que considerabas importante e intentas llenar el vació con intentos del chico con nombre de día de la semana. 

Las gotas que solían causar efecto en mi se acabaron y no había nada que me llevara a la cama mas que esperar a la llamada de Eros (si este estaba de humor) humillante, totalmente humillante para cualquiera con los dedos tradicionalmente necesarios de frente.

Era suficiente, suficiente para la chica que miraba en el espejo cada día entonces busque la botella que se guardaba con cuidado dentro de mi armario para una buena ocasión (quizás tenga un problema con la bebida pero admitamos que la ginebra tiene un delicioso sabor que puede volver adicto a cualquiera) prometí guardar la mitad pero esperando a la llamada de E perdí la cuenta de cuantos vasos contaba con cada trago directo de la botella, para cuando escuche su voz a través de la bocina mi discurso preparado se había esfumado como mi sobriedad.

"Fue bueno al inicio..." mi puerta sonó, mi teléfono se escapo de mis dedos, la temperatura bajó, mi ebriedad estaba llegando a otro nivel... Habia  olvidado como se sentía tenerlo frente a mi.

ViernesWhere stories live. Discover now