"El Ángel de la lujuria"
~yuri: ¡¡Otabek para!! -suelta una carcajada - ¡¡deja ya de hacerme cosquillas!!
~Otabek: pero te gusta o ¿no?
~yuri: jajaja sí pero.. Pero jaja ya no puedo, ¡para ya!
~Otabek: está bien cariño después de todo las cosquillas solo eran un pretexto para levantarte la playera -lo mira de arriba a abajo- ¿sabes?, ¡eres perfecto! Cualquiera que te conozca diría que eres un ángel pero lo que en realidad no saben es que eres todo un demonio, ¿no es así?
~yuri: Beka!!
~Otabek:jajaja lo siento amor pero es cierto, siempre encuentras la manera de tentarme para que me coma todo tu cuerpo
~yuri: te recuerdo quién fue el que me volvió así?
~Otabek: mejor ven acá! -lo levanta tomándolo de las piernas y enrollando sus brazos en la cadera del menor- que te parece si antes de ir a trabajar lo hacemos una vez más ¿Sí?
~yuri: ¡Otabek! ¡Ayer lo hicimos toda la noche! ¡Aún me duele la cadera!
~Otabek: creí que mi gatito tenía mejor resistencia, pero está bien si ya no puedes... -lo deja en el suelo y abre la puerta de la alcoba- mejor me voy a bañar
~yuri: (¡demonios! ¡Odio que haga eso!....Bien, yo también puedo jugar) está bien Otabek, pero me temo que se me hace muy tarde para ir al trabajo así que tendré que bañarme contigo (mi plan es fácil, entraré a la ducha con el y lo tentare para que no pueda resistirse a mi, como Beka es muy orgulloso va a resistir bastante pero al final voy a ganar!)
~Otabek: como quieras cariño pero no conseguirás nada de mi!
~yuri: oh ¿enserio? -río- ya lo veremos..
Al entrar a la ducha comencé a quitarme la ropa, primero muy despacio y cuando llegue a mis bóxers que por cierto estos eran ajustados, los arranque casi de un jalón, Otabek mantenía la mirada en el techo mientras enjabonaba su cabello, no me había visto y aún así su miembro comenzó a moverse, era tiempo de la fase dos, cuando entre a la regadera le di la espalda a Otabek y comencé a enjabonar mi cuello, luego mi pecho y cuando pase a mi espalda baja fingí que el jabón se resbalaba y lo dejé caer, solté una maldición y me incliné lentamente para levantarlo, cuando por fin tome el jabón escuche detrás mío la voz de Otabek
~Otabek: cariño realmente eres un ¡demonio! Creí que no querías hacerlo
~yuri: bueno no me importa si es a mi manera ¿Y bien? ¿Qué esperas?
~Otabek: ja! Nada amor, solo no te arrepientas después
Y sin más Otabek me envistió con más fuerza que la noche anterior, haciendo que soltara un gemido que trate de ahogar, mi plan había funcionado, estaba más duro que un palo, era delicioso, cada embestida, cada mordida en la oreja y tirón de cabello, era lo mejor que podía pedir para empezar el día, cuando ya estaba apunto de venirme Otabek me volteo hacía el, nuestras miradas estaban fijas el uno en el otro, mis piernas ahora estaban levantadas en el aire, y mi espalda tocaba los azulejos de la ducha, el agua no paraba de correr y se deslizaba por el cabello y hombros de Otabek. Era magnífico, su sudor combinado con el agua y la jabonadura que aún le quedaba en una pequeña parte de la cabeza, no me resistí y comencé a lamer el agua que estaba en su cuello, y eso lo motivó más, pude sentirlo, su miembro ante mi acción se volvió (si es que se podía) más grande y más duro, lo que provocó que soltara un gemido que hizo eco en todo el cuarto.
Cuando sentí que mi limite llegaba Otabek mordió suavemente mi hombro izquierdo, era un gesto que hacía cada vez que estaba apunto de venirse, al parecer de tanto hacerlo ya habíamos sincronizado nuestros orgasmos, para cuando Otabek me soltó mis uñas se clavaban en su espalda pues los espasmos seguían en mi cuerpo al sentir el semen caliente salir y a la vez entrar en mi cuerpo, Otabek no salió de mi hasta que yo no había estado ya exhausto y abrazado a su cuello, según él, no quería que nada de su semen saliera de mi interior para que así yo tuviera hijos, ¡Ja! ¡Como si eso fuera a pasar!, soy un médico y sé que eso es biológicamente imposible. Pero no me negaba a complacerlo con ese pequeño capricho, después de todo me había vuelto un adicto al sexo y el sentir su semen salir de mi durante mis horas de trabajo era lo único que me mantenía un poco pasivo, hasta que llegaba a casa.Ahora que lo pienso yo no había sido así de posesivo con alguna otra persona, siempre había sido muy independiente, pero todo cambió cuando lo conocí, al principio como un pequeño accidente en un autobús y después cuando tuvo un accidente automovilístico. Aún recuerdo con claridad cómo fue que terminamos juntos en este tipo de relación y es que aún no somos formalmente nada. Pero debería empezar por el detonador de toda esta locura.
Después de que Otabek tuviera un accidente de auto y yo ayudará a su operación una enfermera llego gritando que un paciente preguntaba por mi, después de que me dijeran de quien se trataba me dirigí a su habitación y cuando abrí la puerta le vi, recostado en la cama con la mirada perdida en el paisaje que la ventana, debido a la altura del edificio, dejaba contemplar (la verdad aveces yo también solía ver el amanecer desde uno de los cuartos más altos del hospital) en cuanto di los primeros pasos para entrar a la habitación giró su cabeza en dirección mía, sonrío y dijo con una voz que me pareció la más hermosa que jamás había escuchado.
~Otabek: nos volvemos a ver mi hermoso ángel
~yuri: ja! Lo que dijo aquella enfermera fue cierto! Pero me meterás en un lío si sigues llamándome "Ángel"
~Otabek: mis sinceras disculpas, esa no era mi intención, es solo que tu rostro es hermoso, no importa cómo estés, durmiendo o con bata y gorro de cirugía
~yuri: yo -se sonrojó- te agradezco tu halago pero como es que me recuerdas en bata de cirugía? Tengo entendido que sabes que yo fui quien ayudó en tu operación, ¿como sabes eso?
~Otabek: ni yo lo sé, pero tu rostro lo podía ver claramente mientras estaba recostado, no vi a nadie más, solo a ti.
Quería volver a verte después de nuestro encuentro en el autobús pero nunca creí que sería de esta manera~yuri: ni yo, tuviste mucha suerte el doctor en jefe dice que solo necesitas estar aquí una semana o menos y te podremos dar de alta
Otabek guardó silencio y mordió su dedo pulgar como si quisiera contener su enojo
~yuri: ¿ocurre algo? ¿Te sientes mal? ¡Puedo ayudarte! -se dirige a la cama y le toca la frente- no pareces tener fiebre, ¿te duele aún el brazo? Puedo mandar a que te den más medicamento. O si no-
~Otabek: jajaja tranquilo no me pasa nada, bueno más allá de que tengo destrozado y enyesado el brazo. Es solo que el pesar en que me darán de alta pronto no me alegra
~yuri: bueno serias el primer paciente al cual no le agrada salir del hospital
~Otabek: ¿como podría agradarme una noticia así? Quiero decir, recién volví a encontrarte y pensar que dejare de verte me pone–.....
Además -susurro- no es como si tuviera a alguien esperándome~yuri: perdón ¿que fue lo último que dijiste?
~Otabek: Eh? No es nada, pero ahora que lo pienso, no te he agradecido por salvarme la vida, gracias y me gustaría recompensarte!
~yuri: no- no es necesario después de todo es mi trabajo!
~otabek: por favor debe haber alguna manera en la cual pueda... Agradecerte?
~yuri: dudo que haya una manera
~Otabek: está bien, ya llegará el momento... Pero recuerda yo no olvido lo que hacen por mi
<<Chicas y chicos (si es que hay) espero les haya gustado este cap. Es el "primero" y el narrador en este caso va a ser nuestro querido Yurio, para los que tengan dudas, SI Otabek y yuri ya están juntos y Yurio está relatando su historia al menos su inicio cuando llegue a la actualidad entonces ya será otra historia jajaja bueno como siempre se despide de ustedes por el momento.. Limbe Nuri!! Bye bye >>
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"El Ángel de la lujuria"
FanfictionYuri plisetsky un aspirante a doctor se encuentra ahora en Kazajistán tratando a pacientes que llegan en un estado grave. Después de que un choque automovilístico ocurriera los heridos son trasladados hasta el hospital en donde reside el rubio, sin...