Capitulo 8

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Carol estaba en el aeropuerto, algo estresada ya que eran 5 horas de vuelo desde California hasta Nueva York. Notaba algo extraño, algo que la incomodaba un poco, era sobre su marido, quien desde que habían llegado al aeropuerto no había dejado el celular.

_Aquí tiene su pasaporte señorita, que disfrute el viaje_ responde amablemente la mujer de boletería.

_Gracias_ sonriente.

Al parecer Carol llegaría a la misma hora que su hermano Shawn, quien volvería de la escuela a las 14:30 pm. Eran las ocho de la mañana, Carol estaba sentada en una cafetería esperando a que llamaran a su puerta y pudieran ingresar en el avión, mientras tanto, Sam, su marido le traía una taza de café para que se tranquilizara ya que los nervios la estaban matando.

_Tranquila, vas a lastimar a nuestro hijo_ apoyando la taza de café en la mesa.

_No sé cuál de las dos me hace poner más tensa_ dice, con extraña cara. _Pensar en mi familia o verte sin soltar el teléfono desde que llegamos_.

_Es el trabajo amor _ bloqueando su teléfono. _Olvide avisarle a mi amigo, quien tiene que cubrirme. Perdoname_.

_No te preocupes Sam, está bien_ tomando su mano. _Qué bueno que me acordé y traje el certificado de la doctora Karen. Sin esto no podríamos_.

"Avisamos a todos los pasajeros que las puertas 24, 26, 28 se abrirán en dos minutos, por favor les pedimos que hagan una fila para poder ingresar rápidamente. Muchas Gracias"

_Es hora_ frente a su marido. _Nueva York, hogar, familia, aquí vamos_.

Sam toma ambas maletas mientras Carol llevaba cargada en su espalda una mochila liviana, en su mano izquierda llevaba la documentación para cada estación en la que se precisara.

Después de hacer la fila, entran al pasillo para ingresar al avión, en la puerta daban la bienvenida y verificaban los boletos.

_ ¿Usted está embarazada señora? _un guardia de seguridad.

_Sí, estoy entre las quince semanas y tengo certificado_ Carol lo saca de su documento y se lo enseña.

_Perfecto, puede ingresar_ le comenta el guardia.

_Gracias_ responde Sam.

Ya arriba del avión, buscan los asientos. Las dos maletas que tenían eran valijas pequeñas, las que contaban como equipaje de mano, Sam las guarda mientras Carol se acomoda y se pone se campera.

_Perdone que la moleste señorita_ dice una mujer, de edad similar a ella. _ ¿Es usted Carol Johnson? _.

_Nunca imaginé que esto pasara_ entre risas. _Sí, soy yo_.

_No lo puedo creer, eres grandiosa_ tapándose la boca. _La Reina de la Música, toda una leyenda_.

_Gracias, ¿Cómo te llamas? _preguntó ella.

_Me llamo Verónica, ¿Le molestaría filmar mi disco? _la mano le temblaba.

_Claro, dejame tomar mi fibrón. Siempre traigo uno por si acaso_ toma el disco y lo firma.

_Muchas Gracias señorita, espero que tenga un hermoso vuelo_.

_Igual usted Verónica_ antes de guiñarle el ojo.

La señora emocionada, vuelve a su asiento y le enseña a su marido el CD autografiado.

_ ¿Hace tiempo que no pasaba eso? _entre risas, sentándose junto a ella.

_Son como mi otra familia, siempre tratándome con respeto_ recordando. _A veces los extraño_.

_No olvides que las madres, se lo enseñan a sus hijas y ellas siguen el fanatismo_.

La Cena Está LISTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora