Tomé una bocanada de aire, no recuerdo haber dejado de respirar.
Pasaron un par de segundos en los que el silencio reinaba, hasta que todos empezaron a aplaudir. Me mordí el labio nerviosa, un montón de personas me aplaudían... Solo a mí.Como acto reflejo mi mirada buscó la suya y ahí estaba, sus aplausos se camuflaban entre los demás acampados, pero sus ojos estaban fijos en los míos; en ellos podía ver esa mirada divertida, esos ojos verdes que me recordaban a un niño pequeño.
No aparté la vista en ningún momento, de pronto los aplausos dejaron de sonar para nosotros, solo nosotros sentíamos esa electricidad, ese apego por lo prohibido.
Ahí me di cuenta, me estaba enamorando perdidamente de aquel hombre con ojos de niño y maldición ya no puedo hacer nada para impedirlo.
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¡Prohibida la habitación 12!
Novela JuvenilLa idea de pasar quince días rodeada de adolescentes con las hormonas alborotas y haciendo deporte no hacía más que producirle escalofríos a Eden Woods. Tras haber sido arrastrada a un campamento de verano por su mejor amiga, Eden se dejará llevar...