capítulo 2

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Jessica POV'S

Me senté en el sofá y encendí la televisión para ver si hay algo que ver, pero nada; hoy en día ya no echan nada interesante y que valga la pena, echan puras tonterías sin sentido. Sé que mis papás se quedarán hoy en la noche y por eso no puedo salir de fiesta, pero cuando se vayan estoy dispuesta a ir con mis amigas y más hoy que Mario, el chico que me gusta hace la fiesta. Me tire en el sofá con toda la intención de dormir pero ese intento fue en vano cuando mi mamá salióde la cocina y se dirigió a mi.

-Hija ¿acaso no piensas vestirte y arreglarte para la cena? -Dijo sentándose al lado de mis pies.

Mierda, me había olvidado completamente de la cena. Y como le diga que me olvide de la cena me va a dar una buena.

-Sí mamá ya voy ahora -Dije sentándome en el sofá y levantándome después.

Subí a mi habitación y me metí a la ducha, me lave el pelo y luego me lo alisé. Luego me maquille natural, no me recalque tanto los ojos y menos los labios. Me puse un vestido granate con escote V que tenia encaje por la parte de arriba y la falda era suelta. Me puse unos tacones y listo, ya estaba.

 Me puse unos tacones y listo, ya estaba

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Alguien había tocado la puerta. Me dirigí a abrir la puerta y cuando la abrí me encontré con una mujer de pelo marrón oscuro y ojos color miel, es mi madre. Llevaba puesto un vestido blanco por debajo de las rodillas, es un vestido ajustado, que hace racalcar su figura.

-Vaya mamá te ves... divina -Dije mirándola de arriba a abajo.

-Tú también mi vida. Venga vamos que dentro de oco llegarán los invitados.

Baje junto con mi mamá al salón y no tuvimos que esperar ni 30 minutos hasta que llegarán los invitados, cuando tocó el timbre fui a abrir yo.
Abrí la puerta y allí se encontraba un señor de la misma altura que mi papá, de pelo marrón y ojos achinados, sus ojos eran tan pequeños que no pude ver el color de sus ojos (se que el papá de Zabdi casi no es así pero vamos a cambiar cosas) al lado del señor se encontraba una mujer de pelo negro, más baja que el señor que supongo que será su marido, a ella si le pude ver el color de sus ojos que eran negros. Era una mujer muy bella. Atrás de ellos pude ver a un chico alto de pelo rizado y de color marrón, ojos achinados y sus ojos eran de un color marrón.

-¡Carlos, amigo! -Dijo papá asomándose a la puerta.

-¡Ey Jeff! ¿Que tal? -Entro el señor a la casa. A juzgar por su acento, no es de aquí.

-Noemí, hola -Dijo mi mamá acercándose a la señora para darle un abrazo.

Yo seguí en la puerta sin entender nada. Al parecer mis papás y ellos sí se conocen y yo nunca los había visto.

-Hija te presento ellos son grandes amigos de la familia -Dijo mi madre. Lo sabia -Él es el señor Carlos, su esposa Noemí y su hijo Zabdiel.

El chico pasó dentro de la casa y lo pude ver mejor, realmente era un chico muy apuesto. Llevaba puesto una camisa negra, unos pantalones vaqueros y unos tenis.

-Encantado de conocerte -Dijo estirando una mano para que yo la recibiera.

(...)

Estábamos ya en la mesa comiendo, mis papás y los señores de Jesús hablaban y reían y sin embargo yo miraba al chico que estaba atento mirando su móvil, ajeno a todo lo que pase a su alrededor. Yo lo observaba con disimulo para poder ver algo en él, pero no encontré nada. Su rostro era natural, no mostraba nada. Pero ¿Para qué vino él? ¿Será que mis papás quieren qu eme case con él? Ay no, no, no, no pienses en eso Jessica.

-Bueno es hora de decirles ¿no? -Dijo la señora de pelo negro que se llama Noemí.

Su comentario llamó mi atención y la de Zabdiel, él al instante dejo su teléfono en la mesa y miro a sus papás. Yo me limité a mirarlos curiosamente.

-Jessica, Zabdiel queremos decirles que... -Mi papá hizo una pausa -Bueno Jess sabes que tu mamá y yo tenemos muchos trabajos y cosas así y que por esas razones viajamos mucho ¿no? -Asentí con la cabeza -Pues queremos decirte que tu madre, los padres de Zabdiel y yo nos vamos a ir de viaje por trabajo durante un año.

-¿¡QUÉ!? -Me levanté de la silla rápidamente. Un año es mucho tiempo, antes aguantaba 3 meses o hasta 5, pero un año es demasiado -¿Porque un año? -Dije ya un poco más calmada.

-Pues verás tu papá y nosotros nos hemos asociado para así poder construir un hotel en España. Ese hotel es muy importante e invertiría mucho dinero a las empresas. Entonces lo mejor es que nosotros estemos allí durante todo el proceso de la construcción -Dijo el padre de Zabdiel.

Yo estaba realmente sorprendida. Esto no me lo esperaba para nada. Miré a Zabdiel y vi que su rostro había cambiado y ahora mostraba seriedad.

-Pero como vamos a estar tanto tiempo fuera decidimos una cosa muy importante -Dijo mi madre.

-Zabdiel va a ser tu niñero -Dijo Noemí.

-¿¡QUÉ!? -Dijimos Zabdiel y yo al unísono.

-No ustedes están bromeando. Soy bastante mayor cómo para cuidarme yo sola.

-No, no, no, yo no puedo cuidar a alguien así de la nada,  ella ya esta bastante grande para saber cuidarse sola.

-Lo siento chicos pero así son las cosas. Zabdiel te quedarás a dormir aquí, en el cuarto de invitados -Dijo mi mamá.

-¿Que? Pero yo no tengo mi ropa aquí.

-Tranquilo cariño, ya te hemos traído ropa para una semana -Dice Noemí.

-¿Y cuando os vais? -Pregunté yo un poquito más calmada.

-Dentro de 25 minutos -Dijo mi papá.

-Así que nos despedimos aquí -Dijo Carlos.

Ellos se despidieron de nosotros y salieron de la casa no sin antes decirnos que nos quieren y que nos llamarán todos los días.
Enserio que esto no me puede estar pasando. ¿Un niñero? ¿Yo? No lo entiendo.

Mi Estúpido Niñero| Zabdiel de Jesús| CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora