Los días se agotaban, los momentos de estar a solas eran muy raros. Hacía días que no hacían el amor, se tocaban el uno el otro, excepto a besos robados. Solo eso, pero el hecho de que los dos se amaban lo hacía insoportable y sin dejar de decir doloroso.
- ¡dios! Estoy muerta- grito Angel , dejándose caer en el césped del patio donde era su ultimo día de entranamiento. El día siguiente era desicivo para la revolución mutante , ese sueño que tanto Xavier adoraba.
Las cosas en los últimos días se habían tensado un poco.
- Reaven ¿podemos hablar? – McCoy quien estaba senado en la orilla de la cama se puso de pie y salió directamente del cuarto
- Los dejare para que hablen- al parecer una relación entre los dos jóvenes afloraba cosa que el rubio tuvo que leer de mene de su hermana
- ¿sigues enojada conmigo por algún motivo?- la joven dejo su lápiz labial en el tocador
- No – dijo secamente , el rubio cerro la puerta y metió las manos en el bolsillo
- No quiero estar peleado contigo cuando mañana toda nuestra vida cambiará y si algo malo me pasara o te pasara no quisiera que estuviéramos aún molestos, dime ¿qué sucede?- la joven se puso de piel al momento en que ciento de imaenes desgarradoras pasaron por su cabeza, no soportaría el perderlo y no decirle "te amo" , nunca.
- Yo...lo siento, las cosas se tensaron, el estrés....que todo saliera bien- se acerco a él
- Pero aún no me has dicho el por que- la joven trago duro
- Estoy enamorada de alguien que no me corresponde, es tan idiota que no se da cuenta- la miro con piedad
- Si es así, es un idiota por no darse cuenta de que tiene a su lado una hermosa mujer, espero que McCoy se de cuenta pronto- la joven comenzó a llorar amargo , haciendo que el otro lo abrazara contra su pecho
- Si, es un completo idiota...lo es- besos sus mejillas mojadas y le sonrió
- Entonces ¿todo bien entre nosotros?- quería matarlo, quería gritárselo a los 4 vientos , pero no podía decircelo
- Si, hermano, todo bien y siento tanto el haberte causado problemas- el otro la separo de él
- No seas tonta, no lo eres. Ahora bien, mañana tenemos que partir, así que descansa lo suficiente- le dio un beso en la mejilla al ojiazul y lo acompaño a la puerta
- Claro, igual tú – en el pasillo lo esperaba Erik
- ¿todo bien? – pregunto mientras saco un cigarrillo
- Te he dicho...- el otro sonrió y antes de que terminara de prenderlo, se acerco a al ventana que estaba entre los cuartos de ellos, al abrió y fumo
- Siempre hago lo que quieres, Charles- le dio un toque, miro firmemente al otro y pudo leer sus pensamientos en sus ojos, arrojo el cigarro por la ventana ya apago. Desesperado el ojiazul se acerco a él dejando que lo rodeara con sus brazos y entraran el cuarto fundidos en un beso lleno de demanda por esos días que no lo habían hecho. Rápidamente ambos se quitaron la ropa. Erik cargo al ojiazul y lo puso en la cama, arrojándolo en ella, era tanto el deseo que Charles se puso en cuatro
- Hazlo, hazlo ya...- chillo
- Pero aún...- el otro lamió sus dedos y comenzó a penetrarse, mientras el castaño se masturbaba
- Ngnhnh...Erik, por favor esto no es suficiente- el otro lo tomo de las caderas para acercarlo a él , se puso de rodillas y saco su miembro, introduciéndolo de un tajo, Charles ahogo su gemido entre las sabanas, había dolido por el tiempo en el que no había estado en uso y sin darse cuenta comenzó a mover sus caderas. Erik se dejo caer sobre la espalda de su amante, entrelazo sus manos, estaban un poco blancas por la fala de circulación- más...más- se escucho dentro de las almohadas. Se enderezo y comenzó a penetrarlo mas fuere, llegando hasta su próstata, una descara de electricidad recorrió su cuerpo, un vació en el estomago se formo, sentía como llegaba al orgasmo. Charles tomo la mano de su compañero y la bajo hasta su miembro, haciendo que lo masturbara. Unos minutos después, ambos se corrieron. Se tranquilizaron después de hacer el amor.
- Charles...- el rubio giró su cabeza con los ojos cerrados y lentamente los abrió
- ¿dime?- le sonrió
- Mañana, mañana todo será definitivo, lo único que quiero es que eses de mi lado ¿lo harás? – el otro se recostó en el pecho
- Ambos sabemos que tenemos opiniones diferentes, espero que al final de toda la adrenalina, lo estemos-
- Eso espero...-
El gran día había llegado. Todos fueron a buscar a Hank pero su estudio era un completo desastre, habiendo dejado una nota. Todos se vistieron y se dirgieron a la base aérea donde lo encontraron ahora convertido en Bestia.
- ¿y ahora?- pregunto Raven. Todos vieron el avión
- ¿funciona?- McCoy miro al rubio
- Claro, yo lo diseñe- pilotearon hasta donde se encontraba la flota de barcos preparados con la orden de atacar. Una vez haciendo que el misil de la nave rusa atacara a su compañero, todo comenzó. La gran pelea se desarrollaba fuera del submarino de Shawn, Charles perdió la comunicación por culpa del vació. La batalla seguía allá afuera, mientras Shawn lavaba el cerebro de Erik, doblegaba su ser con el recuerdo de su madre, cuando pudo congelar al alemán, Erik tomo el casco para eviar que su amigo leyera su mente. Tomando la moneda que Shawn alguna vez le había dado en el campo de concetración, atravesándola por la cabeza de su enemigo.
Lo había logrado, separarlos. El miedo, la ira, el rencor, odio. Dando su discurso de gran mutante. Haciendo que cada segundo se fuera a la nada. Todo esaba perdido, entre ellos, entre los dos. Los barcos lanzaron los misiles. Lensherr detuvo los armamentos pero solamente para regresarlos hacía sus atacantes.
- Somos los mejores, pruébalo- aun con el casco, lo conocía tan bien que sabía cual era la intención -¡suéltalos! – grito, pero lo ignoro, obligándolos a pelear. Estaba cegado, cegado por tantos años de represión. La comandante que los acompañaba comenzó a disparar contra Lensherr, una de las balas que esquivaba con sus poderes llego a penetrar la columna de Erik
- ¡tú lo hiciste! – comenzó a ahorcarla con sus placas de soldado
- Ella no lo hizo, tu lo hiciste-
- Te quiero de mi lado...-
- Lo siento, pero no es así – viéndolo a los ojos supo que todo estaba perdido, que sus caminos estarían separados para siempre. Raven acepto ir junto con Lensherr
- Ve con él, es lo que quieres- así lo hizo, se unió con el ojiverde
- Al final de cuentas, era él- pensó entre él
Al darse cuenta de que no podía sentir las piernas, temblo sin parar. Al llegar al hospital le confirmaron su peor miedo.
- Lo siento- el doctor dejo la habitación, entro a ella McCoy
- ¿cómo estás? – el ojiazul lo miro
- Invalido- mustió con odio
- No es el final del mundo, estás vivo, podemos seguir adelante
- No sé si quiera, no sé si deba, lo perdí todo. A las dos personas que mas amaba en este mundo- el azul agacho la mirada. Pasaron unas semanas hasta que salió del hospital
- Vamos a casa Charles – le dijo McCoy haciendo que el otro casi vomitara al recordar todo lo que paso en ella.
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Lee mi mente por favor
FanfictionErik siempre le ha dado permiso a Charles de leer su mente. "¿Por qué ya no puedo leer tu mente?" "Tal vez, por qué, ya no quiero que lo hagas mas." La relación de estos dos mutantes con el paso del tiempo empeorara.