Lucía llegó a casa se quito el traje y se puso su pijama. Al colgar la chaqueta algo se cayó al suelo, era la servilleta en la que Dani había apuntado su teléfono, no se acordaba de que estaba allí. Dudo si guardarla, la verdad el chico no le caía mal era majo y era agradable hablar con él, y además muy guapo. Pero eran demasiado diferentes y además seguro que al no le importa ella ni lo más mínimo con lo guapo que es tendrá chicas para elegir.
Mientras tanto Daniel cansado ya de que le miraran, de escuchar a chicas pidiéndole que se vaya con ellas,de fingir sonrisas y rechazar disimuladamente y no tan disimuladamente a las que no le parecían interesantes, se fue .
Una vez en casa tumbado en su cama por alguna extraña razón se le pasó por la cabeza aquella chica rubia con gafas y recordó cuando ella cogió su número y se fue rápidamente
Ojalá me llamé - pensó
Espera, que acabo de pensar desde cuándo soy yo el que espera las llamadas y además ni siquiera es mi tipo, no esta del todo mal, pero no es mi tipo - se dice a sí mismo.
Lucía seguía dudando si llamarle. Al final decidió que puesto que ya era muy tarde y tenia sueño lo llamaría en otro momento.
Dani se pasó un rato dando vueltas en la cama no sabía porque pero se sentía inquieto sería por ella, no, no podía ser, seria por la cafeína de la Coca-Cola, si seguramente seria eso, pensó intentando auto convencerse de que no sentía ningún interés por aquella chica seria de la sonrisa preciosa.
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RomanceRomance entre una chica seria y un rompe corazones Conseguirá la chica seria hacerle sentar la cabeza o será ella quien caiga en las redes del rompe corazones