Capítulo 8

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Narra Inés

Las clases en la universidad se me pasan rápidas.

-Profesor: Ya os podéis ir. -Nos levantamos antes, pero Ana, me para.

-Ana: Tenemos que hablar. –*Esto no pinta muy bien… esta chica nunca quiere hablar conmigo* Pienso.

-Inés: Vale… -Cojo el bolso en el que llevaba las cosas, y vamos al baño a hablar.

-Ana: Como te acerques a Álvaro, mueres, ¿vale? –Dice acorralándome y haciéndome entrar en un baño. –Álvaro es mío y de nadie más. Como te acerques a él… te juro que no sales viva. –Me cae una lágrima.- No llores, llorica. –Dice riendo.

-Inés: ¿Por… qué?

-Ana: ¿Porqué? –Se ríe. –Porque Álvaro es mío, y solo mío. –Ríe de nuevo. –Haz como si no haya pasado nada. –Salgo del baño, me lavo la cara y salimos Ana y yo. –Espera. –Me empuja hacía la sala pequeña de limpieza, y cierra la puerta. –Ahí estarás mejor. –Escucho unas llaves. *La estará cerrando* Pienso. Ya no escucho nada, a nadie. Cojo mi móvil, pero me quedo sin batería.

-Inés: ¡Sacarme de aquí, por favor! –Digo llorando. Tras unos minutos, me quedo dormida.

*Después de dos horas…*

Me despierto con dolor de cuello, aún sigo encerrada ahí. Empiezo a pegarle a la puerta de nuevo.

-Inés: ¡Sacarme de aquí, por favor! –Digo llorando y pegándole a la puerta.

-Álvaro: ¿Inés?

-Inés: ¡Álvaro! –Digo llorando.

-Álvaro: ¿Dónde estás?

-Inés: En la sala de limpieza…

-Álvaro: ¿Y que haces ahí?

-Inés: No te lo puedo contar… pero por favor, ábreme.

-Álvaro: ¿Dónde están las llaves?

-Inés: No sé… busca en la sala del director.

-Álvaro: ¿Tú sabes en la que me estás metiendo? –Le iba a decir algo pero me callé.

-Inés: Por favor. –Digo llorando. 

-Álvaro: Ahora vengo. –Se marcha corriendo, lo escucho.

-Álvaro: Espero que sean estas… -Le escucho decir. Sonrío. Abre la puerta.

-Inés: Gracias. –Le abrazo y me levanta. Rompo a llorar. –Lo siento… -Me voy corriendo recordando lo que me ha dicho Ana.

-Álvaro: Espe… -Dice Álvaro, pero ya me he marchado. Estoy afuera de la universidad, solo hay un coche, el de Álvaro. Empiezo a caminar para irme a casa, tardaré bastante, pero no tengo coche. Antes de que me aleje, noto unos brazos por mi cintura y que me levantan.

-Inés: ¡AH! –Digo asustada. Giro la cabeza y es Álvaro. Dejo caer la cabeza en su hombro.

-Álvaro: Te quiero. –Me susurra en la oreja. Se me cae una lágrima… -¿Por qué lloras?

-Inés: No puedo estar contigo. –Me baja y me doy la vuelta para mirarlo.

-Álvaro: ¿Por qué?

-Inés: No te lo puedo contar… solo… puedo decirte qué… te quiero. –No puedo más, lo abrazo, me da igual, si me tengo que morir, me moriré, pero no voy a perderlo, no. Le amo, no puedo estar sin él… no sería yo. No sé que haría sin él, a lo mejor no ha estado en los momentos que necesitaba gente consolándome, pero le amo. –Te quiero. –Me besa.

-Álvaro: Yo más. –Me sonríe y me besa de nuevo. -¿Nos vamos? –Asiento y me coge de nuevo. Río. Nos montamos en el coche y nos vamos a casa. -¿Me vas a decir por qué estabas en la sala de limpieza?

-Inés: ¿Se lo vas a contar a alguien? –Niega. –Ana…

-Álvaro: ¿Ana? –Asiento. -¿Qué te ha hecho?

-Inés: Me ha… amenazado. –Me mira perplejo. –Me ha dicho que si me acercaba a ti… me mataría.

-Álvaro: ¡¿QUÉ?!

-Inés: Y luego, me ha encerrado en la sala de limpieza…

-Álvaro: Dios. –Dice empezándose a cabrear. Llegamos a un semáforo.

-Inés: Tranquilo, Álvaro. Me da igual las consecuencias, yo voy a estar contigo porque te quiero. –Le beso. Álvaro arranca de nuevo y me suena el móvil, lo cojo.

- I: ¿Sí?

-D: Ey. –Río.

-I: ¿Qué tal, Dani?

-D: Bien, ¿te apetece quedar? –Miro a Álvaro.

-I: Lo siento, hoy no puedo. –Sonrío y Álvaro también.

-D: Bueno, ya quedaremos, hasta luego.

-I: Adiós. –Sonrío y cuelgo. Me guardo el móvil.

-Álvaro: Ya hemos llegado. –Me bajo del coche. -¿Vamos? –Me coge de la mano y asiento. Entramos en casa y no hay nadie. Álvaro me empieza a besar. Sonrío y subimos a su habitación. Álvaro tira su móvil a la cama y me pone a mi debajo de él.

-Inés: Te quiero.

-Álvaro: Te quiero. –Sonreímos.

Narra Ana

Estoy haciendo deberes cuando me llaman, es Álvaro, lo cojo y escucho que ¡¿Inés dice ‘’Te quiero’’, y luego lo dice Álvaro?! Me pongo de mala leche, cojo las llaves de mi casa, me arreglo un poco y salgo disparada a casa de Álvaro, se va a enterar Inés.

Llego a su casa y pico a la puerta. Me abre Inés.

-Ines: ¿Qué coño quieres?

-Ana: Eh, eh, no te pongas así. La que está enfadada soy yo. –Le empujo y cae al suelo. Río. –Te jodes, te dije que Álvaro es mío. –Baja Álvaro a toda prisa por las escaleras y ayuda a levantar a Inés.

-Álvaro: Ve a la habitación. –Le susurra en la oreja, y ella asiente. Se marcha corriendo.

-Ana: Hola, cariño. –Digo abrazándolo, pero él se aparta. -¿Qué te pasa, cielo?

-Álvaro: Ya no me creo tus juegos, lo siento, pero no.

-Ana: ¿Qué te pasa conmigo? ¿Qué te he hecho?

-Álvaro: ¡Mentirme! –Empiezo a llorar. –No llores porque no me creo ya ninguno de tus juegos, he sido demasiado tonto. Adiós. –Me cierra la puerta en las narices. Me marcho enfadada.

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Cuando pongo: *                     * <- Quiere decir que piensa algo esa persona que está narrando.

Ej: *Esa persona me cae mal* 

Ahora cuando piensen algo, pondré los asteriscos y ya no pondré al lado: ''Pienso'', ya que me canso, jaja.

Alvaro AurynDonde viven las historias. Descúbrelo ahora