S E V E N

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– ¿Qué has ganado? – Freddy sin apartar su frente de la del contrario desliza su mano libre a la mejilla acariciándola con un suave camino
– ¿No es obvio? Tu juego – Fred comenzaba a alterarse un poco, la forma tan delicada que acariciaba su rostro hacia el tétrico contraste con sus frívolas palabras
– ¿Qué juego? ¿De qué hablas? – Arqueando sus labios en una sonrisa a medias se separa, bajando su mano del rostro del contrario, elevando la que tenia entrelazado sus dedos para besarlos de sarcástica forma
– Que malos amigos tienes, ¿Creías que eras el único con la habilidad de cautivar a cualquiera? Que lindo. En la escuela de tu amigo no me conocen por "tierno" si no, por lo que tu eres en ese lugar señor rey de la pasión, parece que no eres tan bueno a como alardeaban, suplicando por mis besos sin importar denigrar tu estatus, que bajo has caído, así que~ he ganado, enamorar locamente al excéntrico chico fue más fácil de lo que imagine, ¿Quien diría que me suplicaría entre lágrimas? Que mal que no grave esos momentos – ¿¡Que estaba pasando!? Las palabras tan frías y sin emoción de Freddy negaban la imagen tan pura que tenia de él, todo parecía una pesadilla horrenda, de la cual solo deseaba despertar
– ¿Esto es un juego?
– ¡Correcto! No eres tan idiota, solo te use, pero no te preocupes, tu tenias lo mismo entre planes ¿O no? Pfff~ ¿verdaderamente pensaste que merecías al amor eterno? Por favor, deja los sueños de hadas – Decía Freddy dejando caer la mano de Fred al suelo, era increíble, los ojos tan puros y milagrosos del pequeño simplemente mantenían esa apariencia de pureza inquebrantable, pero, las palabras tan dolorosas que atravesaban su corazón como dagas punzantes eliminaban ese rastro de amabilidad cautivadora
– ¿T-todo fue..... Un juego?
– Y uno muy divertido, mira a quien hice llorar como Magdalena, miles de personas ya no te tomaran en serio después de revelar esto, que la sexy y pasional persona llora como un bebé ante otro hombre – Verdaderamente las lágrimas de Fred recorrían sus mejillas, todo parecía una pesada broma en venganza de sus actos pasados, pero en el fondo sabía que era cierto, una acción que comenzó como un juego le lastimaba de sobremanera, nunca pensó que sus lágrimas podían caer sin parar, deseaba esconderse del mundo y acabar de la peor manera su dolor mientras que las carcajadas sin preocupación del contrario continuaban con la incrustación de punzantes golpes a su pecho
– ¡Esto es una mentira! ¡Dijiste que me ambas!
– ¿Seguro que lo dije? No lo recuerdo – El tono burlón de Freddy era verídico, nunca le dijo al menos un te quiero, todas eran frases evasivas al tema, ya nada podía hacer, la figura delgada del cuerpo de Freddy se levantaba del gélido suelo, pero antes de darse la vuelta y salir de casa se detiene – Si alguna vez creíste que alguien te amo, solo piensa que el pecado de la pasión esta privado de ese sentimiento, nunca podrás ser feliz con alguien, y nunca te curaras de esta herida, matar dos pájaros de un tiro, enamorar a un bastardo codicioso que creyó en cuentos estúpidos de un desconocido, y eliminar bazofia de este mundo, felicidades numero..... No lo se, mas de uno ha caído ante mi, y no serás el ultimo

Little game; Frededdy [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora