How long will I love you - Swan Queen

Capitulo 13

Emma no había podido dormir en toda la noche. Había estado dando vueltas por la cama pensando en el beso que Regina le había dado.

Si el primero no fue suficiente para convencerse que estaba enamorada de ella, el segundo lo fue. Aquella mujer la volvía loca y no sabía qué hacer para sacarla de su cabeza.

Estaba tan confundida por la actitud de Regina. ¿Había sido un impulso? O ¿La beso porque sentía algo por ella? Necesitaba respuestas.

Con una actitud decidida llego al hospital en busca de Regina. Iba a enfrentarla y no la dejaría ir hasta obtener todas y cada una de las respuestas a sus preguntas.

Emma camino hasta Ruby y se coloco a su lado.

—¿Has visto pasar a Regina?

—No... no hay señal de ella, ¿Por qué? — Respondió la morena.

—Necesito hablar con ella.

—Creí que no la ibas a presionar.

—Sí, eso fue antes de que me besara anoche antes de irse.

—¿Qué? — Los ojos de Ruby se abrieron como platos — Necesito detalles.

—Llego a mi departamento con una botella de vino y pastel. Me dijo que quería hablar pero no quería mencionar lo del beso. El ambiente estaba demasiado tenso y decidió irse...

La atención de Emma se vio atraída ante Regina que caminaba hacia la habitación de su prometido. La rubia corrió detrás de Regina dejando a su amiga con la curiosidad sobre lo que había pasado.

—Regina.

La morena se detuvo y dio media vuelta lentamente.

Tenía la esperanza de que Emma no se diera cuenta de que había llegado. No quería tener que darle explicaciones sobre lo que había hecho la noche anterior porque ni siquiera ella lo sabía.

Regina le dedico una pequeña sonrisa a Emma y metió las manos a los bolsillos de su abrigo para que la rubia no se diera cuenta de que temblaban.

—Hola, ¿Qué pasa?

—Regina... Necesitamos hablar.

—Emma, creo que ahorita no es el momento...

—¡Emma! —Al escuchar su nombre la rubia volteo hacia el otro lado del pasillo y vio a la mujer bajita y morena que se acercaba a ella.

—Mary Margaret, ¿Qué haces aquí?

—Pasaba por aquí y quise saludarte — Respondió la mujer con una sonrisa — Hola Regina — Regina saludo a Mary Margaret con la mano y una sonrisa — Y también vine a invitarte a cenar conmigo y con David dentro de dos noches... ¿Qué te parece?

—Claro, me parece bien — Respondió Emma apresuradamente tratando de que su madre se fuera.

—La invitación también es para ti Regina.

—Muchas gracias, pero esa noche tengo una función — Respondió Regina lo más amablemente posible.

—Entonces podemos cambiarlo de día... Para David y para mi es importante que la pareja de Emma conviva con nosotros.

Emma y Regina se miraron la una a la otra confundidas.

—No, nosotros no... — Emma no podía responder y solo sentía como su rostro comenzaba a sonrojarse.

—Nosotros no somos pareja — Respondió Regina.

—No, no lo somos... Ella está comprometida.