Esa mañana estaba muy enérgico, había dormido más que bien. Las cosas con TaeMin estaban bien, aunque el menor aun no lo dejaba dormir en la casa, porque eran novios, y los novios no dormían juntos hasta el matrimonio. Sabía que TaeMin solo estaba jugando con él ¡Pero no tenía nada que ver! Los novios dormían juntos, los novios tenían sexo, los novios salían, los novios hacían muchas cosas y también vivían juntos.
— No, MinHo. Los novios no duermen juntos.
— ¡Pero TaeMin! ¿Dónde quieres que duerma?
— En la casa de JongHyun ¿Ahí te estás quedando?
El menor levantó la ceja mirándolo, mantuvo los brazos en jarra sobre la cintura, y la pierna se movía con el constante repiqueteo del pie contra el piso. Lo veía y no lo creía, si TaeMin fuera mujer le diría ¡Bruja! Pero no, no diría aquello (Seguro y terminaba sin un testículo, jojo). Conservaría la calma, no diría nada. Su pequeño se estaba tomando muy a pecho el juego de novios.
— Estas embarazado, no puedo dejarte solo, bebé.
— Tendrás que estar atento al teléfono, te llamaré cualquier cosa.
— Pe... Pero TaeMin.
— Adiós cielo, duerme bien.
Le saludo con la mano y le cerró la puerta en la cara. ¡En la cara! (Qué clase de esposo hacía eso, solo TaeMin) Escucho la risotada del menor tras la puerta y como las luces eran apagadas una tras otras hasta dejar la casa en oscuridad.
MinHo negó con la cabeza recordando los acontecimientos de la noche anterior, sus hijos ya dormían así que no se darían cuenta de su ausencia. Por esa misma razón iba directo a su casa (Porque ahí vivía, aunque TaeMin lo echara) Con una pequeña bolsa de papel donde había pastelitos, que sabía que sus bebés y su otro bebé grande le gustaría.
Le había mandado mensajes a TaeMin, pero este no se conectaba desde ayer por la tarde. No sabía para qué tenía un celular si ni siquiera le mandaba algún mensaje. Bufo, haciendo volar el flequillo revoltoso de la frente, se lo hubiera cortado pero a TaeMin le gustaba así de largo, y a su pequeña Elizabeth también. Lo usaba de modelo para peluquería "Papi, te hare un peinado y te dejare lindo como mami" Y bueno, él como padre no podía negarle cosas a ella. Por lo que terminaba dejándose peinar, terminando con gomitas, hebillas, apliques y por supuesto no quedaba tan lindo como su esposo.
Doblando por la esquina se fue deteniendo de apoco, hasta estacionarse en el porche. Arrugó el ceño al percatarse que las cortinas estaban cerradas, algo raro. TaeMin lo primero que hacía al bajar a la sala era abrir cortinas y persianas para que entrara la luz del sol.
¿Le había pasado algo a su pequeño?
Alarmado se bajó apresurado, por suerte las llaves no le habían quitado (Sería el colmo) Entró, llamando la atención de los gatos que solo abrieron los ojos mirándolo, ninguno le dio la importancia que se merecía, y él tampoco. Tenía un objetivo y era encontrar a TaeMin. En grandes zancadas subió las escaleras, paso por los pasillos hasta la habitación principal donde la abrió de un sopetón. Todo estaba en oscuridad, encontró a su esposo acurrucado en la parte donde solía dormir, estaba tranquilo agarrado a su almohada la apretaba con fuerza estando aferrado.
Se dirigió a él despacio, sentándose en la cama a su lado le acarició los cabellos despacio dejando el bello rostro que se cargaba a la vista, lo removió un poco para despertarlo, solo escuchando quejas de su parte.
— Vamos, bebé. Es hora de despertar. Luego retas a los niños y tú eres igual, eh.
— No me retes tan temprano, feo. No te das cuenta que duermo por dos, uhm — TaeMin se removió entres las sábanas desperezándose, le costó abrir los ojos pero igual lo hizo, pestañeando tupido visualizo a su esposo unos centímetros, estiró la mano para tocarle el rostro. — Estoy cansado, quiero dormir un ratito más.
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Citas
FanfictionEl matrimonio Choi para muchos esta en las ultimas, incluso para el mismo TaeMin. Pero a pesar de las dificultades, MinHo se niega a perder a quien el bendice como; el amor de su vida. Por esa misma razón se ha empeñado en volver a reconquistar a...