🌸Soulmate [L.D] (✔)

🌸 10

🌸 Narra Noemí

Abrí los ojos con temor, hacia algo de frio y me di cuenta de que mi cuerpo me dolía a morir, estaba en el suelo blanco de una habitación grande, a un lado derecho de mí se encontraba una cama con sábanas blancas y el edredón verde claro.

Trate de levantarme pero me daba miedo hacerlo, sentía que mis piernas se iban a romper si lo hacía; aun así lo hice.

La siguiente escena que vi me lleno de ternura y dolor, mis lágrimas empezaron a correr por mis mejillas y no planeaba detenerlas, sería estúpido si quiera que tratara de hacer algo.

No me moví cuando escuche la voz de varias personas solicitaron permiso para entrar a la habitación, después de tocar tres veces con calma, movieron la perilla y se asomó una mujer de avanzada edad que entro con calma pero luego se aterro y grito.

—¡My lady!- grito con horror la mujer de cabellos blanquecinos y arrugas en el rostro y las manos.

Poco después, llego un hombre de piel blanca y barba de tres días.

—Oh my lord- murmuro

—¡Fue esa maldita mujer, James!- chillo la anciana señalando un rincón que no había notado, era una chica de piel pálida, cabellos en perfectas ondas rubias manchadas de sangre, en el lado izquierdo de sus costillas y al juzgar por su hermoso vestido victoriano de color vino, supuse que sería hija de una rica familia.

Dos doctores vestidos de traje gris revisaron los cuerpos que estaban en la cama, tuvieron que separarlo, pues él abrazaba a la chica de forma protectora.

—Al juzgar por la escena y los cuerpos, podemos definir en un noventa por ciento que la señorita Liones ha sido envenenada, que el joven Fave previamente había recibido golpes severos en las costillas /le habían sacado la camisa y dejado al descubierto múltiples y enormes moratones en su cuerpo/ y que la señorita Benett se disparó a sí misma... - dijo uno de los doctores, éste tenía una mirada en ambos criados.

—Sin embargo, lamento mucho la perdida de esta familia... ¡Ah, cómo me hubiera gustado ver a ese niño crecer!- dijo el doctor que reviso el cadáver de la chica Liones.

—¿Disculpe?- pregunto el hombre de barba corta

—¿Acaso no estaban enterados? La señorita Liones esperaba con ansias la llegada de un vástago-

Y ahí, justo cuando estaba por terminar de decir esas palabras, llore a mares y gritos, pidiendo la ayuda que no iba a recibir. Nadie me escuchaba, ellos ni siquiera sabían que estaba ahí.

—¡Maldita bruja!- grite con odio, me deje caer al suelo de aquella habitación y golpee con fuerza el suelo con ambas manos.

Estaba frustrada. Me sentía impotente y triste.

Pero estaba sola.

Enseguida, todo volvió a hacerse oscuro y cerré los ojos, mis brazos temblaban y sentí el agua fría mojar mis piernas. No abrí los ojos, por más que me llamaban no quería abrir los ojos. Tenía miedo de volver a verlo.

—¡Noemí!- pero su voz, no me dejaba de llamar.