Capítulo once

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NaruSaku_StevTasha


Luego de hablar con Franco, y aclarar las cosas se sentía más tranquila. Pero ahora estaba pensando en lo que estuvo a punto de pasar con él Conde, estuvieron a punto de besarse y no fue capaz de evitarlo por sí misma. Agradecía que Franco hubiera aparecido en ésos momentos, no quería herir los sentimientos de Máximo después de todo le debía mucho pero no estaba preparada para entregar su corazón nuevamente a nadie. No cuando aún sentía el recuerdo de Federico más presente que nunca en su corazón y dudaba que algún día podría volver a enamorarse. Estaba en la sala acomodando algunas cosas ya era algo tarde pero aún no sentía deseos de irse a dormir

Luego sonó el teléfono de la casa y atendió en unos segundos.- Sí familia Fritzenchuche, Conde no esperaba su llamada ¿Qué necesita?.- Pregunto esperando una respuesta.- No se preocupe que él problema con Franco ya está solucionado ¿Era sólo eso? ¿A una fiesta? ¿Cuando? No sé sí aceptar, creo que lo mejor sería no empeorar las cosas ¿Me entiende?.- Dijo esperando una respuesta desde el otro lado de la línea.- De acuerdo que tenga buenas noches, chau

Dejó el teléfono en su lugar y se paso las manos por su rostro, después de todo era mejor que se fuera acostar pensó subiendo las escaleras. Cuando entró a su cuarto Robertita ya estaba dormida se acercó a ella arropandola bien y luego se dirigió a su armario sacando su pijama

Una vez que se lo puso se acostó en su cama tapándose hasta los hombros y pensado sobre la invitación que le había hecho Máximo, la había invitado a una fiesta que harían en su honor y le pidió que fuera su acompañante. No estaba segura de aceptar pero después de todo se sentía en deuda con él, por lo tanto no sabía que hacer nunca se sintió cómoda en ésas fiestas de altas sociedades ni siquiera tenía ropa para presentarse en un lugar así ¿Qué caso tenía ir?

- No, seguro terminaré por hacer el ridículo y avergonzar al conde. Mejor no.- Se dijo así misma, luego dejó de pensar en eso y sacó debajo de su almohada la foto que tenía de Federico y la contempló por unos largos minutos undiendose en millones de recuerdos.- Nunca te voy a olvidar mí amor, mí principito descongelado. Buenas noches

Besó la foto y luego se acomodó para dormirse, apretando la foto contra su pecho
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Él día había amanecido estupendo con un sol muy brillante, y Florencia ya se había levantado con todas las pilas levantando a los chicos para que se prepararán para asistir al primer día de escuela. Le costo muchísimo despertarlos hasta que al final lo logró haciendo que se dirigieran rápidamente a la cocina a desayunar

Greta ya les tenía todo preparado pero aún seguían medios dormidos

- ¡Vamos che hoy es su primer día, arriba ése animó!.- Dijo Flor alzando un poco la voz aplaudiendo.- ¿Tincho tenes todo?.- Le pregunto al de lentes haciendo que asintiera.- ¿Y vos Tomás?

- Sí, tengo todo pero ¿No falta Roberta?.- Pregunto él niño mirando hacía alrededor de la cocina.- Mira que sí ella no va, yo tampoco he

- Los tres van a ir sí o sí y se acabó la historia, ahora mismo voy a buscar a Roberta que se quedó cambiandose. Las mujeres somos más lentas para esto Tomi.- Dijo a punto de salir de la cocina y dirigirse a su cuarto.- Se desayunan todo

Ordenó haciendo que los chicos quedarán encimados en la mesada dormidos

Flor iba a subir por las escaleras hasta que escucho que el timbre de la puerta sonaba, suspiró y sin más opción se dirigió hacia ella. Cuando habrio dijo.- Sí, mansión Fritzenchuche

En ausencia de ti Donde viven las historias. Descúbrelo ahora