SOLSTICIO

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El solsticio de una noche de verano
navega sin rumbo dentro de un pantano,
Buscando una estrella
Que se le ha extraviado,
como una oveja de un gran rebaño.

El solsticio va y viene
Con la angustia entre sus manos
Y con la desesperanza pisando le los pasos,
camina sin rumbo
Entre el lodo y los pastizales
Buscando entre el mar de un charco azulado
En el cual, sólo halla su reflejo desencajado.

La noche se tiñe de rojo morado
Y corren por las calles cascadas
Desenfrenadas por encontrar un regazo donde emanciparse y no destruir nada más a su paso.

El solsticio se apaga
mientras se da cuenta que no le ha encontrado, y que tal vez, su estrella brilla en otro cielo
y no en su pantano;
Su luz desaparece como la noche
En la que no le ha encontrado
Y se funde entre el lodo que cubre
Su inmundo acantilado.

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