Su despertar había sido simple y sencillamente glorioso.
Una agradable sensación recorría su cuerpo junto a esa deliciosa satisfacción de sentir toda su piel, músculos y huesos levemente adoloridos.
El frío aire de Rusia se colaba por una rendija hasta su sensible piel, bajo las cobijas ambos cuerpos descansaban desnudos, totalmente satisfechos.
Lamentablemente el timbre de la puerta no lo dejaba disfrutar de la perfecta mañana que estaba teniendo junto a su alfa.
Se levantó con pereza arrastrando los pies sintiendo una humedad escurrir por sus piernas, se coloco la bata de su esposo tratando de seguir sintiendo la calidez de su amado rodeandolo.
Para cuando llegó al primer piso un escalofrio le recorrió el cuerpo y el olor floral del japonés lleno sus sentidos.
Fue inevitable gruñir cuando lo vio en el marco de la puerta, con las llaves de repuesto que normalmente dejaban ocultas para emergencias.
—Que haces aquí cerdo?
—Lo siento, Viktor no acudió ayer a... Nuestra reunión y como esta mañana seguía sin contestar el teléfono decidí venir a revisar -habia dudado un poco y eso solo significaba mentiras- creí que no estarías, lamento haberte molestado.
Continuó mirándolo, no pudiendo creer la poca vergüenza que tenía para decir que planeaba entrar a su casa a ver a su esposo cuando el no estaba e invitarlo a hacer quien sabe que cosas probablemente en su cama.
—Tenía cosas mas importantes que esa... Reunión, o eso imagino yo, ahorita esta dormido pero en ningún momento mencionó que tenia un compromiso, puedo darle tu mensaje si quieres -tratando de dulcificar su tono en uno servicial que invitara al moreno a decirle que planes tenia para viktor.
—No, esta bien, le mandare un mensaje - sonrió un poco y se dio la vuelta, no parecía avergonzado de cruzar esa puerta como si fuera suya ni de estarse llevando las llaves, tal vez ni siquiera las había tomado del escondite, y la idea le revolvió las entrañas ante el hecho de que no recordaba haber revisado si las llaves estaban ahí algún otro dia. Ya no podía hacer nada, si decía algo el podría decir que olvido devolverlas y si lo encontraba dentro tendría la excusa perfecta diciendo que solo devolvía las llaves.
Estaba que se lo llevaba la mierda.
Viktor decía que después del celo era como un gatito ronroneante, pero en ese momento no se sentía como uno.
———
Otro capitulo, después de mucho XDD
Es un milagro porque constantemente se me seca el cerebro y no encuentro que escribir :'v
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Solo
FanfictionHace mucho que el dolor no recorría su cuerpo como ese día. Llegar a tu casa y sentir el olor de esa persona que tanto evitas mezclada con la del amor de tu vida, puede ser el peor recibimiento que te podía dar tu alfa.
