•05•

579 54 12
                                    

Me aleje de él y lo miré. Él me miró desconcertado.

-¿Que te pasa? -preguntó algo irritado- Primero estás juguetona y ¿despues que? Dejas a los chicos empezados, ¿te has convertido en eso, ____? ¿en una calienta pollas?

Levanté mi mano y la deje caer en su mejilla, dejándosela roja. Era un grandísimo hijo de... Él sonrió, con esa sonrisa arrogante. Pensé que haría algo, de todo, menos lo que acababa de hacer. Me besó. Jimin me estaba besando, sus labios sabían a sal y vodka, una mezcla mareante. Era tan bueno. Reaccione cuando bajo su mano hasta mi pierna y fue subiendo mi vestido, me separé de él y volví a pegarle una cachetada.

-Ni se te ocurra volver a...

No pude terminar mi amenaza porque volvió a besarme. Con fuerza, con lujuria, con pasión. Dios, era mareante y a la vez tan bueno, era un beso que te hacía llegar a lo mas hondo de la conmoción. Me separé de él de nuevo y volví a levantar la mano, pero él la cogio y me acerco a él.
-Eres un idiota -susurré jadeante contra sus labios. Sonrió.

-Cuanto mas me pegues, mas te besaré -susurró. Su aliento a vodka chocaba contra mi boca deliciosamente.

-Puedes seguir intentando besarme, porque te voy a pegar tantas veces me de la gana -respondí zafandome de su agarre. Él rió.

-Te has vuelto toda una mujer, ____ -dijo él cogiendome de la barbilla. Me zafé- Toda una seductora.

-Gracias a ti -sonreí. Me acerque a él de nuevo, puse las manos en su abdomen, él me miró con los ojos entrecerrados- ¿Todavia recuerdas, Jimin? Lo bien que la pasamos juntos -rosé mis labios con los suyos- Lo mucho que me hacías gritar -susurré en su oído- Que tu fuiste el primero -lo miré a los ojos, vi un destello de lujuria en ellos y sentí como mini-Jimin se despertaba, me separé de él- Yo no recuerdo eso -dije con voz dura-  Solo recuerdo lo mucho que me heriste y eso Jimin, va a ser lo último que recuerde de ti. Por tí solo siento odio y rabia.  -su rostro torno serio.

-¿Entonces a qué estás jugando, ____? -preguntó acercándose  de nuevo a mi. Me aparté de él.

-¿No te gusta? -sonreí seductoramente- ¿no te gusta el juego de la seducción, Jimin? -pregunté acercandome.

-Recuerda _____, quien juega con fuego se acabará quemando -susurró. Le sonreí sarcásticamente.

-Me gusta arriesgarme.

Él sonrió con arrogancia y me dio la espalda para después caminar de nuevo hasta la orilla del mar. Cuando lo ví desaparecer en el agua, me deje caer. Las piernas me temblaban. Jesús. ¿De dónde había sacado tanta fuerza como para responderle asi? Me tiré el cabello hacia atrás, y me seque los ojos. Unas lágrimas rebeldes habían querido resbalarse por mis mejillas. No. No iba a permitir llorar frente a él, y sobre todo no iba a llorar por él. Ya no más.
















                                                       

Mujeriego •Jimin• [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora